Proyecto pesadilla (La familia creepypasta)

Misión-108: Lluvia de ideas

—Que pasa Jane? —Jeff entró al cuarto de la adolescente.

—Toby no contesta...

—Sé que estás intranquila, yo estoy igual... Pero ya sabes que solo los proxys soportan la influencia de Slenderman —argumentó el castaño—. Que tal si vamos a practicar un rato? Eso siempre te relaja.

—Quizás luego mi amor... Ahora solo quiero saber como estará Sally... —dijo la rubia antes de sentarse en su cama y acostarse. Antes de que su novio la dejara tranquila, sola en su habitación.

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En medio de la tormenta, los 4 jóvenes corrían apresurados por los árboles, escapando de los pocos soldados que trataban de alcanzarlos. Intentaban no matar a nadie de no ser necesario, ya que no tardaron en darse cuenta que era el granizo el que provocaba aquella euforia maniática en sus agentes.
La tempestad rugía en el despiadado cielo al mismo tiempo que los gritos de agonía de todos los humanos presentes resonaba con fuerza en la noche.
La iluminación bailaba entre las negras nubes, acompañadas por los breves destellos de las armas siendo disparada en forma de balacera hacia los muchachos.
Las miles de piedras que desprendían las nubes caían con una exagerada agresividad, golpeando a los adolescentes que divagaban con dementes ideas con cada una que los alcanzaba.

—Ya es suficiente —Nefilim se volteo en ese instante empuñado sus cuchillos.
Y a pesar de las ordenas de Toby, la chica se dispuso a permitir que los agentes se acercaran lo suficiente para contar los tendones de sus pies. Al menos de esa forma ya no serian perseguidos—. Hay que encontrar a Sally y al payaso.

—Se puede saber que tienes en contra de Jack? —pregunto Toby antes de continuar su camino. Intentando ignorar la idea de rasgar la ropa de su amiga.

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—Señor Jack...

—La lluvia no los toca... —susurró el payaso en tanto veía como aquellos dos gigantes permanecían completamente secos—. Mierda... En que me metí...?

—Cual es Slenderman? —pregunto Sally.

—Esperaba que tu me lo dijeras mocosa...

—Creo que son ellos los que provocan la tormenta...

—Tu crees?

—Skin Taker tenía más poder...

—Un momento, puedes sentir su poder?

—Creo... No lo sé... siento algo, Por qué?

—Por nada...

Un devastador rugido sacudió el cielo en ese instante. Iluminando el bosque con un relámpago que anunció el instantáneo acercamiento que tuvieron aquellos dos monstruos.

—Niña!! —Grito Jack. Antes de abrazar a la infante.
Un estallido grave resonó en el lugar, antes de que una devastadora ráfaga de viento alejara a los agentes con una enorme facilidad.
Las hojas de los árboles, la propia lluvia, las personas que viajaron hasta allí, los desafortunados animales de la zona. Todo fue alejado violentamente por aquellas dos criaturas que de un momento a otro estuvieron a menos de un metro frente a frente.
El payaso y la niña volaron por los aires, siendo bruscamente detenidos por un tronco que se interpuso en su camino. Golpeando y crujiendo la espalda de Jack, quien hasta que esos segundos de caos no soltó a Sally.

—Señor Jack!!

—Estoy bien niña, no siento dolor, recuerdas? —El payaso se puso de pie, siendo observado por la infante. Tratando de ocultar el hecho de que no pudo evaporarse para evitar daño, su poder fue anulado por ese viento demoníaco.
Y entre tanta preocupación y dudas el comediante no notó que Sally vio temblar una de sus garras, aquel golpe si lo afectó de alguna manera—. Cúbrete...