Amor y olvido(en edicion)

Capítulo 6 : Aprendiendo modales

- Bueno Mina, me tengo que ir a trabajar, volveré para cenar.

- De acuerdo, que pases un buen día- digo sonriéndole

- Tú también- dice devolviéndome la sonrisa- y ya sabes, si me necesitas llámame

- No tengo tu teléfono.

- Tranquila, ahora te hago una perdida y te lo apuntas. ¿ De acuerdo?

- Bueno, vete que si no llegarás tarde

Marcos se dirije hacia la salida,y se gira sonriéndome ; finalmente cierra la puerta.

Tras su marcha, quedo sola en la habitación acabándome el desayuno sumergida en mis pensamientos. Después de acabarme el desayuno me despojo de mi ropa y me ducho, me pongo ropa cómoda y seguidamente bajo las escaleras pensando en el trabajo que me queda por hacer en la mansión.

Me dirijo al jardín y empiezo a barrer las hojas secas de la entrada, el otoño ya está llegando y cada vez hay más hojas. Las voy agrupando en montones para luego poder barrerlo mejor, mientras barro oigo el rumor de los pájaros, que están atareados cogiendo ramitas para hacer un nido, sigo barriendo tranquilamente hasta que el ruido de un coche rompe la cálida atmosfera antes formada.

El coche se acerca y se abren las puertas de la entrada, es un mercedes negro muy bonito y con los cristales tintados.

Dejo la escoba y me dirijo al auto para ver quién ha llegado.

Antes de girar y llegar al aparcamiento oigo unos gritos y ruido de maletas.

-¡ Eres un estúpido!- dice la voz de una señora- por tu culpa no podré organizar bien la fiesta de otoño, y sólo quedan seis días

- Cariño...-dice la voz de un hombre

- Basta! Nunca te preocupas por mí, siempre piensas  en tu trabajo y a mí me dejas aparte.

- Cariño, no discutamos... nos pueden oir los vecinos

- ¿ Ves? Es eso a lo que me refiero, siempre preocupándote de lo que piensen los demás

- Sabes que no es así

- Si es así, pero da igual, no tengo tiempo para discutir.

Oigo cómo se acerca rápidemente y me dirijo con paso rápido a la entrada para que no me descubra.

- ¿Eres la nueva asistenta de Edward?- dice acercándose a mi  la señora que antes estaba discutiendo

- Así es, un gusto conocerla- digo sonriendo amablemente.

- ¿ Y cómo te llamas?

- Mina

- Yo me llamo Ángela, soy la madre de Edward y de Marcos; por cierto, que tal te va con Edward?

- Bien, me va bien- respondo falsamente

- Bueno, ya tendremos más tiempo para hablar sobre eso, ahora entremos a la mansión, tengo que hablarte de un asunto importante.

Avanzamos hacia la puerta de entrada y abro la puerta dejando pasar primero a Ángela.

Mientras nos adentramos al amplio salón no puedo evitar sentirme nerviosa por lo que me tiene que decir .

Me dirijo al sillón al lado de la ventana y me siento enfrente de ella. Nos miramos durantes unos instantes y  empieza a hablar.

- Verás Mina, es costumbre de nuestra familia celebrar una fiesta en la mansión cuando empieza el otoño. Sólo faltan seis días y tenemos que organizar rápidamente los preparativos, además, también querría que Edward asistiese a la fiesta, y que tu fueses su acompañante, ya que eres su asisestenta también podrías cuidar de él durante la fiesta.¿ Qué te parece?