1-Silencio

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Habían caído con un fuerte golpe que hizo que Lucifer saliera de él mismo, apenas se dio cuenta de que estaba libre miro a su alrededor.

La jaula.

El frío se filtraba por las paredes, el sonido de los relámpagos y los gritos a la distancia.

Sintió miedo, se arrastró hasta una de las paredes de la jaula recargándose en la misma abrazo sus propias piernas y todo comenzó.

Cualquiera diría que en cuanto Sam Winchester cayó a la jaula, los arcángeles, comenzaron a torturarlo a él y a su medio hermano pero no fue así.

Sam levantó la vista después de haber estado escondido en su mismo, no sabía cuánto tiempo llevaba así ya que no sabía si podía sentir algo de hambre o sueño en el infierno, tampoco había día o noche solo oscuridad y lamentos. Miro a su alrededor para encontrar a Adam en la misma posición que él estaba pero al otro lado de la jaula.

Ambos arcángeles, en cuanto cayeron, comenzaron a discutir y luego a pelear, era cuestión de tiempo para que se cansaran y decidieran distraerse con algo más, quizás torturándolos y ambos humanos solo temían que ese momento llegara.

El cazador más viejo miro a ambos arcángeles en sus formas más humanas y originales, no entendía lo que veía pero era algo hermoso, Miguel tenía unas enormes alas blancas con sombras azules que desde cierto punto parecían tan suaves, su cabello negro corto y ojos azules, era alto, muy alto, quizás más de dos metros y medio desde donde alcanzaba a medir Sam con tanto años de experiencia, pero aun así el arcángel se veía preparado para una guerra.

Lucifer era diferente a todo lo que había pensado, sus alas de un oro rosado que seguramente sería algo gracioso si no lo viera desde esa perspectiva, no era tan alto como el arcángel mayor pero sí lo era más que un humano, su cabello rubio con algunos risos parecía haber sido cortado de manera desordenada y sus ojos azules lo hacían parecer de verdad un ángel.

La gracia de ambos arcángeles chocaba, el frío que quemaba de Lucifer y el calor que reconfortaba de Miguel.

Los miro por tanto tiempo que no espero que los arcángeles lo notaran, sintió de nuevo el terror cuando vio a Lucifer acercarse hacía él, intento retroceder aun sabiendo que la pared estaba justo detrás de él.

Lucifer lo tomo por el pie arrastrándolo lejos de la protección que el mismo humano se daba.

—¡Tú tienes la culpa de esto!—

Sam cerró los ojos esperando algo, un golpe o cualquier cosa que le hiciera sentir el peor dolor de su vida pero nada paso, abrió los ojos de nuevo para ver que Lucifer lo miraba atentamente.

—¿Qué pasa hermano? ¿No quieres torturar a ese humano?—pregunto Miguel sonriendo—Él es la causa de que estemos aquí—

Lucifer resopló molesto mirando hacia su hermano.

—Sí tanto quieres torturarlo ¿Por qué no lo haces?—

—Nuestro padre dijo que no debemos lastimar a los humanos—

Lucifer tomo a Sam por el cuello levantándolo del suelo, lo arrojo frente a su hermano, Sam se arrastró por el frío suelo de la jaula cuando fue arrastrado hasta los pies del arcángel mayor mientras Miguel le miraba desde arriba.

—¿Qué esperas? Aquí nuestro padre no te dirá nada ¡Tortúralo! ¡Hazle sentir el poder del cielo hermano!—

Miguel miro al humano en sus pies unos momentos, tan indefenso, con solo un chasquido ese humano estaría totalmente acabado en todo sentido, se dio la vuelta caminando hacia una de las esquinas de la jaula, se sentó recargándose en la misma.

—¿Qué pasa Miguel? ¿No lo torturaras?—

—No, no caeré tan fácil como tú—

Lucifer se molestó, Miguel le estaba mirando como si fuera superior a él, camino golpeando una de las paredes de la jaula y la misma tembló por el poder del arcángel.

Sam miro a su alrededor, Adam no se había movido ni un centímetro y por lo que sabía él estaba completo, Lucifer volvió a acercarse a él.

—Yo no puedo ir contra las normas de nuestro padre pero ¿Qué te detiene a ti Lucifer?—

—No valdría la pena, no quiero gastar mi diversión si nos quedamos demasiado tiempo aquí—

El arcángel hizo lo mismo que su hermano, fue a una de las esquinas recargándose y se quedó allí en silencio.

Y por primera vez, después de tanto tiempo, hubo silencio en la jaula.

Todos estamos locos [Supernatural]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora