Nicotine (Chrisdiel)

catorce

Mi madre llegó de trabajar, me hizo comer algo, no he comido ni un bocado desde que te fui a ver, la verdad es que no tengo hambre.

-Apaga ese cigarro por favor... ¿cuantos llevas?

No le respondo

-Christopher, ¿cuántos cigarros llevas?

-No lo sé

-Dame la cajetilla

-No, sabes que no puedo

-¿Crees que a Zabdiel le gustaría?

-No metas a Zabdiel en esto

-A él nunca le gustó que fumaras

-¿Y dónde está ahora? Se fue, me dejó, nunca va a volver

Me levanto y voy al habitación, eso me recordó a nuestra primera pelea, no fue nada comparado a las que tenía con Richard pero nos dolió a ambos, era tarde y no habías regresado de una fiesta, no contestabas mis llamadas, ni mis mensajes, te estuve esperando hasta las 3 de la mañana que fue cuando llegaste, te grité que por qué no llegabas, por qué no contestabas mis llamadas, me habías dejado con el pendiente, me dijiste que no me importaba, habías tomado, te fuiste a la habitación y no me dejaste entrar, me tuve que dormir en el sillón porque era tarde para irme a casa de mi mamá, al día siguiente no te hablé por medio día, todo el tiempo me estuviste pidiendo perdón, al final lo acepté, por más que quería no podía enojarme contigo.

Incluso ahora no puedo enojarme contigo por más que lo intente, por más que me duela, siempre te voy a amar.