Cap 13: Mentes Maestras, el juego (1/3)

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Las diferencias entre los goblin del norte y el sur para los humanos eran inexistentes, para ellos los que estaban enfrente eran del sur y les habían tendido un atrampa, esperándolos cubiertos y en un llanura.

"General, Sabia, hemos avistado el ejército goblin, están esperando a la defensiva" Safios parecía sorprendido, aunque Lia estaba tranquila.

"Les dije que podía ser una trampa, ahora ya no podemos preocuparnos hay que atacar" Lia estaba incitando un ataque directo, algo poco común por su parte.

"Hay trampas en las llanuras, podemos usar los arietes para tapar las fosas escondidas y cruzar sin perder soldados" El vigía estaba dando su opinión en la mesa del general.

En esta tienda de campaña estaban los 4 héroes, Lia, Cial, Gisa y Aria, también estaban el Supremo General Safios a su lado derecho estaba Gungir y detrás de los héroes estaban Cerle y Gion mientras que los grupos de estos estaban afuera.

"Bien hacedlo, por cierto, ¿Lo han avistado?" Safios preguntaba ansioso, desde hace 2 horas que envió a los vigías a investigar, pero aun así no había rastro alguno de Emian.

"No, aun no señor Safios" Con voz temblorosa respondió, su máxima prioridad era encontrarlo y aun así estaban fallando estrepitosamente.

"Es normal que no lo muestren a simple vista, sería demasiado estúpido" Lia ayudo en cierta manera al líder de los vigías.

"Ya lo sé, soy consciente de ello, hay que recurrir al confrontamiento directo" Con eso Safios tomo su martillo y salió para dirigir a sus tropas al campo de batalla

Solo Lia había quedado en la sala, ya habiendo verificado su soledad comenzó a soltar una pequeña risa.

"ajaja, son tan fáciles de usar, pronto todo va proceder como quería Emian, va a ser divertido ver la cara de Safios" Su risa no era perversa en lo absoluto, era como si fuese un regalo sorpresa para alguien.

"¡¿Qué hacen lo humanos aquí?!" El rey estaba gritándole a su asistente, de lo flaco y débil que era parecería que iba a salir volando por la fuerza de sus gritos.

"N-no lo sé su alteza, pero los vigías no han informado nada raro" El asistente intentaba calmar a su rey con gran temor.

"¡Cuando esto termine los voy a decapitar a todos!,¡Escuchasteis todos!" El rey sin poder tranquilizarse salió al campo de batalla y se paró a mitad del ejército suyo, tomo asiento en el suelo y observo con desprecio a todos los humanos frente a él.

Safios estaba liderando a las tropas, luego de descubrir las trampas las neutralizaron con facilidad, no eran un grupo de estúpidos goblins rasos, porque lo que ninguna trampa había funcionado, sus tropas avanzaban a gran velocidad y rompían las filas de hobgoblins entrenados.

El rey estaba furioso pateaba y gritaba se podían ver como venas brotaban en su cara por todas partes, en cualquier momento se uniría a los humanos a masacrarlos a todos, de alguna manera la batalla había logrado quedar a favor de los hobgoblins.

Bueno, no de alguna manera, sino gracias a que estaba la unidad pesada de acero goblin, con escudos de acero casi irrompibles por un soldado común, asesinaban con seguridad y certeza usando lanzas que eran manejadas por detrás de los escudos.

Una fila atrás de otra, era cerca de unos 50.000 soldados pesados hobgoblin.

Safios estaba literalmente aplastando todos los escudos que veía, pero aun así no hacía mucha diferencia, habían logrado acabar con la mitad de ellos, pero se habían quedado estancados encontrar de las unidades pesadas y eran asesinos por lanzas y flechas que venían desde la parte de atrás del muro de acero se había formado.

"Maldición, esto es malo, los soldados están pensando en retirarse" Si se retirasen en esta situación una lluvia de flechas los castigarían, además de que tropas enemigas los podían perseguir.

"Hay que atravesarlo" Safios y Gungir gritaban a los soldados en un intento de controlarlos, pero las tropas de los nobles no hacían caso alguno, estas corrían en retirada y eran masacradas por las flechas

El muro se abrió y dejo pasar a unos 20.000 soldados rasos hobgoblin, que comenzaron a castigar a todos.

Safios se encontraba rodeado por diez de ellos mientras que Gungir por 8, el martillo de Safios Thor comenzó a relampaguear, de él emanaban rayos pequeños y Gungir comenzó a girar su lanza con destreza, en 5 segundos las 8 cabezas estaban volando y 10 cadáveres de hobgoblins estaban rostizados y aplastados.

Se podía oler la carne quemada de los cuerpos, pero aun así no era suficiente, eran demasiados goblins y pocos soldados decentes.

""No esperaba que los soldados de los nobles fuesen tan inútiles, esto es malo"

Ya cuando muchos de los soldados estaban por morir por heridas, una campana comenzó a sonar y miles de plumas caían del cielo, ese era el Canto Angelical de Gisa, los héroes se habían unido al campo de batalla, o mejor dicho a la retirada.

"GIsaaaa" Safios grito desde lo lejos y los héroes lo vieron, cuando los alcanzo comenzó a explicar la situación y Lia que también estaba allí soltó un comentario espantoso.

"Estos no son goblins del sur" Todos estaban mirándola con miedo "Son del norte"

"Necesitamos retirarnos, ahora más que antes" Safios creía haber entendido la razón por la que peleaban contra el norte "Necesitamos la Barrera Santa para huir"

Gisa comenzó a cantar el hechizo y las tropas a retroceder, la sangre fluía por el suelo, las dos partes habían tenido muchas bajas, los dos quedaron flaqueando, habían perdido bastantes fuerzas y estaban considerablemente débiles.

Los soldados del Reino se habían logrado replegar pero el Gran general y su segundo al mando se encontraban hablando con la Sabia.

"¿A que te refieres con que no son del Sur?"

"Esos goblins son del norte, hay pequeñas diferencias entre ellos que se hacen notar y estos son del norte, estoy segura".

"¡Tarara! ¡tarará! ¡tararí! ¡tururú! ¡turututú!" Tan pronto como se habían replegado, al Este comenzaron a sonar trompetas y tambores de guerra, una horda de goblins rasos estaban invadiendo a los del norte.

El Heroe Oscuro (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora