Anomalías del amor

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¿Quién me iba a decir que yo, el colmo de la racionalidad, acabaría despatarrada en el regazo de un hombre aparentemente importante? ¿Y quién me iba a decir, sobre todo, que querría más después de aquello?Todo el mundo tiene una crisis existencial al menos una vez en su vida, y mi vía de escape se presenta en forma de congreso científico. Para lo que no estaba preparada, era para que me hicieran la vida imposible y el cliché del jefe cañón me acompañara durante mi viaje a Múnich, complicando las cosas ya de por sí difíciles. Con la cabeza bien puesta sobre los hombros es fácil resistirse a la tentación, pero, ¿y cuando te hacen perderla? ¿A qué te aferrarías tú...?

Chocolate CalienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora