¿Qué pasaría si descubrieras que la única persona en quien confiabas te ha provocado el peor daño de tu vida?
Esta es la historia de Elizabeth, una chica de 21 años que vive con sus padres y su hermana mayor en New York. A pesar de tener todo lo que...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡No puede ser que me esté pasando esto!. Se ve que el traje es carísimo y por la expresión que tiene seguramente me dará una buena gritada ,que merezco por ser tan descuidada. Acaba de impedir que limpie con un pañuelo su traje tomando mi mano. Espero lo peor.
¿?: No es necesario, señorita. Puedo hacerlo yo mismo.-me mira pero me es difícil descifrar su expresión-
-Realmente lo siento mucho. A veces suelo ser torpe.-sonríe ante mi revelación-Debe de estar muy molesto por mi error.
¿?: No voy a negárselo. Pero al ver que se disculpa con tanto fervor, mi enojo se está esfumando. Pero para la próxima debe ser más cuidadosa. Podría a verse hecho daño o haberlo provocado a alguien.-lo miro culpable-
-Descuide. A partir de ahora tendré mucho cuidado.-miro su traje empapado y me siento aún más avergonzada-
¿?: Tengo ropa disponible en mi auto así que no se preocupe.-asiento con la cabeza. Noto su mirada en mí. ¡La intensidad con la que me mira me confunde enormemente! ¡Tengo que irme rápidamente de aquí!-
-Bueno entonces me retiro y disculpe nuevamente.-cuando estoy por retirarme a mi mesa siento que toma nuevamente mi muñeca, rápidamente volteo y se queda mirándome, rompo el silencio que brinda entre nosotros nerviosa por lo que querrá-¿Necesita algo?-digo nerviosa mientras él no ha despegado su mirada de mí. Siento que me pierdo en sus profundos ojos grises-
¿?: ¿No ira a servirse otro Pimms Cup?-su tono es sarcástico-
-Oh, cla..claro. Iré por otro.-observo que se está burlando de mi por el nerviosismo con el que hablo .Doy media vuelta para dirigirme a la mesa donde se encuentran las bebidas-
¿?: ¡Esperé! La acompaño. También quiero tomar un trago.-camina hacia a mí. Se mueve con elegancia y seguridad. El aroma de su perfume roza mis fosas nasales. Este olor tan viril y a la vez sutil, me resulta tan agradable.¿¡Joder, en que estoy pensando!?¡Reacciona Elizabeth!-Señorita ¿Nos vamos?-asiento con la cabeza-
Nos trasladamos en silencio hasta la mesa de bebidas. Llegamos y me dirijo a coger un Pimms Cup, mientras él me sigue. No me queda duda. ¡Juega conmigo! Lo sé, la situación le divierte. ¡Respira, respira!
¿?: Puedo notar que le gusta mucho este coctel. La estuve mirando hace un rato, mientras se decidía entre las bebidas. Eligio un Pimms Cup sobre todas esta delicias que se encuentran en esta mesa.-Me mira en silencio con una sonrisa de lado. ¿Me estuvo observando?. ¡No puedo creerlo!. Esto empieza a asustarme. ¡Tengo que irme! Me estoy empezando a sentir muy incómoda.-
-Sí, realmente me gusta mucho este coctel.-trato de ser cortante para evitar que siga preguntando. Pero creo que acaba darse cuenta de mis intenciones-