Heart Attack |Marv×Charlie.

Charlie.

" El es mi amigo Charlie, es muy lindo y muy divertido. "

La alarma había sonado, aquel ruido  había llenado el silencio -ademas de sus variados ronquidos- de la habitación de Marv. Su indicador marcaban las diez de la mañana en punto, una perfecta hora como para levantarse en Sábado o eso creía.
la pereza le gana a cualquiera, aquél chico no era la excepción, sin embargo no entro en su propia consciencia hasta sentir algo húmedo y sobre todo rasposo sobre su cara, aunque también le daba cosquillas la sensación, creía que era su hermano menor Morten, jugandole una pesada broma. Le molestaba que hiciera eso, ¿pero que esperaba? así eran los hermanos menores, y sabìa perfectamente que Morten no era la excepción, pero al meno agradecía que su actitud había cambiado a sus catorce año de edad.
y hablando de ello, Marv no dejaba de pensar en que la legalidad le caería como peso a los hombros, asì es, el grandioso Marv ya no era un niño, cumpliría dieciocho.

salio de su pequeños pensamientos, una bocada de aire y el mal aliento del dueño lo habìan hecho reaccionar, su alarma seguía sonar, la apago mirando a su mejor amigo, su perro Sizzles.
Sonrió al verlo, se levantó y empezó a rascar su pelaje de manera juguetona.

- que chico tan bueno eres. -

Añadió, el era su amigo de juegos desde los 8 años, siempre lo acompañó en sus aventuras, aunque el ahora envejecía mientras el crecía, eso simplemente le achicaba el corazón.

- Marvin, Hey, ¡Marvin! -

Gritó su hermano mayor, se me escuchaba molesto, muy molesto mas bien,ya no era cotumbre de que el siempre estuviera así. Había entrado a la habitación de su Hermano sin ni siquiera haber tenido la decencia de haber pedido su permiso, siempre pasaba eso, por más que Marv [Marvin] dijera que tocara la puerta, el jamás atendía sus ordenes.

- ¡¿Donde dejaste mi cartera?! -

Preguntó Martín con su entrecejo fruncido de una manera un tanto exagerada.

- la deje en el comedor...- Respondió Marv indiferente

-¡No está! .- exclamò.

- Entonces sal de aquí y búscala tú. -

Un bufido había salido de su hermano, se había marchado, sabía que cuando su Hermano se ponía de ese modo ya no podía contar con el para nada, siempre fue un chico bastante amable, aunque como cualquier persona sus cambios de humor eran persistentes, ya sea por el estrés o ansiedad que la preparatoria ejercía sobre el y su querido amigo Charlie.

- Mierda..¡Se me había olvidado! -

Su perro simplemente lo observó con una curiosidad que se reflejaba sobre sus ojos. Marv había saltado de su cama y se había dirigido al baño.

- Hoy es el cumpleaños de Lola, y...y..quedé con Charlie a las 9...me va a matar-

Su hablar se centraba en un claro tartamudeo, se había despojado de su ropa. Arrojándola fuera del baño, dejando un tremendo desorden en su habitación.
tenia un baño privado por suerte, abrió la perilla de la agua caliente y luego la fría, tratando de dejarla en un buen estado cálido.
Se había bañado lo más rápido que podía, cerró ambas llaves, tomó una toalla y la envolvió en su cintura antes de irse corriendo a su closet.
Aunque claro ¿que imbécil iría corriendo con los pies mojados?
Tratando de no caer, sacó una playera azul marino, unos pantalones, ropa interior, sus tenis y una sudadera.
Se vistió lo más rápido que pudo, y salió de su habitación sin preocupación a desayunar.