Confusión

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Las clases en Francoise Dupont se acabaron y todos los alumnos volvieron a sus hogares.

Tras conversar con la profesora Curie, Marinette recogió sus pertenecías y se fue directo a la panadería de sus padres a darles la gran noticia. Aunque fue ella la que se sorprendió al llegar.

- ¡¡Marinette felicidades!! – saludó su madre, abrazándola.

- ¿Eh? ¿Por qué? – preguntó sin entender nada ¿Cómo se enteraron?

- ¿Cómo que "por qué"? Vincent nos contó – explicó su padre, mientras la abrazaba.

En un rincón de la panadería, una pareja veía la escena. Al mencionado, el caballero se acercó a la alegre familia.

- Lo siento Marinette, ya no podía aguantar las ganas – se disculpó con la chica, apenas su padre la soltó.

- No, no hay problema – contestó tranquila. Aunque si era honesta si le molestaba un poco.

- Es que como no morirse de las ganas de decirles a nuestros amigos, que su hija va a trabajar con uno de los diseñadores más importantes que hay – comentó orgullosa la esposa del diseñador, Marie.

Los padres de la chica rieron ante el comentario, pero Marinette la miró extrañada, había algo que no le cuadraba.

- Ahora bien Marinette hay que ver cuando nos juntamos para ver lo que doy por hecho que la profesora te comento...

- Señor Carlier – lo interrumpió – yo... yo...

- Hay querida, no seas tan formal, en especial cuando vas a pasar mucho tiempo con nosotros – dijo divertida Marie. Marinette ignoró el comentario y continuó lo que iba a decir.

- Señor Carlier ¿usted sabe quiénes son los ganadores? – preguntó. Confundiendo a todos.

- ¡¿Qué es esa pregunta?! – respondió alterada Marie.

- ¿De que hablas Marinette? Yo elegí tu diseño – respondió Vincent, desconcertado.

- Lo que quiero decir, es que, cuando eligieron los diseños sabían el nombre de quien los hizo – explicó.

- Por supuesto que no Marinette, esa era la idea del concurso, elegir basándose solo en la idea que nos presentaron – aclaró, sin entender a donde quería llegar la chica.

- Pero después de elegir ¿Cómo se enteró que yo había hecho uno de los diseños? – insistió. Había escuchado muy bien a la profesora Curie.

- Cariño ¿Qué quieres decir? – preguntó su madre. En su voz se notaba el miedo de que su hija, no había sido una de las ganadoras.

Marinette le contó, con calma, al grupo que acababan de decirle que el que la seleccionó fue Gabriel Agreste, no el señor Carlier.

Apenas terminó de hablar, todos miraron a Vincent, exigiendo una explicación. En respuesta, el diseñador sacó su celular de la chaqueta y marcó un número.

- ¿A quién estas llamando? – preguntó molesta Marie.

- A la única que no puede aclarar esto – respondió serio, mientras escuchaba el tono de espera – Hola Nathalie.

Después de varios minutos conversando, la asistente de su colega, le explicó que Marinette tenía razón.

- Gracias Natalie, que Gabriel no se entere de esto – susurró lo último. Y tras largo suspiro, aclaro el problema.

Lo que nadie sabía es que al momento de entregar los diseños y para identificarlos, las profesoras enumeraron las hojas a medida que las entregaban. Las que tenían aquella lista eran las asistentes de los diseñadores, para mantener el anonimato de los participantes.

La confusión se produjo al momento de dar los nombres de las ganadoras... a los diseñadores.

- Eso quiere decir – dijo impaciente Tom. Marientte tenía un nudo en el estómago de los nervios.

- Las carpetas las hicieron las asistentes, por lo que Marinette tiene razón – dijo culposo Vincent – me emocioné tanto que confundí los nombres – dijo riendo inocente – lo siento Marinette, es que esa forma de diseñar, pensé que te habías inspirado en uno de mis trabajos.

- No hay problema, yo... solo dibuje lo que se me ocurrió – respondió tratando de disimular el alivio que sentía. Sin mencionar que su inspiración fue un gato enamorado de una mariquita.

Después de aclarada la situación, los Carlier se retiraron. Mientras los Dupain – Cheng los miraban sin poder creer lo sucedido.

- Bueno – exclamó rompiendo el incómodo silencio que dejaron aquel matrimonio – lo importante es que vas a presentar tu trabajo en Italia – agregó volviendo a abrazar a su hija.

- Por cierto cariño sino va a ser Víctor, ¿Quién se va a poner tu conjunto? – preguntó curiosa su mamá.

Marinette no pudo evitar sonrojarse ante la pregunta ¿Quién más podía ser?


Un viaje inesperado: ItaliaWhere stories live. Discover now