Ya llevo tiempo escribiéndote, contándote todo lo que por el momento se me pueda imaginar. Mi confidente, que se ha ido convirtiendo en unos de mis amores. Expuesta, ante los que si no son mis amores, que me ofrece el mundo. Estando aquí, no estoy tan expuesta ante ello. Pero para los que no escriben, dejan su corazón desnudo a la intemperie.
Pero hay algo que no me había preguntado, hasta hace poco. Y fue, ¿como comencé a escribir?
¿Cuando decidí comenzar a tener un diario?
Un cuestionamiento que parece ser simple pero en realidad es muy inquietante. Todo se remonta a 4 años atrás. Cuando yo me encontraba en 3 de primaria. Y me gustaba Manuel, el que era mi mejor amigo del cual me encante muchísimo. Cabe mencionar que en ese momento yo estaba muy pequeña. En ese momento fue en la primera ocasión que me gusto. De esa vez si no lo recuerdo mal, él no se enteró. Claro, una niña insolente de 9 años confundida y emocionada. Decidí , día a día, después de llegar del colegio, escribir lo que sentía por él y mis vagas vivencias en el colegio. Claro, relatadas de una perspectiva más inmadura que ahora y más desordenada. Y así se mantuvo por un rato.
También, en esos diarios pegaba recortes, letras de canciones o alguna otra cosa que en el momento me gustase. Me resulta un poco nostálgico verlos, un pedazo de mi infancia guardada ahí también. Parece que inconscientemente la vida me comenzó a parecer abrumadora desde ese entonces. Pero fue hasta este año que le tome un sentido diferente. Deje de poner entre mis paginas cosas llamativas, y deje solo letras. El punto central de atención. Hasta ahora, he concluido que es genial y impresionante. Sacar un poco de lo que llevo dentro, me permite revivir los momentos una y otra vez. Y descubrí, que de alguna forma, al escribirlo, todo lo que existe es eso. No una perspectiva ajena y queda como una verdad absoluta.
Hay magia en hurgarse la mente a uno mismo. No conozco gran variedad de gente por este momento, pero si conozco gente sobre la que vale la pena escribir. Eso lo entendí con Taylor, pero ahora lo hago yo y a mi manera, no en canciones, pero si en forma poética y detallada. Es que es un sentir inconfundible cuando los ves y sientes que tienen algo especial. Puede estar en cualquiera, solo hay que saber reconocerlo. Pueda que no lo entiendan si se los cuentas, sean curiosos o simplemente no quieran saberlo. Pero de igual forma, lo hago, y son inmortales. Da igual si al día siguiente no nos hablamos o si tuve una pelea con esta persona, ellos viven entre mis páginas. Y sentarse en un ambiente tan callado como mi cuarto, a contar las historias que probablemente nadie más cuente sobre ellos, es algo adictivo. Me di cuenta que cada persona tiene un nuevo amor para ofrecer, uno que no conocemos. Y es una gran idea incluirlos a este viaje de mi vida. Son inspiración.
A/N:
El verano de mi vida ha comenzado. Espero te quedes conmigo, querido lector/a. Por que siempre cada día trae nuevas sorpresas🌞
¡Gracias por leerme, te quiero mucho! ❤️️🌱🌴
¿Te gusto el capítulo?👀 Llenarías mi corazón de felicidad si me dejas un voto, comentas que te pareció o lo compartes con tus amigos ❤️️
YOU ARE READING
Writing In The Dark
Novela Juvenil" Estas historias alguna vez fueron sobre mi vida. Ahora, lo serán sobre la tuya. " Estas, son las confesiones sobre la vida de Gracia. Algunas más realistas que otras. Algunas más románticas que otras. Donde todo sube y baja, y nunca se sabe que es...