Mi Novia Es Mi Mascota

Especial J-hope parte 3

Lin

¿De verdad me estaba pasando esto? Desde que conocí a Hero, me he sentido completa y protegida y ahora que...ese hijo de puta lo hirió, tengo miedo de perderlo.

Por suerte a dos calles se encontraba un veterinario y rápidamente vecinos me ayudaron a trasladarlo. No quise meterme en el asunto del arresto del delincuente pues Hero es lo que mas importa en este momento.

Estaba en una silla esperando, a que el medico me diera noticias, dijo que solo sacaría la bala pero ya ha tardado demasiado, al parecer esta muy profunda. Tengo miedo, tengo miedo, tengo miedo.

-Lin...e-estaré bien, no te preocupes por mi- En mi mente resonó una voz, algo ronca y débil- Tranquila, no tengas miedo-

-¿Pe-pero quién eres?

-Hero...

Imposible...

-Mentira...

-No tienes que creerme, no me importa, te encuentras a salvo y eso me pone feliz.

-Señorita, perdone la tardanza.

-¿Cómo está?- salí del shock, no sabia en que momento había salido el medico.

-Su herida si es algo delicada por ahora, necesita de muchos cuidados. Es un milagro que no haya penetrado en un órgano la bala.

Milagro...él es un milagro.

-Gracias, de verdad gracias, ¿cuánto tiempo tardará en recuperarse?

-Siguiendo cada una de las indicaciones y respetándolas al pie de la letra, dos meses mínimo. No puede ni siquiera caminar. Esta muy delicado, con el tiempo podrá dar unos cuantos pasos, recomiendo ir de poco en poco. Va a necesitar reforzar muchos sus extremidades después de que se recupere

-Deacuerdo, yo me encargaré de él.

-Me alegra escuchar, ¿gusta pasar a verle?, aun sigue algo adormilado por la anestesia.

Me adentre a la mini sala de operaciones, y en medio de la habitación se encontra Hero, en una mesa de metal. Su mirada se encontró con la mía.

-Como lo siento Hero, no debiste hacerlo pequeño, te lo agradezco mucho, ahora yo me encargaré de cuidarte-dije acercándome lentamente a él, le acaricié su cabeza, ante tal acto cerró sus ojos, disfrutando de la caricia.

-Estará bien, es muy resistente- comentó el veterinario.

Eso fué lo que me dijo aquella voz, ¿será verdad?...

-Disculpe...¿es posible que los perros hablen?-dije mirando hacia la nada perdiéndome en mis pensamientos, preguntándome si sólo lo imaginé por la presión y el miedo que sentía.

-Hay teorías, que cuando un perro llega a tener un vinculo demasiado fuerte con un ser humano puede comunicarse con éste, sólo lo he visto una vez, y lo curioso es que pocas personas aseguran que sus perros se han convertido en seres humanos.

-¿Qué? eso no es posible.

-Suena descabellado ¿verdad?al principio yo no lo creía, pero me pasó a mí.

-¿Está diciendo que usted ha hablado con un perro?

-Si, así es, se llamaba Maki, por un descuido mío en la calle falleció, se puede decir que por ella me convertí en veterinario- lo volteé a ver, esta sonriendo, como recordando buenos tiempos.

-Que bien...me refiero que a pesar de lo que pasó, le sacó algo positivo, pues ahora es un excelente veterinario.

-Jaja supongo, no todo es malo ¿cierto? y tu amigo, cuídala mucho- rozó su mano contra su pata.

Lo haré, es mi turno, tengo que estar a su lado hasta que este cien por ciento curado.

Sonó la campanita de la entrada de la veterinaria, alguien había ingresado.

-Disculpenme iré a atender.

El veterinario se alejo de la sala.