Capítulo 21

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Chris

Se podía ser mas estúpido en la vida? Dios! Nunca en mi vida me había comportado así ante ninguna chica. Bueno si, con Miriam pero eso fue diferente.

-Hay Chris, que tienes?- me reclama Joss

-Ya te dije que nada- le respondo secamente

-Pues no me lo parece. Desde que entramos a la cocina te pusiste como si hubieras visto un fantasma.- reprocha totalmente cabreada

-Aaaay quieres dejarlo estar ya?!- grito y ella se sorprende- ¿Sabes que? Mejor me voy con todo y mi mal humor para no echarte a perder la fiesta- digo y doy media vuelta hacia las escaleras para subir a una habitación.

En el camino Aaron me pregunta por Andrew. Pero le respondo que no lo he visto.

Llego a la habitación de mis padres pero no me adentro sino que camino hacia el baño donde esta Andrew.

-Si quieres entrar no tienes que pedir permiso- bromeo con él

-Jajaja gracias. Estaba con el pendiente de si era lo correcto- me sigue el juego

-Vamos, entra. No quiero que hagas tus necesidades en tu ropa-

-De echo, me comprarías unos pañales? No pude aguantarme y ups..- dice muy seriamente y unos segundos después estallamos en risas

-Ay hermano, ya fuera de coto ¿que haces aquí?- le pregunto

-Cuidando que nadie profane tu baño para hacer sus travesuras- dice y volvemos a reir

Por estas razones son por las que lo veo como un hermano. Le agradezco a Dios por darme a un amigo como el.

-Jajaja gracias Andy, que haría sin ti. Pero ¿que te parece si lo profanamos tu y yo?- le pregunto pícaramente

-Ya te estabas tardando chiquito-

Nos observamos fijamente a los ojos y segundos después volvemos a estallar en risas.

¿Que? Hay que chotear 5 minutos al día. Eso lo dijo mi locutor favorito

-Ya, todo listo- escuché una voz femenina

-Oh si- dijo Andrew un poco sorprendido. Como si hubiese olvidado que estaba con una chica

Y la chica era nada más y nada menos que la señorita Miller.

A veces creo que el destino me esta haciendo una mala jugada o algo así.
Siempre me la encuentro por todos lados a todas horas.

-Ah, oye por cierto Aaron te estaba buscando- me dirijo hacia Andrew

-¿Que quería?- me pregunta

-No lo sé, pero mejor ve a buscarlo- le sugiero

-Si, tienes razón. ¿Kari me das unos minutos? Enseguida vuelvo- dice y ella asiente y le regala una sonrisa.

Mi amigo da la vuelta y se dirige a la planta baja.

¿Y yo? No sabía que hacer. No sabía si debía hablarle o irme a la habitación de mis padres. Me estaba poniendo nervioso y mis manos empezaban a sudar.

-Bonita casa- dice ella aligerando el ambiente

-Gracias, bueno como te habrás dado cuenta es casa de mis padres-

-Mmm si, ya veo

-Si.

-Ok

-¿Y que hay de ti?- pregunto en un triste intento de seguir escuchando su voz. No se por qué lo hago pero bueno

-Nada, mis padres me aman tanto que decidieron dejarme en el internado- dice sarcasticamente

-Vaya... yo pensé que eras la nena de tus padres- confieso algo confundido.

Aunque no tiene para nada ese estilo, una parte de ella se me hacia como muy mimada.

-¿Te lo parezco?- pregunta y eleva una ceja

-Ahora que lo pienso mejor?... no-¿Sabes? Pensé que eras mas desagradable

-Ah si?- cuestiona. No se porque me da la impresión de que esta coqueteando conmigo

-Si, más amargada, ya sabe señorita Miller

-Pues usted señor Vélez me sigue pareciendo un prepotente-

-¿Por que piensas eso?- pregunto y lentamente me voy acercando a ella.

No responde y quedo a unos centímetros de ella. Bajo la mirada a sus labios y ella hace lo mismo, muerde su labio inferior y me provoca. Acorto la distancia entre ambos y atrapo sus labios con los míos. Sus labios saben a cereza y su boca tiene un ligero sabor a cerveza.

Es un beso lento y de verdad que lo hace muy bien.

-Ya Kar...-escucho

Miller sale del trance y me empuja con fuerza, seguido de eso me da una cachetada.

¿Es enserio? ¡Que diablos con esta mujer!

Y se va directo hacía donde esta Andrew. Mi amigo solo mira desconcertado la escena como no sabiendo que hacer. Yo con un movimiento de cabeza me digo que vaya con ella. Ya tendré tiempo para hablar con el.

-Aggg que estúpido!!-me digo a mi mismo

No le hablen de Amor [Christopher Vélez]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora