Cap4: Nuevos amigos

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Desperté en un sillón con la cabeza en las piernas de Marce, mientras Laura me abanicaba.
― Por Dios mujer! Quieres matarme de un infarto? Que te paso? Porque te desmayaste tan de pronto??‼ ― me preguntaba, se le notaba realmente preocupada.
― Don…de…?
― Camino a casa ― me respondió Marce adivinando lo que quería saber ― te desmayaste en la boutique y nos diste un susto de muerte, como te sientes ahora? ― me pregunto mientras pasaba su mano por mi cabeza.
― Mejor… creo.
― Descansa, cuando lleguemos a casa descansaras un poco más…
― Si…
No recuerdo nada más, solo una vaga sensación de ser cargada y colocada en mi cama y unos vagos rumores.
― Se pondrá bien Laura deja de ponerte tan histérica.
― Pero no pude terminar de probarme todos los trajes que quería! 
― Quieres decir que solo estas preocupada por los trajes y no por tu amiga? ― pregunto alguien molesto, parecía ser Rafa… ― que superficial eres…
― Como puedes decir eso de mi? Eran trajes de marca! No eran cualquiera, y al final tuve que traerme uno de los primeros que me probé… ― sonaba realmente decepcionada.
― Vamos Laura, mejor cambiemos de tema antes de que te agreda ― esa era la voz de Marce, su timbre clásico era único ― ahora vete a dormir que mañana tenemos que preparar todo para el banquete.
― Si… ―respondió una no muy convencida Laura.
Desperté al día siguiente con un hambre única, el día anterior no había probado mayor bocado que unas cuantas galletas y unos sorbos de refresco así que me sentía realmente hambrienta, como si fuera a comerme…. Un pollo entero yo solita! 
― Hola Mel!, qué bueno que ya despertaste ― era la amable voz de Sandy.
― Sandy… cuanto tiempo dormí? Qué hora es? Tengo un hambre terrible, hay algo para comer?.
― Pues dormiste cerca de 14 horas, son las tres de la tarde, y si hay comida, espera un momento que ya te la traigo.
― tres de la tarde??‼― grite asustadísima y me pare de golpe, toda la sangre de mi cabeza se quedó en mis pies y volví a marearme.
― No aprendes verdad Mel? – Sandy me sujeto justo antes de que me cayera al suelo de bruces.
― Lo siento…
― Bueno cálmate un poco que corriendo a lo loco no ganaras nada.
― Pero la fiesta empieza a las seis – me queje – y los trajes?
― No te preocupes! Ya cálmate! Espera un momento a que te traiga algo de comer y allí hablamos.
Sandy volvió al rato, tardo casi nada, y mientras yo comía me explicaba que había pasado.
― Nos diste un susto de muerte sabias? Casi nos da un infarto cuando ese muchacho te trajo a la recepción cargada en brazos inconsciente para que respiraras un poco de aire fresco. Marce casi mata a Laura cuando esta solo se preocupaba por los vestidos en lugar de por ti.
― Típico de ella – reí mientras tomaba un vaso de jugo de naranja – podría venderme por un montón de telas de marca – ambos reímos ante mi comentario, pero sabíamos en el fondo… que Laura era capaz de eso.
― Pues después de ese susto decidimos volver al departamento, el muchacho se encargó de enviarnos los trajes y encajonarlos cada uno en las cajas respectivas, sabes algo raro?
― Dime?― pregunte curiosa.
― Ese muchacho, cuando me entrego tu traje me pidió que no se lo mostrara siquiera a Laura, que era un traje que tu habías escogido y que prefería que lo luzcas tú y no ella, que te parece?
― Mmmm raro, pero si lo analizamos fríamente… creo que tenía razón.
― Es cierto, creo que hasta ese mismo muchacho se dio cuenta que tipo de personita es Laura.
― Y hablando de ella – pregunte – donde esta Laura?
― Donde más? En el salón de belleza.
― Qué? – pregunte divertida.
― Si, se fue desde esta mañana a hacerse un tratamiento completo de spa.
― Qué??‼‼ ― pregunte más sorprendida aun – un tratamiento de spa? Completo? Pero eso es carísimo‼‼ y de donde saco el dinero?.
― Pues no lo sé, no me extrañaría que hubiera usado la tarjeta de alguien.
― Mmmm pobre de su prometido… terminara en banca rota.
― Sí, yo creo lo mismo, pero bueno, ahora te toca a ti, sé que las mujeres demoran demasiado en arreglarse así que alístate de una vez, no quiero quedarme hasta mañana esperando que salgas de la ducha, ve a ducharte tu primero.
― Jejeje, no necesitas pedírmelo dos veces ― me incorpore, estire mis músculos y me dirigí a la ducha, un poco de agua caliente relajaría mi cuerpo y me libraría del stress, además hoy me desquitaría en la pista de baile!
Me quede en la ducha más de quince minutos, realmente una ducha me sentaba muy bien, después de ello Salí del baño y me dirigí a mi alcoba, conociendo a Laura ya vendría completamente lista para irnos a la fiesta.
― Muy bien veremos el vestido.
Cuando destape la caja en la cual me habían enviado el traje había una nota en ella:

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⏰ Última actualización: Jan 27, 2018 ⏰

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Enamorandose del demonio✔(68 Capitulos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora