La hermana de mi mejor amiga ©

Capítulo 17 • Smile Mask

Eun Bi entró a su casa después de regresar de la escuela y puso su mochila sobre el sofá grande.
Su mamá salió de la cocina y la saludó al verla.

—¿te dieron la boleta de notas?

—sí

—damela para ver cómo vas

Eun Bi tragó saliva y miró a todos lados nerviosa. Había salido peor de lo que imaginaba. El único curso que aprobó con buena nota fue Inglés, pero con los demás cursos no tuvo la misma suerte.

—después del almuerzo te lo doy, ¿está bien? Ahora tengo mucha hambre y quiero cambiarme el uniforme

Su mamá suspiró y asintió. No esperaba notas altas de su hija, pero tampoco quería cursos desaprobados.

—anda rápido a cambiarte mientras sirvo la comida

—okey

Eun Bi subió a paso apresurado las escaleras llevando consigo su mochila dónde tenía la boleta de notas.
Una vez en su habitación tiró la mochila y se despojo de su uniforme. Jong Woon no la acompañó a casa porque tenía que mostrarle su propia boleta a su mamá. Aunque ya casi ni se venian juntos porque él prefería ir a la universidad de Eun Ha.

Terminó de cambiarse lo más rápido posible y volvió a bajar.
Ella y su mamá comieron en silencio y a eso de las tres de la tarde supo que ya no tenía escapatoria.

Su mamá quería ver la boleta de notas sí o sí.

—estoy esperando Eun Bi

La susodicha se mordió la uña de su dedo anular y luego habló.

—¿pero no dijiste que tenías que salir? Creo que al mercado

Su mamá le miró con los brazos cruzados.

—no estoy para juegos Oh Eun Bi. Tráeme esa boleta de notas ahora mismo o subiré a tu habitación y será mucho peor

Eun Bi cerró los ojos y suspiró derrotada. No tenía de otra. El día de su muerte había llegado y no había nada ni nadie para salvarla.
Resignada subió hasta su habitación y sacó la boleta de su mochila. Miró por enésima vez las notas impresas y deseó tanto poder cambiarlas en ese instante. Sin embargo no todo en esta vida es posible, por lo menos no para alguien como ella.

Caminó lo más lento que pudo hasta estar frente a su mamá.
Tenía la boleta detrás de ella y con una mirada de súplica en su mamá.

—Eun Bi no hagas tanto drama y damelo

—pero no te enojes

Su mamá estaba perdiendo la paciencia así que resoplo.

—no esperes a que cuente hasta tres

—esta bien —djo desganada. Sacó la boleta detrás de ella y se lo tendió.

Su mamá lo tomó y comenzó a leer.
Eun Bi se puso a contar el tiempo en su mente mientras veía la expresión de su mamá. Pero lo peor era que la señora Oh no ponía ningún tipo de expresión, por el contrario, estaba tan seria que daba miedo.
Después de ver las notas miró a su hija.

—¿cuál es tu descargo por estas notas?

Eun Bi comenzó a jugar con los dedos de sus manos y mordisqueo su labio inferior.

—estoy esperando Eun Bi —la voz de su mamá era pacifica y eso daba más que miedo. Daba terror.

—no tengo una excusa. Sé que debo esforzarme, pero de verdad mamá que no entiendo nada de matemáticas