Raven.

Capítulo 1: "Perdidos" pero nunca "Encontrados".

El aroma de la putrefacción es realmente penetrante, desearía que mi nariz no funcionase para no tener que soportarlo, además, de que desearía que mis ojos tampoco lo hiciesen para no tener que ver los horrores que aquí yacen. Pero... En mi tiempo en este lugar una gran duda ha llenado por completo mi mente evitando que mis días y mis noches, que ya en si no me parecen para nada placenteros, sean aún más insoportables de lo necesario.

Mi duda, aunque muchos no lo crean, posee mucho sentido para mí, ¿Por qué?, ¿Por qué será no siento ningún dolor, miedo, tristeza o por lo menos, nostalgia hacia las vidas que veo desaparecer? Sera que acaso, ¿No soy humana?... Otra duda que recorre sin parar mi mente es, ¿Por qué aun no me han matado? A veces siento como si todo esto fuese hecho especialmente para mí... Aun pensar eso es absurdo... ¿Verdad?

Mi nombre es Raven, tengo dieciséis (16) años, dieciséis (16) de los cuales he pasado diez (10) en esta asquerosa (y con el paso de los años), oxidada jaula, no puedo contar con mis dedos la cantidad de veces que me he enfermado en este lugar y he estado sin recibir atención alguna, la cantidad de veces que espere llena de esperanza a que alguien nos liberase o la cantidad de lágrimas que en mi niñez abandonada libere dentro de esta jaula.

Se han dado en muchas ocasiones que los hombres que aquí nos mantienen traen consigo, periódicos, afiches o volantes, e incluso panfletos en donde se anuncian nuestras desapariciones.

La última vez que yo recuerdo que trajeron algo acerca de mí fue un periódico de hace ya seis (6) años, a pesar de todo aún logro recordar lo que decía el artículo.

Recuerdo muy bien que se encontraba mi foto en la primera plana con el título de: "se continua ardua investigación para encontrar a niña la cual ya lleva cinco (5) años desaparecida" ... Sin embargo, luego de cuatro (4) años más de investigaciones sin resultados la policía me declaro muerta y cerro por completo el caso, ya en ese entonces yo había pasado a tener quince (15) años y como regalo de cumpleaños lo único que recibí esa noche aparte de ser nuevamente violada y torturada fue un nuevo periódico, era solo un pedazo roto de una de las hojas en donde se anunciaba claramente que se había encontrado el cuerpo sin vida de una mujer abusada sexualmente y golpeada a mas no poder en pleno callejón donde un civil solía salir a sacar la basura de su negocio, lo peor de todo es que la policía encontró marcas de soga y la misma atada alrededor del cuello de la pobre mujer por lo cual dedujeron que la causa de muerte no habían sido los golpes o algún derrame o contusión causada por ellos, sino que debido a ellos y a la agresión sexual, la ya moribunda victima decidió ponerle un fin a su sufrimiento y suicidarse, dijeron decidió ahorcarse con la ya mencionada soga en ese mismo callejón en donde fue hallada, nunca podré olvidar el día en el que leí esa noticia, para luego al seguir leyendo descubrí el nombre de esta pobre víctima, era mi madre.

Mi pecho se contaría con una enorme fuerza, tanta, que me costaba el conseguir aire, mi corazón latía con frenesí y mis ojos eran una cascada debido a las lágrimas la cuales no dejaban de fluir cual derrame de presa. No podía creerlo, no deseaba creerlo y sin embargo, era cierto. Me lamente cada día, inclusive hoy por no haber podido estar en su funeral, ni siquiera sé si tuvo uno... por cada año que pasaba desde el día en el que llegue aquí, siento como lentamente se oxidan los barrotes de mi jaula, se siente como estar sumergida en una infinita oscuridad la cual cada vez te absorbe más y más.

Los hombres que nos mantienen aquí se atrevieron, unos días después de entregarme ese pedazo de papel, a dormirme y tatuarme, tanto mi espalda en la cual me tatuaron las alas negras de un cuervo de forma irónica ya que saben que yo nunca voy a poder volar como uno de ellos para salir de aquí, también fue una burla hacia la apariencia de mis ojos los cuales son exactamente como los del ya mencionado, debido a que poseen una increíble tonalidad carmesí, además de que mi iris tiene la forma de una cruz que inicia desde el centro de mi ojo y se entiende al resto del este (tal vez no sea la típica apariencia de un cuervo común, sin embargo es la apariencia del cuervo el cual nos vigila), como mi hombro derecho en el cual me tatuaron la frase "Mors Sola" la cual al traducirla del idioma latín significa: muerte solitaria, este tatuaje lo colocaron en el centro de varias líneas curvas bien marcadas, eran como si fuesen triángulos curveados sin un orden especifico los cuales creaban un circulo alrededor de la dichosa frase la cual según ellos me recordaba que ese era mi destino, una muerte fría y solitaria, y también como ya era costumbre para ellos desde el día que estoy aquí, volvieron a usarme como juguete sexual, ya que lo hacen cada vez que les place...

Casi nunca puedo lograr conciliar el sueño lo cual me ha creado una enormes y oscuras bolsas bajo mis ojos, sin embargo, eso es lo de menos...

Hace ya un año que eso ocurrió... pero ahora, ya con la edad de dieciséis (16) años, las cosas aún siguen siendo iguales... "Los Desaparecidos" van y vienen... Ninguno nunca escapa y yo por alguna razón continuo con vida mirando como todos en algún punto cambien y pasan de ser humanos asustados y moribundos, a ser cadáveres putrefactos y devorados por ratas y ratones.

Sigo sin poder dormir...