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Sam y Thea de alguna forma extraña se llevaban mejor que hasta yo con Thea, aunque ahora que lo recuerdo desde el encierro de Thea no había hablado con ella, si intercambiábamos palabras solo era para decirle que le traía comida y ella agradecía, en eso se terminaba, de vez en cuando me pedía algún libro y durante las noches a veces alcanzaba a escuchar sus pasos en camino a la cocina por lo general para tomar algo, esta vez estábamos en el sillón, frente mío estaba sentada Thea y a su lado estaba Samantha, parecía el dúo que no te gustaría hacer enojar, sobre toda con toda la ropa llena de sangre, al igual que la cara y el cabello, frente de nosotros posaba la mesa y sobre esta varios papeles, los cuales aseguraba Thea eran los papeles que afirmaban que éramos hermanos, llevábamos en silencio casi una hora, los cadáveres aún descansaban a un lado de nosotros, era una escena completamente irreal, me costó asimilar toda la información, hasta que le pedí a ambas que demostraran que era real de lo que hablaban, Thea subió corriendo a su cuarto y sacó papeles donde se juntaban el apellido Page y Holland, el primer apellido de Thea era Page, el apellido de mi padre, él había tenido una aventura, de allí que me sonara el apellido de Thea tan conocido, era mi hermanastra y los papeles de nacimiento y demás demostraban l verda, que bueno que no la mete, aunque me pude haber evitado muchos problemas si lo hubiese hecho.


-okay, te creo, pero...-volteo a ver a Samantha y ella me extiende una prueba de embarazo, con positivo, suspiro pesadamente y ella habla como si me pudiese leer la mente.


-si es tuyo, antes de venir a la casa yo era virgen, despues...bueno, encontre el amor en ti-dice Samantha y Thea y yo no podremos evitar hacer una mueca de asco con el ultimo comentario, innecesariamente ridiculo.


-¿y ahora qué?, el pueblo ya te dio por muerta, no es como que el dia que des a luz sea como "Ops, ¿que creen?, en realidad estaba viva, William me secuestro y violo hace mas de un año y ahora voy a tener un hijo suyo"-pronuncio con un tono burlón y alegre al mismo tiempo.

Samantha se pone de pie, la sigue Thea y yo simplemente me les quedo viendo, ambas se voltean a ver como si estuviesen planeando mi muerte para luego huir del pueblo dejando mi cadáver tirado como el del engendro o el de Dhasia, después de unos segundos Samantha me voltea  a ver y habla.

-no lo voy a abortar, ¡William, seremos padres!-dice en un tono extrañamente alegre-tendremos un lindo hijo, seré una buena esposa y tu....

no lo puedo evitar y la interrumpo con una fuerte carcajada.

-¿Esposa?, Sam, ni siquiera somos novios, no te voy a convertir en mi esposa sólo porque tuvimos sexo sin condon, tal vez te mate y tire tu cadáver por la alcantarilla, nadie te va a extrañar, según todos ya estas muerta, otra pobre víctima del asesino serial de un pequeño pueblo en la mitad de la nada, a nadie le importa este lugar, a nadie le importaras, nadie te llorara, tu madre ya lloró lo suficiente, pero ¿qué mas da?, un hijo mas, uno menos, es lo mismo.

hablo con toda la verdad que me encuentro a mi paso en mi mente y después de unos segundos Samantha explota en lágrimas y llanto descontrolado, si la casa no tuviese paredes anchas me hubiese sido un problema el drama que Samantha se estaba creando solo por escuchar la verdad, Thea abraza a Sam y me voltea a ver negando con la cabeza, como si mi acción hubiese sido mala, a lo que le respondo con una sonrisa amplia, dejando ver mis ambos hoyuelos, tenía tanto que no sonreía de esa manera que hasta me resulta extraño, hasta podría apostar y asegurar que parecía mas una mueca extraña que una sonrisa, Thea no suelta a Samantha y se la lleva escaleras arriba, sin dejar de mirarme extraño, una vez que están ambas fuera de mi campo de visión,  volteo y veo el cadáver de el engendro cuyo nombre seguía desconociendo, después de cargarla y llevarla a el patio, regreso a la sala y veo el cadáver de Dhasia en el piso, me pongo de rodillas y sin dejar de verla, cierro sus ojos con mi mano y antes de dejar salir algún extraño e impropio sentimiento, la levanto del piso y voy al patio trasero, dejo su cuerpo a un lado del engendro y voy a dentro de la cochera, tomo entre mis brazos bastante leña, la suficiente como para hacer una pequeña hoguera, regreso al patio y la dejo caer en el piso, entro de nuevo a la cochera por gasolina y una caja de cerillos, , baño la leña con toda la botella de gasolina y hecho la botella vacía junto a la leña, entro de nuevo a la cochera y tomo un hacha que había afilado hace ya algunos meses y sin mucho remordimiento comienzo a separar las extremidades del cuerpo del engendro y lo pongo sobre la leña, una vez que termino, volteo a ver el cuerpo de Dhasia y un golpe seco le rebano la cabeza, intento no pensar demasiado antes de arrepentirme y para cuando termino dejo su cuerpo sobre el del engendro y enciendo la caja completa de cerillos, bajo la vista, le había abierto los ojos durante el proceso y ahora parecía que me miraba directamente a los ojos, después de suspirar pesadamente dejo caer la caja incendiada sobre la hoguera, sobre mi tipo de mujer ideal, mientras que Samantha miraba desde la ventana del cuarto, cuando alzo la mirada a ella, la esquiva y Thea cerra las cortinas, para cuando entro me doy cuenta de que mi coleccion de chicas no creceria. Por lo menos si no mataba a Samantha y Thea, si me deshacía de ambas mi vida seria relativamente mas sencilla, por lo menos no seria padre...si matara a Samantha....                                                              

Los extraños fetiches de William Page (+18)  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora