Miss playboy and Mr. Bieber «Adaptada»

Capítulo 6:

Acontinuacion de...

-Entonces, que comience la acción –susurro y sus manos viajaron por mi abdomen, hasta llegar al borde de mi camisa, para agárrala y sacármela.

Narra Miss Playboy:

Me senté en sus piernas, haciendo chocar nuestros se.xos.

-¿Con que te mantienes, eh? –pregunte bromeando, viendo como Bieber tenia unos grandes músculos. Y algo me sorprendió. Tenía un montón de tatuajes por todos lados- No sabes cuanto espere por este momento –le susurre en su oído mientras me movía en círculos sobre su se.xo.

Comencé a sentir como se ponía mas duro.

Narra Mr. Bieber:

-Eso se siente rico –susurro en mi oído haciéndome gemir.

Ya no aguantaba mas, quería probar esos labios de lo que salían gemidos logrando ponerlo duro. Entonces se acerco a ella, la agarro fuertemente de la nuca y la acerco a el.

-¿Puedo besarte, my lady? –pregunto mirándola a los ojos, de la misma manera que la miraba hoy a _____, con deseo.

-Claro que puedes, en los labios o donde quieras –respondió

Entonces la acerco a mí y chocamos nuestros labios. Besaba excelente, y se sentía malditamente bien, no solo por sentir sus labios contra los míos, sino también por su aliento a menta fresca.

Evangelina casi ni se lavaba los dientes para dormir. Cuando la besaba sentía un gusto a cebolla. Algo horrible de su parte. Por eso evitaba a toda costa sus acercamientos para besarme

Miss Playboy abrió más su boca, dejando que pueda entrar mi lengua a su cavidad bocal. Luego sentí un cosquilleo en mi estomago al sentir contacto con su lengua armando una guerra entre ellas

Sentí como pasaba sus brazos por mi cuello y jugueteaba con mi cabello. Entonces me arme de valor, y pase mis brazos por su diminuta cintura

-Tengo una sorpresa para ti –dijo entre besos

-Si, ¿y cual es? –pregunte ansioso

-Esta –respondió, se paro y se saco la bata dejándome verla en un atrevido BabyDoll, pero no cualquiera sino el que Evangelina había comprado.

Y por si no fuera poco se le veía hermoso y sexi, haciéndome poner duro

-Te queda hermoso –le dije un poco tímido

-No sea tímido, Señor Bieber –dijo y me empujo haciendo que quede acostado en la cama- Lo que sucede aquí, no saldrá de aquí –dijo y se acerco a mí

Sus manos comenzaron a pasear desde mis pies y viajaron hasta el cierre de mi pantalón. Lo abrió y metió su mano sobre la tela de mi bóxer. Y comenzó a masajear mi miembro

-Tiene un buen paquete señor Bieber –dijo y pegue un grito al sentir como apretaba mi miembro- Creo que el más grande que toque –dijo y apareció una sonrisa cínica en su rostro. Abrió más mi pantalón y me lo arranco tirándolo por algún lado de la habitación

-Creo que es mi turno –dije y la di vuelta quedando ella abajo mío y yo arriba suyo. Me acerque a su cuello y comencé a besarlo y dejar chupones, mientras que ella gemía y tocaba mi espalda.

Prometí esta noche hacerlo con ella, olvidándome del trabajo, mis amigos, mi esposa y mi vida. Solo ella y yo, como dos personas que se desean

-Es increíble lo que hace, señor Bieber –dijo con respiración agitada- El primer hombre que hace que este cerca del orgasmo con solo besarme en el cuello –dijo y me sentí halagado por ser el primero

La agarre de los muslos y me acerque a besar sus labios mientras sacaba de a poco el BabyDoll que llevaba puesto.

Y al fin quedo en ropa interior al igual que yo

-Ahora si comienza la verdadera acción –dijo Miss Playboy, y nos dio vuelta quedando yo nuevamente debajo de ella

Paso sus manos por mis músculos. Y agradecí haber ido al gimnasio la semana pasada.

Con sus uñas jugueteo con el elástico del bóxer. Provocándome, juro que nadie me hizo excitar tanto como ella. Se sentía tan raro pero muy bien a la vez excitarme más allá de lo que Evangelina lograba

Al fin saco mi bóxer. Y mi "amigo" se puso completamente duro viendo el pedazo de diosa que estaba al frente suyo

-Gran paquete –dijo Miss Playboy y al sentir el tacto de sus manos en mi miembro me estremecí

Agarro mi miembro y sus manos comenzaron a moverse de arriba abajo

Hizo esto como cincuenta veces. Y tuve desde cinco a diez orgasmos solo. Luego chupo mi miembro dejándolo al rojo vivo, y otros tres órganos surgieron

Mi turno me tocaba, entonces saque su corpiño desesperadamente dejando ver dos hermosos melones que Evangelina nunca lograría tener y chupe su seno izquierdo mientras masajeaba el derecho con mi mano

-Oh, si. Siga así, señor Bieber –dijo poniendo su cabeza para atrás

En cuanto me aburrí del izquierdo, me dirigí al derecho y lo chupe dejando duro su pezón mientras masajeaba el izquierdo

Mis besos bajaron de su pecho a su estomago, para luego llegar a mi destino, su feminidad. Saque su diminuta tanga, y mi boca viajo a su clítoris.

-"Ábrete para mi"–susurre en su oído y ella obedeció.

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