Habían pasado tres días desde que conocí a los amigos de Hee. Ahora nos llevamos muy bien, a excepción de MinGyu, el a sido grosero conmigo desde que me conoció. No se que le pasa.
Cuando llegué a la escuela escuché a muchos alumnos decir cosas como "JunHoe llego por fin de sus vacaciones" "por fin se dignó a volver" y cosas así. No sabía quién era ese tal JunHoe.
Seguí camimando con mis auriculares puestos, la musica me relaja demasiado, me gusta comenzar el día con buena música.
Entre al salón, iba mirando mis pies como de costumbre lo hago. Estaba llegando a mi puesto pero todos estaban rodeando esté.
Comencé a pedir permiso y los demás me quedaban viendo feo. Decidí no prestar atención a ellos y finalmente llegue a mi lugar.
Miré hacía el y había un chico sentado en mi lugar, eso no fue lo que más me molesto, sino que era el tipo del restaurant que me hizo la zancadilla. Estaba molesta por saber que seríamos compañeros pero no dejaría que estuviera en mi lugar, así qué hablé.
—¿Qué haces ahí? Sal de mi lugar— tenía la misma maldita sonrisa de la otra maldita vez. Vi como se iba levantando y hacercando a mí.
—¿A caso tu compraste ese puesto? Que yo recuerde, aquí nada es de nadie y yo puedo sentarme en donde me plazca.
—Bueno esta no será la ocación— una voz masculina vino de la puerta. —Te quitas ahora mismo de allí, ¿Me escuchaste?
—Miren a quién tenemos aquí, grandioso Park, ¿Ahora te las das de superhéroe?— todos mirraban el "show" entre estos dos, se sentía una gran tensión.
—No te hagas el gracioso JunHoe.
Así que este desagradable es ese del que tanto hablan, bueno que me importa. ¿Porqué de todas las parsonas en este país tenía que ser el?
La vida si que da sorpresas y esta fue una de muy mal gusto.
—Déjala en paz y no la molestes.
—Y sino ¿Qué?— levantó una ceja.
El tipo rubio solo lo ignoró y se sentó en el otro lugar vacío de la izquierda.
—¿Qué esperas? Muévete de ahí— volvió a hablar.
Solo vi como el tipo desagradable tomaba sus cosas y se iba.
Esto es realmente extraño, a mí izquierda ese tal Park, a mí derecha el Don desagradable.
¿Qué más podría pasar hoy?, no lo sé. Esperó que nada, porque después de esto no se si algo más desagradable podía pasar.
La primera clase terminó y todos desaparecieron del salón, hasta mis nuevos amigos. Así qué tuve que ir por ellos.
Estaba por salir del salón hasta que una mano toco mi hombro. Me giré y era Don desagradable, solo rode los ojos y traté de irme pero ahora sostuvo de mi muñeca.
—¿Qué diablos quieres?— hablé.
—Creo que... la vez pasada fuiste muy grosera. Deberías pedir disculpas. ¿No crees?
—¿pedirte diculpas? Eres estúpido ¿o te haces? Deberías recordar que tu fuiste grosero conmigo, ahora si me permites debo ir con mis amigos.
—No, estarás conmigo esta hora libre.
—Wow, no sabía que tenía dueño. Sueltame ya o gritare— sentí como agarraba cada vez mas fuerte de mí. —¡Suelta! Me haces daño.
—Lo haré si vienes conmigo.
—Maldita sea no iré, no me chantajees por Dios— se que fui grosera pero este patán si se lo merece, desde ese primer encuentro, le tomé un gran desagrado. Sentía como cada vez me apretaba más y más fuerte.
—¡Joder JunHoe! Te dije que la dejarás. ¿Qué no escuchas? ¿O estás sordo?
—No te metas Park. Este es asunto de los dos.
—Deja de decir estupideces, aquí no hay ningún asunto ni nada— hablé.
—Ya escuchaste Jun. Déjala en paz.
—No te dejaré pasar esta Park.
—Como quieras— tomó mi muñeca y me jaló. —Ven conmigo.
Caminamos por el largo pasillo, pero de pronto el soltó mi muñeca bruscamente. Y nos detuvimos
—Gracias— hice una reverencia, estaba apenada. —De verdad muchas gracias.
Me giré para irme, pero el volvió a tomar de mí muñeca y quedamos frente a frente.
—No te acerques a el— dijo.
—¿Porqué?— hablé confundida.
—Sólo... no lo hagas— dio la vuelta y lo vi caminar, no podía dejarlo así, sólo sabía su apellido. Así que lo llamé nuevamente.
—Oye— el me ignoró y no volteó. Decidí intentar otra vez pero de manera diferente. —¡Park!— esta vez tuve éxito.
Se puso delante de mí esperando a que yo hablará.
—Puedes... al menos... ¿Decirme tu nombre?— los vi sonreír de una manera muy similar a la que hacía Don desagradable, pero esta era diferente. Esta sí me agradaba... incluso era más linda.
—Jimin— apuntó su pecho.
¡Ah! Que tonta soy, ¡SE ESTABA BURLANDO DE MÍ! Su nombre estaba en la tarjeta que se tenía en el bolsillo de su chaqueta. Como no la leí antes.
Volvió a sonreír, se dio la vuelta y se fue.
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Para que se hagan la idea de esa sonrisa. But; es algo que solo el puede hacer.💕💕
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Tambiénvengo a decir que este capítulo tendrá dos partes porque sería un capítulo demasiado largo si es uno solo.
