– Ahora cuentame, ¿Que pasó cuando recuperaste la conciencia?
Nada, absolutamente nada podía ver, no sabía cuanto tiempo había pasado desde que desperté, todo estaba demasiado oscuro y estaba comenzando a hiper ventilar, no me gustaban los espacios cerrados y le temía a la oscuridad, así que esas dos cosas juntas estaban haciendo que me diera un ataque de pánico.
– Buenas noches, ¿Dormiste bien? – Escuché a una ronca voz decir, ¿me estaría hablando a mi? – Vamos, cariño, no te quedes callado.
– ¿Me habla a mí? – pregunté entre cerrando los ojos para ver si podía ver algo, pero no, todo estaba demasiado oscuro.
– ¿Pues a quien más?
– ¿Que quiere de mi? – dije ignorando su pregunta.
– Nada.
– ¿Y por que estoy aquí?
– Por que quiero y puedo.
– Imbécil.
– No deberías insultarme, amor. ¿O quieres terminar igual que el mierda de tu padre? – podría jurar que el mal nacido estaba sonriendo, escuché pasos y una puerta cerrarse, al parecer me había dejado sólo.
¿Entonces no lo había soñado? Mis padres estaban muertos, el recuerdo de lo que había visto en la sala hizo que mi estómago se revolviera, lágrimas corrían libres por mis mejillas, no podía detenerlas, estaba sólo, ya no habría más desayunos familiares con las sonrisas amables de mi madre o los regaños de mi padre, ya ni escucharía a mi hermana quejarse del viejo Jhonson y su maldito chihuahua, nunca volvería a verlos, incluso si llegaba a escapar de aquí, estaba sólo, ahora era huérfano, ahora tendría que valerme por mi mismo.
No sé si fueron, horas, o tal vez sólo fueran algunos minutos cuando volví a escuchar la puerta abrirse, por acto reflejo me acerqué hasta lo que creí era la pared, cerré los ojos al ver una luz cegadora de repente, lentamente fui abriéndolos mientras me acostumbraba a la luz.
– Come – dijo aquella voz que anteriormente había escuchado, era aquel hombre que había visto en mi casa; era alto, tenía el cabello negro y más o menos hasta los hombros, tenía unos fríos ojos verdes, al parecer había pasado un largo tiempo inspeccionándolo ya que cuando dirigí mi vista hacía sus ojos de nuevo estos tenían un ligero brillo y había una mueca (o tal vez era una sonrisa) en su rostro.
– ¿Disfrutando la vista, eh? – murmuró acercándose lentamente hacía mí. – Toma, no has comido en todo el día, lo hizo mi hermano, así que si sabe como la mierda es su culpa.
Me extendió una bandeja; había un sándwich de queso, agua y sopa, puse la bandeja en el suelo y tomé el plato con sopa, comenzé a comerla, joder, estaba hambriento y la sopa estaba deliciosa, cuando finalmente engullí todo lo que había en la bandeja. Levanté mi vista y el hombre ya no estaba, inspeccioné la habitación con la mirada y vi una cama, un buró y dos puertas, me levanté del piso y puse la bandeja sobre el buró, me acerqué a las puertas una estaba cerrada y otra daba hacia el baño.
Aún no sabía que rayos hacía aquí, pero mi hermana no estaba muerta, o eso creía, y si ella llegaba a seguir con vida podría buscarme, aunque por ahora sólo me quedaba esperar.
OMG I'M BACK AGAIN...
Antes que nada, esta historia será corta, unos 10 o 15 capítulos así que las cosas serán un poco más rápidas y no crean que todos los capítulos serán así de vainilla, por algo el título, no? xdxdxd
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The Soup Fic.
Fanfiction"¿Por que sopa?" "¿Por que no?" Frank Iero estaba muy cerca de obtener su tan adorada libertad, pero, ¿a que costo?