Capitulo #2

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Si en algo era bueno era en socializar. Si en la escuela no era alguien reluciente en mi vida social lo era todo, ya que a mi parecer soy alguien muy amigable y gracioso... también podría decirse que tenía unos cuantos atributos estéticos pero algo como eso en mi lo tenía en segundo plano ya que la herencia que más me gusta de mi padre es lo extrovertido.

Aunque no era tan divertido con mi hermano por un lado. Era la persona que me gustaba pero eso no quitaba el hecho de que él me viera como un hermano (Lo que sería lo ideal y correcto) frente a las personas y trataría de cerrarme la boca en cada instante por ser alguien "molesto" y "ruidoso".

Así que después de ese pequeño resumen se puede dar a entender por qué mis amigas de otros salones me saludaban de lejos con una sonrisa, ya que al igual que la mayoría de las personas no eran lo suficientemente valientes como para venir hasta mí y decirme lo nuevo que estaba pasando en el mundo por culpa de la cara y carácter que mi hermano cargaba con él todos los días.

Y no es como que en mi salón fuese diferente, Baek era como un repelente y por lo tanto yo estaba condenado a estar solo cuando me encontraba cerca de él. Incluso nuestros lugares estaban muy marcados, ya que nadie había sido lo suficientemente valiente como para ver la reacción de Baek por tomar su lugar.

Al menos eso era lo que yo creía.

— ¿Po-podrías moverte? -le dije a la chica valiente que había tomado mi lugar junto a Baek. Normalmente no guardo mis pensamientos para este tipo de actitudes, pero es que si ella me dice no yo sé que aunque le diga algo grosero no va a moverse-

La chica en el que se suponía era mi lugar giro su rostro hacia mí, conecte mi mirada con la suya y esta como respuesta hizo una mueca muy característica que hacia cada que me veía.

Era alguien popular en la escuela pero eso tampoco significaba que había algunos que me odiaban por esa misma razón.

— ¿Por qué debería de darte este lugar? No creo que tu papi también te lo hubiese alquilado. Así que busca uno nuevo -sonrió- desde este lugar se ve muy bien la pizarra sin necesidad de tener a los profesores vigilando, largo

¿En serio hoy era el día en que tendría que renunciar a mi compañero de clase que había tenido desde que nací?

—- Pero es que... –Abulte mis labios. ¿Qué era lo que se hacía en estos casos? Nunca nadie antes había querido compartir un asiento con Baek, ¿Qué era lo que esa chica buscaba de nosotros después de casi querer meterme a la cárcel? Mire de reojo a Baek, quería ayuda, pero este solo levanto sus hombros y tomo asiento... gran ayuda- ¡Ese es mi lugar! -moví mis pies en forma de berrinche- No puedes tomar el lugar de los demás

— Ya te dije que yo no veo por ningún lado tu nombre –Dijo mientras simulaba revisar el pupitre frente a ella- No hay ningún lugar designado en la toda la clase, así que busca otro lugar en donde sentarte

Maldita loca.

Era cierto lo que decía. Así que sin agregar nada reacomode mi mochila en mi espalda y gire mi vista hacia los asientos libres.

¿Tenía que hacerme la idea de que estaría solo el resto del día?, ya no había nadie para emparejarme.

Al poco tiempo de que empezaba a aceptar mi destino el profesor entro por la puerta con un gran libro entre sus manos, el cual de solo verlo me dio flojera. Mis ojos se cansaron de solo imaginar que nos tendría escribiendo toda la clase.

— Chicos, saquen la tarea que deje la última clase para revisarla en grupo

¿Tarea?

Voltee a ver a Baek con el ceño fruncido, él no me había mencionado ninguna tarea. El chico sonrió burlescamente y me saludo a lo lejos alzando su mentón.

Los gemelos Kim -Primera Temporada-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora