Puras mentiras (Furry/Yaoi)[COMPLETA]

《12》

-Hace unos años a un oso polar llamado David le diagnosticaron un desorden de personalidad múltiple. Yo soy ese oso polar- ¿y que tienes que ver con todo eso? -Traté de llevar una vida normal, sólo tenía dos personalidades aparte de la "principal"; un joven oso polar y tiburón, a ellos no les molestaba no tener el control o la "luz" como solíamos decirlo.

-Ese joven oso polar era Agustín- el original asiente.

-Todo cambió cuando apareció ese adorable nutria, prácticamente la personalidad "mala". Él se molestó por no tener el control de la luz, así que convenció a Agustín para ayudarlo a tomar el control.

-¿Y el tiburón?- David baja la mirada, eso lo dice todo.

-La maldita nutria lo mató por estar en su contra, y a mí me encerró en una habitación oscura al final de un interminable pasillo. Después apareciste tú. Por algún motivo te llamas igual que yo, pero eso no importa; Mati vio su oportunidad y trató de manipularte, aunque no sabias sobre la luz y las demas personalidades.

-¿Y por qué no podía "controlar la luz"?- tratas de entender de a poco.

-Ni yo se la respuesta, aunque mi teoría es que si la personalidad líder, por llamarme de alguna forma, es encerrada o asesinada nadie más puede controlar la luz. Ya que yo, seria la conexión directa con el cuerpo. Tal vez por eso Mati no me asesinó¿quien sabe?- no sabes que decir sobre eso.

-¿Y por qué estas aquí?- hay tantas preguntas y tan pocas respuestas.

-Logré engañar a Mati, los jóvenes de hoy en día son tan fáciles de convencer. "Prometo darte el control" es lo único que tuve que decir, Agustín se enteró y su alianza fue deshaciendose lentamente, Agustín me tenía miedo.

-¿Y quién es Abel?- preguntas interesado. El ambiente ya es mas tranquilo. Se parece a una charla entre amigos.

-Un chico que conocí una noche y nunca volví a verlo- entonces nada sucedió...

-Entonces viví una mentira...

-Si, una mentira en base a mis recuerdos- David se para y se dirige hacia la puerta -Armaste tu propia historia usando un poco de mis recuerdos. Todo aquel que conociste, familia, amigos, incluso Abel; nadie te conoce, sino a mí.

-¿Y qué pasará ahora?- en realidad no te interesa.

-Tomaré el control y volveré a mi vida normal, me pregunto cómo estará mi cuerpo... ¿Y tú?¿Estarás bien después de enterarte de todo esto?- dice con un aire preocupado.

-Hay cosas que debo procesar aún, pero prefiero terminar con todo este sufrimiento en este momento y dejarte vivir tranquilo- le sonríes a David, él se sorprende. Asiente y te da el arma.

-Tal vez te conocí muy poco, pero me hubiese alegrado tenerte como un amigo- su tono muestra sinceridad.

-A mi igual, pero... mejor prevenir que curar- apuntas a tu cabeza.

-Gracias por entender mi situación- David te sonríe mientras una lágrima cae por su mejilla. Se forma un silencio de simples minutos, parecen horas.

-Adiós, fue un gusto conocer al verdadero.
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Jalas del gatillo.
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Una casa vacía es lo último que queda.
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Una bella brisa entra por la ventana.