-"Pase adelante, nosotras lo trataremos bien" dijo Yessi al hombre elegante que pasó frente al local, mientras jugueteaba con el dobladillo del vestidito azul que apenas y cubría sus partes privadas. el día no había empezado bien ya llevaba tres horas sin clientes, las cuatro chicas se distraían viendo revistas de cosméticos, sentadas sobre unas sillas acomodadas de tal forma que al cruzar las piernas los hombres que pasaran frente al local pudieran observar gran parte de la mercancía "sus cuerpos". Una silueta ingresó al interior del local y se levantaron de sus asientos para recibirle, era un hombre que rondaba los cuarenta, de aspecto serio, al verle las chicas formaron una fila para acercarse, cada una se presentó con su alias, y luego Yessi que estaba más cerca de él le dijo "elija a quien usted quiera para el servicio", el hombre las repasó con la mirada y se acercó le ofreció la mano a quien tenía más cerca, "a usted linda" dijo a Yessi quien le regaló una sonrisa y le invitó a pasar al fondo del local, deslizó una cortina e ingresaron al cuartito donde solo había una cama pobremente arreglada y un ventilador de pedestal, al ingresar se colocó muy cerca de él, le explicó mientras jugaba con su vestidito "la tarifa es veinticinco por media hora, incluye el oral y la posición que usted quiera, se paga por adelantado", el hombre sacó su cartera y pagó la tarifa "muy bien póngase cómodo ya regresó", dicho esto salió de la habitación y cerró nuevamente la cortina mientras el caballero de acomodó sobre la cama y comenzó a desvestirse, tres minutos después Yessi regresó con un bolso, observó al hombre desnudo sobre la cama halándoce el sexo, le sonrió nuevamente colocó el bolso sobre la cama y le dió la espalda para quitarse el vestidito, tenía un cuerpo muy hermoso, de medidas perfectas y una cabellera negra y lisa, la vista de sus nalgas era todo un espectáculo de gran magnitud y belleza, llevaba puesta una tanga anudada a ambos lados que hacía conjunto con el sostén, ambos en color negro, se dió la vuelta mientras soltaba el nudo de corbata del sostén, se lo quito al tiempo que se acercó al hombre que ya estaba muy excitado solo con la vista, sacó de su bolso un preservativo, lo sujeto de la punta con los labios y se acercó para colocarlo, el caballero de separó de ella y la sujeto de los hombros.
-"disculpe señor pero son las reglas del local, es obligatorio usar condón para la penetración" lo dijo muy seria
-"no quiero que hagas eso linda solo ven y recuestate a la par mía por favor" el hombre tenía un rostro amable y no parecía estar pensando nada malo
-"bueno pero no me quitaré la tanga a menos que se ponga el condón" dijo y se acostó viendo hacia el techo mientras él la observaba
-"o no querida, yo no quiero penetrarte" se acercó a ella y comenzó a besarle el hombro, le acariciaba los pechos y le rosaba el pene en la pierna
-"¿esto es lo que te excita bebé?" dijo sintiéndose un poco extrañada, los fetiches de algunos de sus clientes le resultaban desde inusuales asta risibles, de pronto recordo a uno de sus clientes masturbándose con uno de sus pies, otro que solo quería verla y masturbarse, y más casos así, 'este es otro caso rarito' pensó mientras pasaba su brazo sobre la cabeza de su cliente invitándolos a mamarle los pechos.
-"oh mi amor, estas tan rica" le exclamó mientras le estiraba uno de los tirantes de la tanga y colocaba su pene entre la piel de la cadera y el tirantes de la tanga, luego comenzó a frotarse mientas le lamía los pezones
A Yessi le pareció muy erótico el rose del pene caliente y duro en su piel, y la suavidad de las caricias que la lengua hacia sobre sus pechos, la estaban poniendo muy mojada, pero un minuto más tarde el hombre soltó un gemido, la abrazo con fuerza y Yessi pudo sentir un líquido pegajoso y tibio que impregnaba parte de su abdomen y costillas, le ofreció un rollo de papel higiénico para que se limpiará, ella agarró un poco del mismo y se limpió un poco luego le pidió permiso y se levantó dejándolo aún jadeante sobre la cama, salió del cuarto en dirección de la ducha al final del pasillo, se lavo el cuerpo se cubrió con una toalla y regreso al cuarto, el caballero ya se había vestido nuevamente, le regaló su linda sonrisa y le dijo "espero lo haya disfrutando tanto como yo" a lo que el caballero respondió "oh sí estuvo muy bien, creo que me verás de nuevo por acá muy pronto, ten, esto es para ti, por portarte bien" le dejó quince de propina y se retiró. Yessi sacó del bolso un conjunto limpio de tanga y sosten y se los colocó, se puso el vestidito nuevamente y regreso con las demás chicas a las sillitas.
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Placeres Breves
ContoColeccion de vivencias colmadas de erotismo y sensualidad basadas en hechos posibles