You're my daddy // Yoonmin [+18]

005

El pelirosa se encontraba sumido en sus pensamientos, mientras su mejor amigo narraba con lujos de detalles su experiencia con el profesor, esté se vió interrumpido luego de varios minutos.
— ¿Tú sabes de quien era la mansión donde hicieron la fiesta? enserio necesito saberlo.— 
Observo como su mejor amigo llevaba una gran cantidad de ramen a la boca.
—Realfenfe no fé! — Restos de comida fueron a parar al rostro de Jimin, quién inmediatamente transformó su semblante en uno de repulsión.
—¡No hables con la boca llena de comida! eso es asqueroso. — 
Jin bufó por lo bajo, terminando de tragar el bolo alimenticio para dirigirse nuevamente al pelirosa que se encontraba concentrado limpiando lo que había quedado en su rostro.
—Yo puedo averiguar, pero ¿para que necesitas saber eso?— Lo miró extrañado al ver que un sonrojo se adueñaba de sus mejillas, que Jimin se sonrojara era raro, demasiado raro.
—Yo...mh, he tenido sexo con alguien y creo que es el dueño del lugar..— Comenzó a jugar con sus dedos algo nervioso, Jimin era el que mas tenía de sexo de los dos sin embargo sus objetivos no eran desconocidos. —Yo lo quiero encontrar.— levanto su mirada para encontrarse con los ojos entrecerrados del castaño.
—Y...¿como sabes, o supones que se trata del dueño? —La curiosidad del mayor era rara para el de cabellos rosados, pues no solía mostrar tanto interés por sus conquistas.
—La mujer de la limpieza dijo algo como " El joven amo a dejado esta muda de ropa para usted y desayuno"— A Jin le brillaron los ojos tras escuchar el relato de su amigo.
— ¿Eres un casa fortunas? ¡Woah Jiminnie! no dejas de sorprenderme.— exclamó mientras daba pequeños aplausos. —Te puedo ayudar a estafarlo, dile que soy tu hermano y finjo demencia o alguna enfermedad de esas que dan en la rosa de Guadalupe, la fortuna será nuestra cuando paguen por mis tratamientos— Sonrío ante su perfecto plan, mientras su amigo negaba con la cabeza.
—Jin, realmente eres un idiota.— el mayor comenzó a carcajearse y luego de unos segundos aún algo risueño volvió a dirigirse al menor.
— ¿Tan bien te ha follado? — el castaño enarco las cejas de forma traviesa mientras Jimin sonreía al escuchar aquella pregunta.
— Ha sido el mejor —.

-🌸-

Las horas de clase habían terminado, pero Jimin se quedaría unas horas mas en el establecimiento ya que asistía al taller de danzas. Al ser invierno oscurecía más temprano de lo habitual, por lo que cuando salió dispuesto a encaminarse a su hogar observó el cielo oscuro un poco intimidado, debía pasar por un par de callejones para nada amistosos. Emprendió su caminata pasando por varios lugares de comida, haciendo que su estómago rugiera de hambre, tras aspirar el delicioso olor que emanaban estos lugares logró dispersar su mente y continuó caminando un poco mas tranquilo al saber que ya estaba cerca de casa, pero aquella tranquilidad se esfumó tras escuchar la risa de varios hombres detras de él. 
— ¡Hola bonito! —Jimin pegó un pequeño salto en el lugar tras la sorpresa de escucharlo tan cerca.— Dije que serías mío ¿no?, debiste aceptar mi propuesta desde el principio —aquel hombre fingía pena— Ahora no serás solamente mio, ¿sabes? mis amigos también están ansiosos por probarte — el de cabellos rosados tragó saliva al escuchar aquella voz carrasposa, recordando vagamente su rostro -un viejo con la apariencia de un gangster el cual se le había insinuado, he incluso se había intentado propasar con él en un boliche, ganando que Jimin tirará un vaso de tequila en sus ojos y saliera huyendo del lugar.- El menor giró para observar de cuantos se trataban y vio aquel hombre que sonreía con maldad —¿Quieres decir algo?— luego de unos segundos aquel hombre pudo escuchar la voz del pequeño, que sonreía dejando ver sus ojos como pequeñas líneas, Jimin sabía que las consecuencias serían peor si llegaban a atraparlo, pero necesitaba distraerlos — Uno, dos, tres, cuatro, cinco! DASHI RUN RUN RUN — El menor comenzó a correr a toda velocidad y aquellos hombres, que tardaron en reaccionar fueron tras él al verlo escapar, atravesaron varias calles e incluso logro que dos de los hombres quedaran atrás por chocar contra un contenedor de basura, ahora solo quedaban tres que insistían en seguirlo, las piernas de Jimin comenzaban a flaquear, aquellos hombres continuaban corriendo tras él como si nada, esté observo incrédulo ¿como siendo tan viejos podían resistir tanto?, un auto negro paro frente a ellos evitándoles el paso y el de cabellera rosada aprovecho a correr lo mas rápido que daban sus piernas, sintió una mano tiró de él desde un callejón adentrandolo por una puerta vieja con la boca tapada "Ya me violaron" fue lo que pensó tras tener a una persona tomándolo fuertemente impidiéndole hacer ruidos o movimientos.