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¡¿Dónde demonios están mis primas?!
Vamos, puedo aceptar que desaparezcan un rato. ¡Pero un día completo no!
Al principio no le puse atención, por que bueno, Destiny desapareció desde temprano, eso lo veía venir pero supuse que ya de tarde la vería. Pero, no aparece.
Y ahora Annie, después que lloviera y pues nos distrajieramos en la lluvia. Luego de la hermosa tierna escena que nos regalaron ella y Kyle. Que me lo esperaba, si me lo preguntan son tal para cual.
Desapareció. Fue a buscar leña.
Leña mi mama, mi abuela y yo.
¡Mentira! Si me hubiera dicho que quería comerse con el segundo de los Sulliban, le hubiera creído y le diría que usara protección.
Además, es de mala educación que si estamos en grupo, dejarnos como si no existieramos.
Ojalá se las comiera un oso, grande y hambriento.
Ya ha oscurecido. Estoy preocupada enserio no quiero que el oso de verdad las coma, quiero que estén aquí para partirles la madre y regañarlas mucho por abandonarme.
—Calmate Mady, ellas están bien están con mis hermanos —Ares la persona mas hermosa de este horrible universo, trata de calmarme regalandome una sonrisa.
¿Como puedes tener unos ojos tan azules? Mis ojos también lo son pero lo suyos son tan profundo que creo que mar debe de tenerle envidia.
—¿Y si se las comió un oso? ¿Grande y hambriento?—inquiero preocupada. Ahora el peso de mi pensamiento ahora me pasa factura.
El ríe, y yo me dispongo a mirarlo mal. Se que de verdad no hay osos en este pueblo, y que también se que estoy delirando a sobre manera, ellas conocen este bosque no es la primera vez que hemos venido. Pero sigo pensando lo peor.
—¿Enserio?—pregunta.
—Bueno no, pero estoy nerviosa—justifico.
Su mirada es dulce. Llena de emociones. Sonríe mucho más que hace un rato. Y me roba un pequeño beso, que al instante me hace sonreír.
—Eres tan hermosa.
Acaricio su cabello.
—Tú también—le dio otro beso—Tienes que cortarte el cabello—.toco uno de los mechones marrones que tiene en la frente. Ríe.
—No quiero —hace puchero.
—Pero lo harás—pongo ojitoa de perro mojado.
Encierra los ojos.—Talvez, si me das un beso.
Asiento.
Y me besa. Su beso cálido y tierno, de esos que siempre me daba en la frente cuando se despide me mí. Y le sigo, porque me encanta ese sabor que tienen y esa sensación de energía que me invade cuando lo beso. Lo sigo por que quiero hacerlo, porque Ares me encanta y por que es mi hermoso y ojiazul novio.
—¡Hey, tórtolos, vengan vamos a ver una película! —gritan, ese es Mike.
Me separo de el dejando un corto beso antes de levantarme.—Vamos.
Asiente y se levanta.
•••
Luego de estar a la mitad de la película, me quede dormida. Nunca fui buena para ello casi siempre me duermo.
A la mañana siguiente , despeinados, sucios y llenos de lodo, los chicos aparecieron cargando a Annie por que tenía el tobillo mal.
Me siento fatal, pero enojada al mismo tiempo.
Ares se ofreció a verificar el tobillo de Annie, y ahora le esta poniendo un pequeño vendaje, no nada de que alarmarse. Pero es mejor prevenir antes que lamentar. El trabajo como ayudante en un orfanato y, estas cosas de las lecciones se daba. Y le toco ayudar a muchos niños. Es tan genial.
Annie se queja.
No es el momento Mady.
—No te quejes, te lo mereces—refuto con un poco de enojo.
—Dejame en paz Mady, me has regañado desde que llegue. Callate ya—dice haciendo una mueca de disgusto.
La miro mal—Estaba preocupada, pero perdoname por hacerlo. La próxima vez que desaparezcas ojalá que te coma un jodido oso.—respondo.
—Bien lo tendré en cuenta.
—¡Jodete!—grito y me voy de donde están. Annie es una jodida desagradecida, yo aquí preocupada, pero bien. Si así quiere las cosas que se joda.
No me gusta pelear con ella pero estoy muy enojada ahora y nisiquiera me importa en este jodido momento. Termino dentro de bosque no muy lejos del campamento. no soy tan estúpida para alejarme, mucho menos sola. Me siento en una piedra enorme que ahí cerca de un árbol y me dispongo a dejar mi cabeza del tronco. Me he calmado un poco. puedo sentir la brisa fresca rosando mi mejilla, y cierro los ojos dejandome llevar por la tranquilidad que comienza a invadirme en este momento. calmandome y dejandome pensar.
Escucho pasos cerca, las hojas crujen, pero no abro los ojos. Porque no quiero, porque es mejor así. Se sientan a mi lado dejando un pequeño espacio entre nosotros. Abro los ojos curiosa; son Annie y Destiny.
Destiny esta parada dándome una pequeña sonrisa de boca cerrada, y Annie esta con los ojos cerrados igual a como estaba yo hace un momento.
—Lo siento no debí hablarte así. es que me dolía, y tú regañandome. me estaba volviendo como loca—murmura arrepentida.
Sonrío un poco.—Yo también me disculpo, estaba actuando como una lunática, tienes derecho hacer y desaparecer con quien quieras. Me preocupe de una manera exagerada.—admito abrazándola— Lo siento.
Ella corresponde a mi abrazo.
—Eh, eh. No me excluyan, yo también me disculpo—dice Dess, y nos separa—Lo siento por ser tan hermosa. ahora así—habla y extiende los brazos para abrazarnos, pero la detenemos entre risas.
—No es valida esa disculpa.
sonríe.
—Lose, entiendo, no me puedo disculpar por ser hermosa—responde obvia dejando caer su cabello hacia atrás.—¡Ay!, no hagas eso.
