Âme soeur || Seelenverwandte || Jerrie +18✔

Señorita Saltadora

"Creeme mi amor, no haría nada para herirte. No tengas miedo. Te prometo que te enseñaré cosas que podemos hacer y ahora es el tiempo perfecto para hacerlas. Toma mi mano Perrie...."

Claro que confiaba en ella pero tenía miedo. Primero que todo, ¿que tal si alguien se daba cuenta que no estaba en mi cuarto? Y segundo, tengo que admitir que tenía miedo a las alturas. Jade quería enseñarme algunas cosas y estaba feliz por ello, pero nosotras nunca habíamos dejado mi habitación en las noches así que estaba nerviosa. Sabía que caer del tercer piso era un camino muy largo. Respire profundamente antes de agarrar su mano. Al principio sólo estábamos paradas agarradas de las manos. Vi sus preciosos ojos avellana deje que mi mirada viajara por todo su cuerpo. Podía ver su perfecto tono de piel debajo de su ropa y deseé que ella estuviera totalmente desnuda todo el día o la noche.

Si tu madre supiera acerca de tus sucios pensamientos.... O... Oh mi dios, espero que Jade no sintiera eso... No tuve tiempo para terminar el hilo de mis pensamientos porque senti unas muy fuertes manos levantándome a un estilo nupcial. Sentí la fría sensación como siempre cuando ella me tocaba y quería acercarme más a ella. Pensé que era raro nunca sentir frío entre sus brazos, sólo calientita y agusto. Cerré mis brazos alrededor de su cuello y discretamente olí su ondulado cabello. Escuché una risita, que me hizo darme cuenta que no había sido para nada una secreta olfateada. Esa risita me despertó de mis sueños y me recordó lo que haríamos.

"Voy a saltar ahora, no te preocupes ni siquiera notarás lo que está pasando. Estoy segura de que incluso lo encontrarás placentero..."

Cerré mis ojos e intenté pensar sólo en Jade y no en el hecho de que ibamos a saltar. Ella besandome... Ella bailando conmigo... Ella... SALTANDO. Sentí que nos movimos pero no tuve el valor para abrir mis ojos para ver qué sucedía realmente. Tan rápido como comenzó, terminó. Sentí sus labios junto a mi oreja pero no dijo nada. Me empecé a relajar después del salto de la muerte y ella también lo sintió.

"No fue tan malo, ¿verdad mi amor?"

Después de verla con el ceño fruncido me di cuenta que realmente no había sido tan malo. Tal vez podría ser divertido en alguna otra ocasión.

"No, no lo fue. Sólo quiero decir que te amo por no dejarme caer."

Jade me sonreía diabólicamente. Me dejo caer pero me atrapó pero me atrapo antes de chocar contra el duro asfalto. Mi corazón tamborileaba como un conejo y latió aún más rápido cuando sentí su cara a escasos metros de la mía.

"¿Esa es la única razón por la que me amas? No debes decir cosas como esa, puedo estar realmente sorprendida y accidentalmente dejar que caigas."

No pude hacer nada más que reír y besarla. Pienso que estoy lista para algo más, después de todo, la noche no duraría para siempre.

"Estás en lo correcto, te amo por muchísimas otras razones Srita. Saltadora. Así que, ¿qué más tienes reservado para mí? ¡Vamos!"

Estaba cansada después de nuestras pequeñas experiencias. Me mostró que tan rápido puede moverse un vampiro, que tan fuertes son y lo buenos que eran sus sentidos. Me encontré asombrada de todo pero para mi sorpresa, no tuve ninguna dificultad para aceptar todas esta cosas inhumanas. No me asustaron a diferencia de lo que asustaría a las personas normales lo harían al saber todo lo que ella podía hacer, eso tampoco cambiaba el hecho de que ella aún era la misma Jade. Aún no estaba cerca del amanecer, pero supuse que íbamos a regresar a mi habitación y dormiría en sus brazos. Aparentemente estaba mal y lo que ella tenía planeado fue completamente una sorpresa para mi. Una buena.

"Y ahora cariño, te enseñaré mi nuevo hogar. Decore el cuarto sólo para ti..."

"Oh Jade, estoy... emocionada por verlo. ¿Pero para qué necesitas un cuarto...? Pensaba que..."