You've Fallen For Me » Harry Styles

Harry "Bienvenida al infierno"

Tarde. ¿Por qué todas las chicas llegaban tarde?

Era la tercera vez que revisaba la hora en el teléfono.

“¿No ha llegado? Haha te han dejado en la maceta capullo”

“Cállate de una vez Niall”

“No seas tan duro con el chico, no es mentira lo que dice”

Estúpido grupo de WhatsApp.

Lo que parecía un vago dado al tamaño de la ropa se sentó delante de mí.

—Lo siento, estoy esperando a alguien —Le advertí, sin quitar la vista de la pantalla del teléfono.

—Mira otra vez —Respondió, era el acento británico más extraño que había escuchado en mi vida.

Oh santa mierda. La intensidad de su mirada era intimidante, a diferencia del gran gorro de panda que estaba en su cabeza.

—¿Qué demonios es eso?

—¿Esto? —Señalo el gorro como si fuera yo el loco— Estamos en Octubre, la temperatura está comenzando a bajar. No quiero perder mis orejas por culpa del frío.

Esto debía ser una broma.

—No es posible que tenga que salir contigo, más que todo en ese estado ¿Te vestiste en la oscuridad de casualidad? Tu suéter esta al revés.

Ella frunció el ceño, y comenzó a hacer extraños señas con sus manos.

—¿Qué significa eso rarita?

—Mi nombre es Bree, no rarita. Y dice que quiero irme de aquí o le diré a todos sobre el contrato.

—No puedes hacer eso.

—Oh claro que si —saco un teléfono de su bolsillo— Si sigues actuando como un imbécil y criticas mi ropa de nuevo lo haré. Después de todo, los zapatos de punta son anticuados como para que seas tú quien señale mi ropa. ¿De qué siglo vienes?

—Mocosa in...

Levanto el teléfono.

Magnifico, una niña de 19 años me chantajeaba. ¿Qué otra cosa podría salir mal?

—Styles, creo que el hombre del fondo nos está fotografiando.

Maldición.

—¿Cómo lo sabes?

—Desde que llegue su teléfono no ha dejado de estar en esta dirección. Dios, odio esos teléfonos de doble camara.

No era la única.

Quería matar a Paul.

“Sera solo una reunión informal, lo mejor es una espacio público”

Al diablo si era una reunión informal o no. Si querían que la conociera muy fácilmente pudieron llevarla al estudio, quizás incluso hubiera podido evitar tener que verla en el gorro de panda.

—¿Estas lista?— Le pregunte mientras sacaba unos billetes para pagar el café.

Asintió— Siempre estoy lista.

Sonreí, tenía que admitir algo. Era valiente.

—Veamos cuanto tiempo dura tu seguridad.

Me levante tomando su mano que estaba sobre la mesa y tire de ella hasta la puerta, directamente a lo que muy pronto seria el infierno en la tierra.

Para ambos.

            ...

—¿Que estas esperando? Dijiste que querías irte —Grite desde el interior de mi auto— No tenemos todo el día, la noticia se propagara mucho antes de lo estipulado. Tengo órdenes de llevarte al estudio.

—¿Tu estudio o el mío?—Se inclinó a la altura de la puerta del auto, aún más seria que antes.

—Obviamente el mío. Necesitan que veas el itinerario que nuestros Managers acordaron a partir de ahora.

—No iré sola contigo a ningún lugar, puedes volver por el mismo camino que usaste para llegar aquí. Tomare un taxi.

Dios mío, era terca.

—Si tú lo dices, bien —Me encogí de hombros— no es como si yo estuviera emocionado de pasar más tiempo contigo pero tienes que obedecer un contrato tanto como yo.

Eso solo era parte de una mentira, necesitaba hablar con ella y la única manera segura era esta.

—De acuerdo —Subió al auto molesta y cerró la puerta más fuerte de lo necesario— ¿Qué quieres?

Por un momento me helé, nervioso por lo rápido que supo mis intenciones.

—¿No quieres saber nada?

—¿Cuánto te están pagando?—Pregunte, concentrándome todo lo posible en salir del estacionamiento— Sea lo que sea puedo duplicarlo. Es por eso que estas aquí ¿no? Dinero.

—Dudo que puedas hacer eso, tampoco comprendo tu curiosidad —Su voz fue dura— Después de todo, estoy aquí dado a que eres incapaz de hacer algo sin arruinarlo.

—Entonces tengo razón. Es sorprendente, nunca pensé que una chica pudiera hacer algo así.

Suspire con nostalgia, si tan solo Megan hubiera aceptado estar conmigo nada de esto pasaría.

Ella estaría sentada a mi lado y no la rubia malhumorada.

Yo estaría feliz, y no deseando con tanta fuerza lastimar a Bree tanto como yo estaba.

—¿A dónde crees que vas? —Exigí saber, apenas habíamos llegado.

—Lo más lejos que pueda estar de ti. Sin cámaras no hay necesidad de armar un espectáculo —Espeto cerrando nuevamente muy fuerte la puerta.

Me recosté del asiento solo para ver hasta donde llegaba.

Para mi sorpresa entro a Sony Music siguiendo el mismo camino que hacíamos nosotros hasta el ascensor, e incluso podría asegurar que sabía con exactitud donde estaba la oficina del Presidente.

¿De dónde había salido esa chica?

Mi teléfono vibro nuevamente, no había parado desde que salimos de Starbucks.

—¡HARRY EDWARD STYLES!—Chillo Gemma del otro lado de la línea— ¿Que significan esas imágenes? ¿Dónde está Megan?

—Moscú, ella me boto anoche —Admití con pesadez.

—Eso no te da derecho a salir con una chica diferente al día siguiente delante de todos. ¿Aún no sabes nada de chicas?

—Gemma. Estoy cansado, solo dile a mamá que la quiero.