OBSESSION ➳ JiKook

S I X

Jimin ladeo su rostro y sonrió con sorna.

- Sabes amor, para que tú y yo podamos estar juntos, primero debo deshacerme de todas las personas que lo quieran impedir. - Y tras eso, paso fuertemente el cuchillo por el cuello de la señora Jeon causándole una profunda herida, la soltó y esta cayó al suelo.

Jungkook observo con los ojos bien abiertos la escena, las lágrimas comenzaron a salir y sus débiles piernas lo hicieron caer de rodillas al suelo.

No podía creer lo que estaba viendo. A su linda y adorada madre no podía estar pasándole eso. Hoseok se removía en el suelo intentando zafarse mientras las lágrimas también mojaban sus mejillas, quería correr hacia el cuerpo de su madre, pero no podía. - Kook, ayúdala.

El alto con temor se acercó al frágil cuerpo de su madre y lo tomo entre sus brazos.

Sus sollozos aumentaron al percatarse de que no respiraba. Le suplico que despertara mientras la movía, pero ya era demasiado tarde.

Ella ya estaba muerta.

Negó con la cabeza y estrecho más el cuerpo de su madre, no podía creer que ese loco la había matado y él no pudo hacer nada más que observar cómo eso sucedía.

- No llores amor, sabes que debía hacerlo. - Jimin tomo del brazo al alto y lo levanto. Este lo vio con el ceño fruncido y comenzó a golpearlo en el pecho.

- Eres un hijo de puta, te odio, te odio. - El pelicafe lo tomo de las muñecas y lo acerco más a su cuerpo. Aspiro el olor que emanaba el cuerpo contrario y sonrió.

Había extrañado tanto a su chico.

Jungkook forcejeo mientras le gritaba que lo soltase, pero lo único que consiguió fue que Jimin se molestara y que con fuerza lo estrellara contra la pared, logrando sacarle un gemido de dolor.

-Amorcito estate quieto, no quiero golpearte. Pero si sigues así tendré que hacerlo - Jimin acaricio la mejilla contraria con su diestra, la cual estaba llena de sangre y con el cuchillo en ella. El alto tembló mientras sus lágrimas seguían saliendo. ¿Cómo es que nunca se dio cuenta del gran problema que tenía el pelicafe?

-Suelta a mi hijo, maldito loco. - Jimin sonrió con malicia, al parecer el mayor había recuperado la conciencia.

-Papá, salva a Hoseok. Yo estaré bien. - El mayor no muy convencido se acercó al menor y comenzó a desamarrar las manos del menor.

Jimin negó con la cabeza mientras ejercía más fuerza sobre su cuello.

-Muy mal, bebe. -Dijo y apuñalo la pierna del alto, este grito de dolor y el pelicafele dio un beso en la mejilla antes de soltarlo y dejarlo caer. Con una mueca en el rostro se giró y vio a unos cuantos metros, al mayor intentando desamarrar los pies del menor. Intento caminar hacia ellos pero algo lo detenía, o mejor dicho alguien. El castaño tenía sus brazos sujetos a una de sus piernas. -Kookie, déjame. -Gruño y le dio una patada en el estómago al alto con su otro pie, ocasionando que este volviera a gemir de dolor mientras lo soltaba.

Jimin camino hacia sus siguientes víctimas y sonrió cínicamente. Ahora si podría deshacerse de ese par.

Con brusquedad tomo del cabello al mayor y lo arrastro cerca del cuerpo muerto de la madre de Jungkook.

-Sabe una cosa señor Jeon, usted nunca me agrado. -Se colocó a horcajadas sobre el mayor y su entrecejo se frunció. - Por su culpa mi Kookie me dejo, así que debe pagar. -Y tras eso, con rencor le clavó el cuchillo en el pecho. Un grito desgarrador salió de la boca del mayor, el azabache sonrió con sorna. Le gustaba tanto ver como sufría (así como él lo hizo cuando Jungkook lo dejo), por ello saco el cuchillo y con más fuerza se lo volvió a clavar.

Un grito se escuchó a su espalda para segundos después sentir algo estrellarse en su cabeza, haciendo que se cayera de sentón en el suelo. Llevo una de sus manos hacia el lugar lastimado mientras observaba a la persona que lo había golpeado.

Su rostro se ensombreció al ver parado frente a él, al menor de los Jeon con un porta retratos en la mano, al parecer el objeto que lo había lastimado. Sin pensarlo, se levantó y se abalanzó sobre él, haciendo que los dos cayesen al suelo.

Le arrebato el objeto y comenzó a golpearlo con el mismo en el rostro.

El menor intentaba defenderse pero no podía, el pelicafeera más fuerte, y poco a poco fue quedando inconsciente mientras su rostro estaba bañado de sangre.

-Déjalo, por favor,Jimin. - El Pelicafe se detuvo ante las suplicas del alto y giro su rostro hacia él, le dolió verlo así, pero era por el bien de los dos.

Tiro el objeto a alguna parte recóndita de la sala, se levantó y camino hacia el cuerpo sin vida del señor Jeon. Y sin cuidado alguno sacó el cuchillo.

Jungkook se agitó al ver las intenciones de su ex novio, por ello se levantó como pudo y se acercó al cuerpo del menor.

Poso su oreja sobre el pecho contrario y sonrió tristemente al escuchar los leves pálpitos del corazón de Hoseok, aún estaba vivo, así que debía hacer lo que fuese necesario para salvarlo tan siquiera a él. Sin embargo, un fuerte golpe en su espalda hizo que cayera al suelo. Observo con los ojos bien abiertos lo que Jimin iba a hacer y con rapidez cubrió ese lastimado cuerpo, logrando que el cuchillo se clavara en su espalda e inevitablemente gritara de dolor.

Jimin quedo consternado, no podía creer lo que acababa de hacer. Había lastimado a su amado y todo por culpa del menor de los Jeon.

Por culpa de ese chico, su amor, su nochu estaba herido.

Todo era culpa de él y eso debía pagarlo. Así que con cuidado saco el cuchillo de la espalda del alto, tomo su lastimado cuerpo y lo coloco en el suelo.

-Amor, no debiste hacer eso. - Acaricio suavemente su mejilla y deposito un beso en su frente antes de apartarse.

Con enojo se colocó a horcajadas sobre Hoseok y sin titubear le clavó el cuchillo en el pecho. Sonrió al ver que el menor ya casi no respiraba, así que saco el cuchillo y lo volvió a clavar, una y otra vez. Se estaba desquitando del menor, ya que gracias a él su chico estaba herido.

Las lágrimas caían por las mejillas de Jungkook, su cuerpo se desangraba y su corazón dolía demasiado. Se sentía tan débil, inútil, miserable. Todo era su culpa, si nunca se hubiera fijado en Jimin su familia ahora no estaría muerta, pero que iba a saber él que ese apuesto chico era un psicópata.

Jimin sonrió satisfecho, ahora si nadie lo iba a separar de su amor. Dejo el cuchillo en el suelo y se levantó. Se acercó al devastado cuerpo de su Kookie y lo tomo entre sus brazos para luego colocarlo en el sofá.

-Ahora si bebe, estaremos juntos para siempre. Te amo. - Murmuro y acaricio el cabello del mas alto.

¿Amor? Eso no es amor, Es una obsesión.