Capitulo #4

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— Ellas son las escandalosas –Dijo para continuar nuestra platica. Reacomodo entre sus dedos los palillos y entonces continuo hablando- A veces sólo me dan ganas de decirles algo grosero para que me dejen en paz, ¿tú no?

— Si -respondí de inmediato. Era un buen camino... Eso significaba que no le gusta ninguna de ellas, ¿tal vez tenga oportunidad?-

— ¿Si? -soltó una pequeña risotada- Suficiente tengo con Yang Min en casa, tal vez luego tenga tiempo de salir con ella

— ¿Salir? ¿Te gusta?

Después de todo tenía que preocuparme. Yang Min era una vieja amiga de mi hermana menor, no era exactamente de su edad pero fuimos amigos desde que nosotros eramos pequeños. Pero por alguna razón a mi yo pequeño le parecía una fantástica idea el hecho de bromear a cada momento sobre una relación de Yang MIn con Baek.

—Yo no puedo responder eso, es la amiga de Sani y esta todos los días ahí, si no salgo con ella se verá como una arrastrada

— ¿Desde cuándo te importa?

Estoy hablando sin pensar. Que alguien me ayude.

— Oye, tranquilízate -Me miró extrañado- ya sé que hay chicas más bonitas de ella -Bebió un trago de su jugo-

Los pequeños ratos cuando se podía platicar con Baek eran escasos y justo ahora ni siquiera mi cerebro reaccionaba a la idea principal de comer y beber, me asusta, pero no al extremo de preocuparme demasiado... Y claro que no me refiero al almuerzo.

Según mi yo más joven consideraba una buena idea emparejar a mi hermano con una chica, entonces... ¿Por qué estoy traicionándome? Solo me gusta porque él siempre me protege... ¿No es así?

— Pero ya si te molesta que solo yo salga con alguien, ¿por qué no te consigues una linda chica y salimos los cuatro juntos?

— ¿Cuatro? –Repetí en interrogativa y este asintió calmo- Yo no podría hacer eso -Sonreí. Si seguía actuando igual de hostil se daría cuenta, menos mal que todo el tiempo fuer alguien bromista-

— ¿No puedes o no quieres? -Ladeo su rostro en busca de mi mirada- Según yo... Había alguien que te gustaba

— Tal vez la haya -Tome de vuelta entre mis dedos los. Baek estaba en suspenso, pero no iba a decirle la verdadera respuesta por mucho que lo quisiera-

Mi gemelo examino con detenimiento mis palabras, se podía saber por su ceño frunció... Y claro, porque se quedó callado. Llevo su jugo a los labios y sorbió un trago, para después, volver a hablar.

— Yo no tengo a nadie... ¿Y tú? ¿Es cierto que hay alguien que te gusta?

— Yo... –Masculle al pasear mi mirada en diferentes direcciones-

¿Estará bien decirle que si? Tal vez solo dejarlo en la duda está bien. ¿Cuál es la posibilidad de que crea que es él mismo? IMPOSIBLE.

— Ya dije que tal vez

— No seas payaso. Dímelo de una vez -Inclino su cuerpo hacía el mío- ¿Quién es?

— Dije tal vez –Chasquee mi lengua tras darle un leve empujón- No confirme nada

Incluso estoy dudoso sobre si estaría bien gustar de ti.

—Dime quien te gusta -alzo repetidas veces sus cejas-

— Si te lo digo no vas a creerme. Y aunque tuviera alguien que me gustara, ¿qué ganarías sabiéndolo?, seguro en tus planes solo estaría estropear todo

Era evidente que no podía decirle la verdad a menos de que fuera mi confidente o tan solo no siendo la persona que me gustara. Sin embargo fue cuestión de segundos para que su expresión curiosa cambiara a una mueca burlesca acompañada de una risa soplada.

— Como sea -Elevo sus hombros- No creo que sea alguien interesante si te gusta a ti. Jamás te hará caso, piénsalo, ¿un chico como tu entre cuantas posibilidades alguien se quedaría tanto tiempo contigo? A duras penas te soporto porque eres mi hermano

— ¿Estás atacándome porque te dije "gordito"? Tienes el alma podrida en rencor

—No, sólo estoy haciendo esta simple plática como un comodín para que sepas la verdad antes de que te estés enamorando de cualquier idiota que se te cruce

—Yo confió en que lo hará... también le gustare

Él no habla en serio....
¿Verdad?

— Sigue soñando

— No tienes que ser tan cruel conmigo –Abulte mis labios-

—Hey no llores -rio- ya sabes que estoy jugando, no llores, Seung...

—Cuida tus malditas palabras -le di un empujón- Cuando tenga una novia linda te morirás de la envidia -me levante de mi asiento. Si como no, una novia linda...- iré a la tienda por galletas, ¿quieres algo aparte de fastidiarme?    

Los gemelos Kim -Primera Temporada-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora