Capítulo 2. Aún vive.

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Capítulo 2.

Max:

Sentía un poco de culpa para ser sincero, irme sin decirle nada a Sara me hacía sentir realmente mal, sin embargo ella no podía saber que iba a hacer esta noche; conduje lo más rápido que pude sin causar gran revuelo, por un momento creí que una motocicleta me seguía, sin embargo se detuvo un momento y la perdí de vista. La noche era penetrante, había olvidado lo hermoso que se sentía el conducir a media noche, en la radio no había música así que conecté mi celular y puse una canción algo vieja ya, era "Any where but home - Breathe Caroline". Me dirigía a un viejo almacén, donde me encontraría con un viejo amigo, no lo había visto en años y ahora él se había dedicado a la programación, era un prodigio, tanto que la compañía que estaba desarrollando Omega, lo contrato para programar parte del juego, era uno de los programadores principales. Llegue a la vieja zona industrial ubicada en la zona norte de la ciudad, cruce un pequeño puente el cual interconectaba las zonas urbanas e industriales, al llegar solo pude apreciar fábricas inmensas, todas rodeadas con cercas de malla electrificadas, me dirigí a una que era perteneciente a la compañía para la cual estaba trabajando. Aparque el auto cerca de la entrada donde él ya me estaba esperando. Descendí del auto y me acerqué a él.

-Hola Max, cuanto tiempo ¿no?,- pregunto con una pequeña sonrisa.

-Demasiado, quizás más del que es permitido- conteste-, ¿cómo has estado Lalo?,- pregunté, Lalo era un chico no muy alto, para ser sinceros era más bajito que yo por 7cm, con una cabellera tan china que el mismo decidía que peinarse era la peor idea, su cabello era de un café oscuro, mientras que su piel era apiñonada, era bastante delgado, y usaba lentes de pasta igual que yo.

-¿Para qué me hiciste venir a esta hora Max?,- preguntó con un poco de seriedad.

-Para ser sinceros, creo que aún ni siquiera te ibas- contesté con una ligera sonrisa-, necesito tu ayuda.

-Eso me lo pude imaginar, sino no estaríamos hablando en estas circunstancias- explico Lalo con una pequeña risa-, ven, vamos a entrar aquí hace mucho frío.

Asentí con la cabeza, realmente estaba haciendo bastante frio, y el aire no era de mucha ayuda; nos adentramos en el almacén, cruzamos unas puertas de cristal las cuales tenían el símbolo omega en el, posteriormente al llegar al lobby, estaba en círculo y completamente iluminado, caminamos hacia la derecha donde había un elevador no muy grande, quizás únicamente cabrían máximo cinco personas. Las puertas del elevador se abrieron y entramos en él, Lalo presiono el botón 3, comenzamos a subir y pude admirar toda la nave en la cual se estaban instalando servidores y cientos de máquinas, sin embargo, de repente la imagen se fue y solo pude ver mi reflejo.

-Lo siento, secreto de la empresa- explico Lalo-, pero dime, ¿en que quieres que te ayude?

-Mira - dije y saque una memoria de almacenamiento, esta era aún más pequeña que las de antes, era un cubo que únicamente medía tres centímetros en cada lado-, aquí dentro viene un misterio que yo no sé cómo resolver, digamos que no se mucho sobre programación así que no le entiendo del todo.

-¿Qué clase de código fuente es este?, - preguntó Lalo mientras jugaba con el cubo entre sus dedos-, ¿Quién te lo dio?

-No me creerías si te lo dijera- le conteste con seriedad.

-Haré un intento- insistió Lalo con seriedad-, vamos amigo si te voy a ayudar necesito que me digas las cosas completas.

-Bueno, bueno, está bien - contesté moviendo una mano en el aire-, durante mi tiempo en Legacy, nunca supe quién era el culpable que estaba detrás de toda la masacre...hasta que se terminó el juego, él se revelo ante mí y me dejo esto, creo que hay algo que aún no se...

