Good Graces (Kaisoo) - Traducción

Monster

Cuando Kyungsoo recuperó el sentido, estaba sentado sobre el pecho del jefe, sus manos ensangrentadas descansaban sobre la camisa de vestir del hombre que una vez fue blanca. Mantuvo su mirada enfocada hacia adelante, sin atreverse a mirar hacia abajo por el desastre que había causado. El cuerpo del hombre todavía estaba caliente debajo de sus muslos. Al joven príncipe no le gustó la sensación en absoluto. Él quería vomitar. Quería deshacerse de esta sensación repulsiva empujando su pecho. Sintió que no podía moverse.

"Kyungsoo" una voz sin aliento lo llamó desde lo alto de las escaleras de metal. La cabeza del príncipe se levantó bruscamente para encontrarse con los ojos de Jongin y la incredulidad en el rostro del hombre más joven lo quemó hasta la médula y bajó la mirada avergonzado. Gran error porque ahora estaba mirando la cara sin vida del hombre que acababa de matar. El cuello del jefe estaba roto y tenía marcas de arañazos en los costados de la cara, pequeños chorros de sangre aún rezumaban de ellos. Su nariz estaba completamente aplastada, dejando un charco ensangrentado en el medio de su rostro y sus ojos hinchados, negros y azules. El príncipe no pudo evitarlo y, antes de darse cuenta, vomitó sobre el cuerpo ya manchado del hombre. Cuando se inclinó para levantar una vez más, oyó unos pasos chocar contra las escaleras de metal mientras Jongin gritaba su nombre con preocupación. Se inclinó hacia atrás para sentarse y había lágrimas húmedas y calientes corriendo por su rostro y tenía problemas para respirar. Kyungsoo odia esto. Odiaba tanto su don y odiaba todos los sentimientos horribles que conllevaba.

Jongin se arrodilló junto a él y lo sacó del cuerpo del hombre y lo llevó en sus brazos. La cabeza de Kyungsoo buscó la comodidad de los hombros de Jongin y comenzó a llorar con fuerza en el firme cuerpo del hombre más alto, con las manos enroscadas en su regazo porque no quería ensuciar a Jongin.

"Está bien" Jongin lo tranquilizó, pasándole una mano por la espalda y susurrándole al oído. "Estás bien ahora. Él no te lastimará más. Ya nadie te lastimará" Se quedaron así unos minutos más mientras Kyungsoo intentaba calmarse, pero fracasó terriblemente porque estaba haciendo eso, estaba tratando de dejar de llorar, pero no podía, así que ese llanto horrible salió. Lo dejó salir. Estaba tan avergonzado, y Jongin no lo hizo mejor porque el hombre más alto lo empujaría más fuerte y le acariciaría la espalda otra vez. Cuando el príncipe finalmente se calmó, simplemente se levantó y Jongin lo siguió mientras subían las escaleras. No miraron al jefe muerto. Kyungsoo no estaba de humor para hablar y estaba contento de que Jongin pudiera sentirlo. Todo lo que realmente quería en ese momento era un tiempo a solas, para que pudiera aclarar su mente y sacudirse. Sin embargo, después de lo que sucedió, Jongin no lo dejaría solo un segundo. Fuera de la puerta estaban los hombres del jefe, todos inconscientes y ensangrentados. Kyungsoo no podía decir si estaban muertos o simplemente inconscientes. A él no le importaba.

"Descubrí dónde te llevaron" explicó Jongin, "y vine a salvarte. No fue tan difícil pasar por estos hombres, pero cuando llegué a ti, ya estabas manejando la situación. Supongo que no necesitabas mi ayuda después de todo." soltó una risa incómoda, tratando de aliviar la tensión. Kyungsoo estaba agotado y no le pareció divertido. De hecho, se sintió aún más avergonzado porque Jongin lo había visto todo. Él había visto a Kyungsoo convertirse en un monstruo.

Sus caballos fueron atados a un poste y Kyungsoo desató uno y se subió sobre ella. Tuvo la decencia de esperar a que Jongin también se preparara antes de irrumpir en los caminos nocturnos. Fue un poco después de la hora de la cena, por lo que la mayoría de las personas estaban tranquilas a comparación del día. Kyungsoo pensó que esto era algo bueno porque ahora mismo no estaba en el estado mental correcto para tener cuidado con los peatones en el camino. Él quería salir de este reino lo más rápido posible. Por una vez en su solitaria vida, quería estar en casa, en Drakon. No pararon a descansar cuando salieron de la segunda ciudad y entraron en la tercera. La tercera ciudad era la más pequeña de las ciudades trillizas, por lo que no pasó mucho hasta que salieron de allí en la oscuridad familiar del bosque. Oía el caballo de Jongin detrás de él y también oía lo duro que jadeaba su caballo. Sabía que era injusto que su caballo trabajara tan duro sin un descanso, pero tenía que salir de allí. Iba a perder la cabeza si no lo hacía.