EL COMIENZO DE MI FINAL

El cuerpo

Entraron nuevamente a la sala médica, note como me tumbaban en la fría camilla y me comenzaban a atar brazos y piernas. Me colocaron una especie de sombrero metálico en la cabeza, permanecí inmóvil durante mucho rato, el tiempo transcurría lentamente, no sabía si habían pasado minutos o horas.

Nuevamente la sentaron en la silla y la llevaron a la habitación, se preguntaba que sería aquello que le habían puesto y para qué.

Al día siguiente entro la mujer a buscarla, y la condujo a través de varios pasillos hasta llegar a una puerta en la que había un bonito letrero de color rosa en el que había escrito el nombre de Lara.

Abrió la puerta, era una hermosa habitación, acostada sobre la cama, se encontraba una chica de más o menos mi edad, supuse que ella seria Lara.

Me la presento, aunque parecía estar dormida, estaba conectada a una maquina la cual reproducía sus signos vitales.

La mujer comenzó a decirme que ahora no podía escucharlos pero que sabía que podía sentir que estaban allí. Lara estaba pasando por una gran enfermedad la cual hacía que su cuerpo dejara de responderle.

Me dijo que necesitaba un nuevo cuerpo para su hija, que esa era mi función, iban a trasplantar su cerebro en mi cuerpo y así reparar las células dañadas con una técnica experimental que acaban de descubrir recientemente, y esperaban que funcionara correctamente, pues habían invertido mucho tiempo en su descubrimiento y a su hija ya no le quedaba mucho.

Mi cabeza no podía procesar con claridad lo que me acababa de contar, era algo ilógico, solo podía pensar en que tenía que salir de ahí como fuera.