彡十五

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[POV Rhaast]

Realmente me había agradado ese tal Kai, no quería irme de este puesto, quería seguir aquí, así él volvería a comprar y yo podría atenderlo.

— Emm... Señor, quería pedirle un favor. — Me atreví a decirle al dueño del negocio.

— Claro, lo que sea Ra.

— ¿Puedo quedarme unos días más en el mercado? Verá, ya me siento bastante cómodo ahí y... — Mi voz era claramente nerviosa. — Quiero despedirme bien del empleo... Si...

Soltó una carcajada. — Hace un rato te vi hablando con una linda chica, ¿no será que quieres verla de nuevo? — Levantó una ceja.

— ¡N-No! ¡¿Cómo se le ocurre que me estaría distrayendo en el trabajo?! — Solté una risa nerviosa.

— Pues te doy una semana para seguir coqueteando galán.

Mi tono se volvió calmado. — En primer lugar, no es una chica, también cometí ese error cuando lo vi, y en segundo lugar, me recuerda mucho a un viejo amigo, solo quiero estar más cerca de él cuando pueda, es decir, cuando venga a comprar lo que necesita.

— Ah, ya veo. Igualmente te doy una semana, puedes hacerte lo suficientemente cercano a él como para conocerse mejor y verse algún que otro día fuera del trabajo ¿si? Buena suerte. — Me dio unas palmadas en el hombro y se fue.

— Gracias señor.

Quería volver a verlo, era idéntico a Kayn, a excepción de su actitud tan calmada y "triste", se podría decir.

[POV Kayn]

Estaba seguro de haber sentido algo extraño en Ra, era una presencia diferente a la de un humano común que trabaja en un mercado, pero no sabía que era, mis sentidos no están al 100 en estos momentos.
Llegué a la Orden y me hice una tetera completa de té con las hierbas e ingredientes que me recetó Shen.
Toqué la puerta de la habitación de Zed.

— ¿P-Papá? — Mencioné nervioso. — ¿Puedo pasar?

— Claro que sí, siempre puedes, no necesitas tocar la puerta.

Abrí la puerta y levanté la tetera. — Traigo té... — Traté de sonar más animado, pero mis esfuerzos eran en vano.

— Sé que te pasa algo Kayn. — Dijo mientras colocaba la mesa en su lugar y se sentaba.

— Lo suponía. — Suspiré. Fue un largo suspiro. — Después de todo eres el líder de la Orden de las Sombras, no se te escapa nada. — Una ligera y muy sutil sonrisa se formó en mis labios.

Mi padre me entregó 2 vasos tradicionales de té y yo los llené con el líquido de la tetera. Le entregué uno de ellos y tomé un sorbo del mío.

— Rhaast se fue. — Pronuncié cabizbajo.

— Es una guadaña, ¿cómo quieres que te crea eso? — Usó un tono sarcástico, lo que me dolió un poco.

— P-Papá... Herí a Rhaast... Se fue, n-no volverá... — Mi voz se quebraba más por cada letra que pronunciaba.

— ¿K-Kayn? — Zed empezó a preocuparse, se levantó un poco de su asiento dispuesto a ayudarme.

— P-Pa... Él se fue, no volverá. — Empecé a llorar. — Perdí... A alguien irremplazable... ¡A mi mejor amigo! — Lloré con más fuerza.

Zed se levantó rápidamente y se quitó el yelmo. Me abrazó con fuerza y empezó a respirar aceleradamente.

— Kayn, e-está bien, n-no llores hijo. — Su abrazo era cálido, me hacía sentir seguro.

Empezó a acariciarme el cabello mientras yo lloraba con fuerza en su hombro, no quería mostrarme débil ante nadie, pero ya no tenía opción. Estoy tan deprimido que necesito consuelo de Zed, lo necesito tanto que aunque no recuerde del todo mi pasado, tengo la necesidad de llamarlo papá...

— Soy una basura... — Pronuncié débilmente. — No te sirvo papá, soy un arma rota...

— Kayn, hijo, no eres una basura, mucho menos un arma rota, para mí nunca fuiste un arma así que deja de decir eso. Deja de preocuparme, tú no eres así.

— Lo siento...

Me tomó una mano. — ¿P-Por qué tienes vendas? — Pareciera que tuviera miedo.

Guardé silencio y sacó las vendas de mis manos, solté algunos quejidos de dolor, pues hoy no las había cambiado y las costras y piel se habían quedado pegadas, y se estaban despegando.

Zed al sacar las vendas quedó en shock, tenía una expresión de sorpresa, miedo y preocupación. Acercó su cara a mi mano y empezó a sollozar.

— ¿P-Por qué? K-Kayn... — Se aferró más fuerte a mi mano. — ¿Por q-ué... Te h-haces daño?

Zed levantó la cabeza mirándome fijamente. Sus ojos carmesí cubiertos en lágrimas me hicieron reaccionar, no pude evitar sentirme doblemente culpable. ¿Qué estoy haciendo?

(No esperen capítulos muy seguidos, será uno cada 2 semanas o 1 semana y media, porque me estoy sintiendo mal emocionalmente otra vez, pero no quiero dejar de escribir, los amo <3)

Entre las Sombras [Lol, Kayn]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora