Harry es un chico de 17 años que cursa su último año, todo va bien hasta que conoce a Valery, Harry cae perdidamente enamorado de ella, de su nombre, de su alma y de su ternura disfrazada de frialdad
Estaba decidido a terminar con María, así que la invite a ir al parque un rato, mi plan era inventarle una excusa, no era capaz de decirle que no estaba enamorado de ella, y que nunca lo estaré.
En el parque, estaba un poco nervioso, la lastimaría, y ella lo único que había hecho era amarme y darme todo su amor.
-Amor vamos a un café, tengo algo que decirte
-Claro amor- dijo animadamente dándome un tierno beso en la mejilla y tomándome de la mano.
Todo estaba según el plan hasta que,escuché unos gritos de una chica
¡Ya bájame!- gritaba- pero cuando me acerqué lo suficiente...
Ví a un hombre alto jugando con una bella rubia
¿Pero que rayos?- ¡Es Valery!!
Me solté rápidamente de María, sentía como se me hervía la sangre, sentí una desesperación en lo mas profundo de mi ser, la ira solo distrae la tristeza.
Valery estaba al lado de un hombre, dándole cariño y amor, y yo no era era ese hombre, sentí rabia pero al mismo tiempo miedo, miedo de que ella encontrara la felicidad en los brazos de ese hombre, y rabia porque me odiaba por dejarla ir.
Dejé ir a la persona que me enseñó a arriesgarme, a darlo todo, que aunque el barco esta mas seguro en el puerto, no es para eso que se construyeron los barcos. La había perdido, tal vez, para siempre.
No soportaba la idea de vivir sin ella.
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Las personas llegan y se van, todos sabemos que así tiene que ser, sin embargo nos horroriza cada vez que sucede.
Las lagrimas se me acumulaban en los ojos, pero no permitiría que se virtieran , tenia deseos de ir y golpear a ese tipo, tenía muchas ganas, pero¿ yo quien era ? Yo no era nadie para decirle que se alejara de ella, ya no era mía.
Pero ellos se dieron cuenta de nuestra presencia, Valery al mirarme se le borró repentinamente su sonrisa, no sabía que hacer, si irme o hablar con ella, pero María saludó animadamente al tipo con quien estaba Valery, se conocían.
-Hola pequeño Robert- saludó María dándole un abrazo
-Como estas de preciosa mi María- ah te presento a mi novia, Valery
-Mucho gusto María
Al escuchar eso, quedé frío, sentía un dolor punzante en el estomago y me dolía la garganta, me daban leves escalofríos por la espalda.Hay que sentir el dolor.
-Y él es mi novio Harry- dijo María sacándome de mi trance
