El Monstruo Bajo La Cama

La primera noche

Despues de que la Señora Rivers se fue continuamos viendo la casa.

- Te dejo escoger tu habitacion anda ve. - Menciono al caminar a la puerta de salida para traer las maletas del coche.
- Gracias. - Dije en el momento que subi a ver los cuartos arriba.

Era una eternidad de escaleras primero estaba emocionado y subia presuroso pero a la mitad fue disminuyendo mi entusiasmo al notar la cantidad de escaleras y lo enpinado que estaba.
Al terminar de subir el ultimo escalon me agache y me tumbe al piso con el corazon casi en manos sintiendome totalmente sofocado incluso senti casi explotar mis pulmones.

Al momento de sentirme en mejor estado comence a  dar los primeros pasos; inhalando y exhalando hasta que  decidi al fin avanzar y al elevar la mirada comence a analizar las habitaciones.
Pude observar que habia 3 habitaciones asi que podriamos invitar de vez en cuando a mis tios a quedarse.
Entre a la primera habitacion y me llamo mucho la atencion de que estaba arreglada como para un niño de mi edad, habia juguetes en un estante, juguetes muy viejos que preferi no tocarlos  hasta preguntarle a mamá; entonces vi la cama era muy espaciosa a decir verdad y podria dormir a mis anchas todas las noches y no como antes en casa de mis tios que por cantidad de primos y familiares dormiamos como 5 en una cama; era bastante incomodo, baje de la cama, continue observando la habitacion, tenia mesa de estudio con lampara y todo, un armario amplio y un tocador que llamo mi atencion una fisura que no concordaba con el color puro de la madera con algo de resina, parecia como maltratado con algun tipo de material filoso, era un rastro entrero que me llevaba hasta la cama que se encontraba al lado del tocador, cuando vi otra cantidad de fisuras a orilla de la base de la cama,

- ¿Que pudo haber pasado para que quedaran esas marcas? -.Mencione algo preocupado tocandolo con la yema de mis dedos.

Despues de haberlo analizado decidi dejarlo pasar ya que la habitacion en si me habia encantado, y entonces baje las escaleras hasta llegar a la sala y decirle a mi madre que habia encontrado mi habitacion.

- ¡¿Madre?!. - Grite para ver si lograba hacer que se acercara a la sala para verla.
- ¿Que pasa? -. Pregunto inquieta.
- Encontre al fin mi habitacion
Al mencionar eso en mi mente recorde de nuevo las fisuras, pero decidi no decirle a mi madre ya que podria ocasionar problemas con ella y la señora Rivers.
-Excelente entonces podemos subir tus maletas - Lo menciono ansiosa.
- Ohgg que pereza - .Mencione al recordar las escaleras y el trabajo que seria subirlas ahora con las maletas.
- ¿Porque pereza? Anda no seas flojo y sube tus maletas. - Ella menciono entregandome las maletas
- Shit. -Dije en mi mente porque si lo mencionaba frente a mi madre se molestaria.
Pasando ese horripilante momento con las escaleras que sabria que seria mi tortura diaria en esta nueva casa comence a desempacar al estar en la habitacion, puse en mi reproductor pequeño musica para pasar ese momento con mayor creatividad y gusto; puse mi cancion favorita You' re So Vain de mi idolo Marilyn Manson, asi es tenia 5 años y escuchaba con gocelo a ese artista que varios de mis familiares les extrañaba que llegara a gustarme un enero musical asi.
Al reproducir la cancion comence a bailar mientras ponia mi ropa en los cajones del tocador; y en el momento que terminaba de poner la ropa en el ultimo cajon senti de nuevo una respiracion muy extraña que erizo de pronto mi piel y me hizo brincar del susto.
- Tal vez fue loquera mia.-Confundido por lo ocurrido mencione eso al escuchar decir a mi madre.
-¡Nolan! La cena esta lista cielo corre para que no se enfrie hice spaguetti rojo tu favorito.
-No queria tener esa expresion de susto porque la preocuparia y ella continua feliz con la casa.
Asi que decidi bajar intentando olvidar aquel suceso, me sente el la silla del comedor quedando al frente de mi madre.
- ¿Ya terminaste de desempacar?-me pregunto mientras giraba su tenerdor para tomar los fideos y finalmente ingerirlo.
- Si, ya esta arreglado todo en mi habitacion -Mencione con una sonrisa en el rostro intentando disimular mi miedo anterior.
Hubo un silencio profundo durante toda la cena y me percate de algo muy peculiar en mi madre; y era que estaba mas arreglada, aseada y atenta  que antes ; la note algo maquillada en los labios y tenia lapiz negro en el interior del ojo que la hacia atraer tu mirada directamente un vestidos negro con una medias de naylon de conjunto y a ver en sus pies unos tacones no muy altos pero que le hacian verse muy bien, decidi preguntarle entonces.
- ¿Te vez mas arreglada no crees?-lo mencione con voz de intriga
- ¿Te parece? ¿Se me ve mal?- me respondio sintiendose preocupada por su aspecto.
-No claro que no madre te vez linda - respondi con sinceridad
- Gracias pequeño pense y decidi finalmente que como estamos empezando un cambio nuevo en nuestras vidas yo debia cambiar mi aspecto ya que esto es para mejorar y estemos bien no crees?
- Claro Mamá. -Al reponder continue terminando los spaguettis.
Me quede pensando y entre mi dije, mi madre cuando estaba con mi aquel hombre (mi padre) ella no se maquillaba, no usaba ropa de su agrado; sinceramente siempre estaba muy fachosa incluso su cabello desarreglado y legañosa eh incluso con los ojos muy inchados de tanto llorar, mi mamá en verdad vivia muy depresiva y no era quien ella queria ser; no termino sus estudios por el hecho de que me tuvo y mi padre se lo prohibia por celos, me alegra que al fin ella se vea tranquila y se quiera más con este cambio en su persona que le hace bien.
Esos aspectos hacian sentir menos afecto ante aquel que yo solia llamar "padre".
Dejando a un lado esa cruel realidad, recorde lo que habia pasado en mi habitación; tratandome de dara a entender que esa respiracion fue una alucinación mia y no era nada malo , o incluso que podrian ser mis nervios de estar en un nuevo habitad.
- Ya termine de comer. - le dije a mi madre para poder retirarme.
- Bien hijo, lleva tu plato a la cocina para lavalo eh irnos a dormir.- menciono al dar un ultimo sorbo a su cafe.
Al realizar lo que me dijo decidi subir aquellas infernales escaleras y al fin ir a la cama;
Al recostarme al fin escuche un crujido en la vieja madera de la base de la cama, se escuchaba que rasgaban con algo filoso la orilla, y baje la cabeza para observar debajo de la cama, demasiado oscuro pero no se lograba ver nada, volvi a recostarme y dejo de crujir y termine finalmente por quedarme profundamente dormido.