Las puertas se abrieron y el lugar era demasiado amplio, lleno de computadoras, papeles por todos lados, y cajas de comida, al fondo unos grandes ventanales que daban una amplía vista a la nave.

-Bueno, ahora entiendo todo - comenzó mientras buscaba algo entre los papeles-, creo que esto nos ayudará-, dijo Lalo con una sonrisa, en su mano sostenía una caja de metal de diez centímetros de largo por cinco de alto-, préstame la memoria.

Le di la memoria y él la coloco detrás de la pequeña caja y la puso en el suelo, de pronto todo el contenido de la memoria se proyectó frente a nosotros...

-Adoro vivir en esta época-, dijo con una sonrisa de oreja a oreja-, así que veamos que tenemos aquí- dicho esto comenzó a mover sus manos frente a la proyección, buscando a través del código fuente-, esto es bastante complejo, todo tiene candados bastante buenos, incluso tiene partes secretas, pero hay algo más, algo se mueve a través del código.

-¿Cómo que algo se mueve?- pregunté acercándome un poco más.

-Si, algo, bueno quizás no sea algo, quizás sea alguien- explico Lalo sin despejar su mirada de la proyección-, sin duda hay un mensaje ahí.

-Quizás sea solo el mensaje y no alguien Lalo-, dije cruzándome de brazos-, no puede ser alguien.

-Bueno, en eso quizás no tengas razón- explico Lalo-, ¿qué paso cuando terminaste el juego?

-Bueno cuando deje que Sara me matará, creí que moriría y el juego se cerraría- le explique, pero entonces recordé aquel encuentro-, pero en vez de morir vi al creador del juego y me explico el porqué de sus acciones.

-¿Y cómo actuaba?- preguntó Lalo mirándome a los ojos y agregó-, los programas actúan de una manera automática, están programados para eso, para hacer su interacción lo más humana posible, pero los humanos son inconfundibles.

-Bueno, pues actuaba como un humano, pero creo que solo fue un mensaje que grabo- comente.

-Ese no era el mensaje final del juego- comenzó Lalo y me miro, hizo un ademan para que me acercará a él y señaló una parte del código, el cual era un mapa-, Es el mapa del ultimo nivel, nada comparado a lo que ustedes vivieron, solamente era una lucha en barco contra criaturas marinas mitológicas, y al final se reproducía un video de felicitaciones.

-Entonces ¿qué fue lo que vi yo? - pregunté totalmente desconcertado-, era...¿él?

-Lo que viste fue él- explico Lalo-, se que suena inverosímil, pero es posible, los reportes dijeron que se suicidó - explico Lalo y tomo una de sus computadoras y busco algo en ellas-, Yuri, él programador de Legacy era amigo de unos cuantos ingenieros.

-¿Y eso que tiene de relevante?- pregunté, realmente no le encontraba sentido a lo que me dijo.

-Todo- comenzó y me mostro la computadora, en ella aparecía un artículo que hablaba sobre una nueva manera de preservar las grandes mentes-, Fue un equipo de cuatro ingenieros del instituto politécnico nacional, y dos psiquiatras de la universidad autónoma de México. Ellos diseñaron una teoría que se llamaba Arca de Noé, un proyecto que habla de trasladar la mente al ciberespacio, eso fue hace años, y recibieron la medalla Lázaro Cárdenas por su proyecto, se lleva acabo cuando grandes mentes están por morir, un ejemplo fue Stephen Hawking, y hoy en día ellos fueron quienes ayudaron a Yuri a diseñar Legacy, ellos inventaron la inmersión en el mundo virtual, solamente que en este caso pusieron un switch para poder salir, el cual me imagino que Yuri desactivo y dejo a todos atrapados ahí - entonces Lalo se detuvo y me dijo-, Yuri sigue vivo dentro del juego. Él aún no muere...

Omega ProjectDonde viven las historias. Descúbrelo ahora