-No Todo Dura Para Siempre- Finn Wolfhard

7

NARRA FINN:

-- Me acompañas al baño, Will? -- le pregunté deseando que respondiera que sí.

-- Sí, vamos.

Nos levantamos de la mesa y fuimos hacia baño.

-- Ya no aguanto más --dije frustrado cuando entramos a este.

-- ¿Que no aguantas? -- preguntó Will-- ¿Las ganas de orinar?

-- ¡No, estupido!Las ganas de cagar...-- dije sarcástico-- ¡Brooke y Jeaden! -- le pegué en el hombro.

-- Ahh -- rio-- pero... si apenas la conoces hace dos días.

-- ¿Y cual es el problema? Me gusta, me encanta.

No soportaba ver a Brooke con otro chico, quería que fuera mía.
Suena tonto lo sé, pero es que desde la primera vez que la vi algo en ella llamó mi atención... La manera en la que te escuchaba, su manera de hablar, en como actuaba en frente de distintas cosas, todo, me encantaba todo de ella. Tenia que decírselo antes de que fuera tarde.
Antes de que haya caído en las redes de Jeaden.

-- ¿Y que esperas? Tienes que decírselo, pero apresurate, hoy irá a la casa de Jeaden y pueden pasar muchaas cosas -- dijo Will mirándose en el espejo.

-- ¿Cuándo? No ahora.

-- Después de la escuela, tonto.

-- Okey, lo haré, tengo que hacerlo-- suspiré.

Narra Brooke.

Después de la escuela me encontraba caminando hacia casa, sola, ya que me había adelantado para poder hacer los deberes antes de ir a la casa de Jeaden, cuando siento que alguien grita mi nombre, giré mi cabeza hacia atrás y era Finn.

-- ¡Espera! -- gritó mientras corría hacia mi-- hola --dijo agitado.

-- Hola -- continúe caminando.

-- Espera -- agarró mi mano -- tengo algo que decirte.

-- Ahora no puedo, estoy apurada.

--¿Qué, tienes que ir a alistarte para ir a la casa de tu nuevo noviecito?-- preguntó celoso.

-- No te importa-- me zafé de su agarre-- te comportas como un tonto a veces.

-- Por lo menos no estoy yendo con cada chica que se me cruza en el camino.

-- ¿Que mierda te pasa, inútil? Eres un celoso-- escupí -- yo puedo hacer lo que quiera, no estoy a cargo tuyo, y si quiero estar con Jeaden, lo voy a hacer porque no somos nada -- dí la vuelta para seguir caminando.

-- Aguarda.-- se paró delante de mi-- Lo sé, soy celoso contigo... Es que... Me gustas, Brooke, desde el primer dia que te vi -- se acercó a mi y posó su mano en mi mejilla-- por favor, no estés con Jeaden, no estés con otro. Quiero que estés conmigo-- mordió su labio inferior.

-- Qué mierda está pasando-- pensé.

Se fue acercando cada vez más, hasta que sentí nuestras respiraciones chocar. Mi corazón empezó a acelerarse demasiado, que cualquier persona que estuviera cerca podría haberlo escuchado. Estaba muy nerviosa, ese seria mi primer beso.

Sentí que sus labios se apoyaron en los míos y en ese momento mi estomago se convirtió en un zoológico de mariposas volando por doquier. Cerré mis ojos y me deje llevar por mis sentimientos.

Fue un beso tierno, lleno de sentimientos de cada uno, un beso que quería que se volviera a repetir una y mil veces con él. Solo con él.

Nos separamos y nuestras respiraciones eran agitadas. Bajé mi mirada hacia el piso y me sonrojé. Mi cara estaba completamente roja, sentía mis mejillas arder.

-- Hey -- me agarró de las mejillas e hizo mirarme a sus ojos. Él también estaba sonriendo -- ¿Fue tu primer beso?

Mordí mi labio interior y asentí.

Estaba por preguntarle lo mismo pero me acordé que tenia novia.

Dejé de sonreír al instante.

-- Dijiste que tienes novia -- saqué sus manos de mi cara.

-- ¿Qué? -- su sonrisa se borró por completo.

Sentí que el aire se tornaba tenso.

-- Sí, dime la verdad, ¿Tienes novia o no? -- lo miré fijamente esperando a que diga la verdad.

Soltó un suspiro.

-- No, es mentira, ella era mi novia, ya no lo es y nunca lo será, ya encontré a otra persona. Te encontré a ti y no quiero a nadie más.

-- Finn...

-- ¿Si? -- frunció el entrecejo.

-- Tú... Tú también me gustas, me gustas desde el primer día... Se que te conozco hace poco pero... eres una persona diferente a las demás, tienes algo especial que me llama la atención en ti.

-- ¿Enserio? -- volvió a sonreír.

Asentí.

Pude ver brillo en su ojos, se notaba en su mirada algo que nunca había visto, tenia felicidad en su rostro, al fin la pude ver.

Me acerqué a él y lo abracé con mucha fuerza.

Sus abrazos eran lo único que me hacían olvidar del mundo, con él me sentía diferente, con él podía ser yo misma, cuando estaba con él, solo él era mi mundo.