Seh.
Capítulo 6.
Y mis días rutinarios, agotadores y aburridos, habían seguido.
Luego de haber tenido tal vez, la peor discusión de mi vida, con quien una vez, fue la mejor persona de la misma, mi vida retomó su camino habitual, libros, cigarrillos, whisky, clases patéticas y... poco más.
Me había convertido, poco a poco, en un ser que una vez odié: Oscuro, sin capacidad de amar, dominado por la rabia y el odio, atrapado en el pasado, que que odiaba la vida y todo lo que estuviese con ella, que se odiaba... a si mismo.
Camino hacia afuera de la institución, recuesto mi espalda en una pared de ladrillos, saco un Marlboro de mi saco, lo enciendo, al instante siento una voz grave:
-Eh ¿Me das un cigarrillo?
Era Agustín, un amigo que frecuentaba poco.
-Claro, no hay problema.
-Gracias, siempre compartes cigarrillos a todo el que te pide ¿Por qué?
Me puse a pensar... ¿Por qué lo hacía? para mi era solo un cigarrillo, algo material que no me costaba conseguir.
-No tengo respuesta para eso. Respondí.
Sonó el timbre para volver dentro.
-¿Vamos? Dijo el.
-Me conoces, no entro hasta terminar el cigarrillo, a mi no me interesa el tiempo de entrada. Lo dije con una sonrisa cínica.
Sonrió- Nos vemos luego bad boy.
-Idiota. Murmuré.
Terminé, me encendí otro cigarrillo y al acabarlo, recién entonces me dispuse a entrar a clases.
Toqué la puerta 3 veces.
-Permiso.
-¿Otra vez tarde? Insinuó la profesora.
-La costumbre. Respondí, cínico otra vez.
Todos clavaron su mirada en mi, mientras me dirigía a mi asiento, en el fondo del salón, esos segundos fueron mortales, que mal se sentía ser el único que no sigue las reglas.
Salgo del salón de clases para caminar hacia los baños, me llega un mensaje, adivinen...
Sí, era ella, disculpándose por la manera en la cual me trató, diciéndome que ella me trataba como si yo ya hubiese superado todo, como si yo... no tuviese el corazón roto.
Pero joder, he sido yo quien la trató como basura, bueno, no a ella, si no al idiota con el cual salía, no era su culpa, era mía, siempre fue mi culpa, pero... en cierto modo, me alegraba saber que aún le preocupaba, siempre le agradeceré la manera en la cual me hizo tocar el cielo y el infierno a la vez.
The woman of my life, seh.
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Lo perfecto dentro de lo imperfecto.
RomantikAsí que... una descripción eh, bueno, probablemente en este impulso de locura, dolencia y amor, leerán un poco de como soy, de lo que me pasa y de como un chico, con un cigarrillo entre la comisura de sus labios, se perdió dentro del corazón de una...