15/02/2011

47 7 2
                                    

Después de tanta mierda durante tantos años, al fin puedo decir que no siento nada.

Todas las cosas que han pasado en mi vida me han vuelto una persona sin sentimientos, las decepciones, el dolor y los efectos de las decisiones de los demás me han matado por dentro.

Pero eso está bien, me he establecido en un pequeño estado, en uno de los pueblos más escondidos donde apenas llega el servicio de teléfono, luz eléctrica y agua potable.

Pero eso estaba bien para mi, vivía en una pequeña casa alumbrada por apenas tres bombillas las cuales no daban luz suficiente.

Me había mudado hacía ya un año atrás a causa de tanto estrés presente en mi vida, no me podía quejar, siempre he aceptado todo lo que mi madre me ha pedido y esto ha sido decisión suya.

No le costó nada pedirme dejar la casa con apenas 17 años y mucho menos le cuesta llamarme una vez al mes.

Pero no la culpo, con tantas cosas que le he hecho pasar, me sorprende que aún me llame para ver como estoy.

Ella es la única persona que sabe lo que he sufrido y ha estado apoyándome siempre, supongo que ella sabía que mudarme era lo mejor para mi.

EL INHUMANODonde viven las historias. Descúbrelo ahora