Siempre fuiste tu (Sterek)

Capítulo 23

PoV Liam

Hoy no he visto a Stiles y no he podido hablar con él de Peter. Necesito saber más cosas de él, quiero conocerlo a fondo. Noto una conexión con él que ni con Theo. Giro la cabeza y Mason sigue hablando, hace tiempo que no lo escucho, hace tiempo que mi cabeza solo está en un persona.

- ¿Me estas escuchando?- Me pregunta Mason parándose en medio de la calle mirándome.

- No, lo siento.- Le digo con una sonrisa avergonzada mientras comenzamos andar otra vez.- ¿Dónde vamos?- Le digo mirando hacia la calle confuso, Mason resopla y cruza los brazos en su pecho.

- Si me escucharas lo sabrías.- Me dice mirándome fijamente, yo bajo la mirada avergonzado y le susurro un lo siento.- Vamos a un cafetería nueva, es una cafetería con libros.- Me dice con los ojos iluminados.- Podremos investigar sobre los seres sobrenaturales.- Me mira emocionado, yo me rio mientras le paso un brazo por los hombros para acercarlo a mí.

Mason es mi mejor amigo desde siempre, él fue el primero en hablarme cuando llegue y él único que se quedó a pesar de todo. Él fue el único que estuvo ahí cuando supo todo mis problemas. Tenemos una relación de hermandad, nos hemos quedado a dormir en la casa de cada uno más veces de las que podemos contar, hemos dormido juntos en la misma cama sin problemas y incluso somos capaces de cambiarnos el uno delante del otro sin ningún problema. Mason a los trece me contó que era gay, pero eso no cambió en nada nuestra relación, he estado ahí cuando sus novios le han dejado, le he acompañado al local al que va y hecho de celestino muchas veces. Cuando Mason se enteró de lo que me había convertido no se fue, se ha quedado conmigo y la manada.

- ¿Va a estar Corey, verdad?- Le digo mientras apoyo mi cabeza en la suya y dejándome guiar por las calles.

- No se de que estás hablando.- Me dice sonrojándose y mirando hacia delante. Yo sonrío y le doy un beso en la mejilla.

- Anda tonto. Crees que no he visto como lo miras en el instituto o cuando habla con la manada.- Le digo mirándolo, él suspira, sonríe y me mira.

- Vale si puede ser que me guste un poco.- Me dice deteniéndose delante de un local de estilo rústico.- Y puede ser que este aquí dentro.- Me dice agarrando mi mano que descansa en su hombro entrelazando nuestros dedos.

- No es por nada, pero si entramos así se va a pensar que somos pareja y a la mierda tu posibilidad de estar con él.- Le digo abriendo la puerta, el sitio es preciosos, tiene estanterías del suelo al techo en las cuatro paredes y hay como otras tres repartidas por todo el local. A la derecha hay una escalera en forma de caracol que supongo que llevaba a una segunda planta con más libros.- Es preciosa Mason.- Le digo admirando el sitio.

- Sabía que te gustaría.- Me dice sonriendo y yendo hacia la barra.- Y sobre lo otro yo se lo que me hago.- Me dice sonriendo.- Dos batidos de chocolate para la segunda planta.- Le sonríe a la camarera que nos mira con una sonrisa enorme, ella le responde con un enseguida, subimos a la segunda planta cogidos de la mano, cuando llegamos arriba mi vista rápidamente cae en el chico camaleón que está en el fondo leyendo. Mason se sienta a dos mesas de él y empieza a ponerse nervioso.

Alargo la mano y la pongo encima de la suya para que se relaje y ese gesto no pasa desapercibido para el chico que tenemos al lado. Huelo un poco de enfado y envidia, sonrío mirando a Mason.

- Tranquilízate pequeño.- Le digo mientras le guiño el ojo disimuladamente a mi mejor amigo. Él asiente entendiendo a lo que me refiero y suspira.

- No es mi culpa que tenga miedo a tus padres.- Me dice mirándome con una sonrisa nerviosa, perfecto que empieza la obra de teatro.

- Venga ya, si has venido muchísimas veces a casa y a mis padres les encantas.- Le digo acariciando la mano mientras miro de reojo las reacciones de Corey, este resopla y niega acercándose el libro a la cara, el olor a envidia se hace más fuerte.

Saco el móvil y le envío un mensaje a Mason mientras la mesera nos deja los batidos en la mesa.

Liam: El sujeto suelta un olor a envidia y a enfado que me tira para atrás.

Mason: Omg! Sabe quien soy y algo hay.

Yo levanto la mirada y le sonrío. Me acerco más a él y le doy un beso en la mejilla. Un golpe nos hace fijarnos y vemos el libro que tenía Corey en las manos está abierto encima de la mesa, pero sin rastro de él. Vuelvo a mirar a Mason, él tiene la vista fija en mi espalda y tiene el ceño fruncido. Un mensaje llega a mi móvil y por el tono se que es de Mason.

Mason: Hay un hombre de unos treinta y pico años mirándote fijamente a tu espaldas.

Liam: ¿Más o menos de mi altura, pelo marrón, cara de psicópata y barba de unos tres días?

Mason: Mmm sí. ¿Lo conoces? o.o

Liam: Si -.-

Vuelvo a mirar a Mason cuando Corey aparece un poco más calmado y se sienta en su mesa. Le hago una señal con la cabeza para que vaya hablar con él y Mason niega con la cabeza mientras lo mira de reojo. Pongo los ojos de lobo y vuelvo hacerle el gesto, él me mira por unos segundo, se rinde levantándose y sentándose enfrente de Corey.

- Hola.- Le dice Mason con un poco de vergüenza.

- Tu novio se va enfadar.- Le responde a Mason con recelo mientras se concentra en el libro.

- ¿Liam?- Le pregunta levantando una ceja y él asiente. Mason se hecha a reír consiguiendo que Corey lo mire con una ceja alzada.- No es mi novio, él es más como un hermano.- Le dice apoyándose en una mano y mirándole a la cara con una sonrisa.

- Yo... - Lo mira con la mejillas sonrojadas.- Lo siento, por haber sido un borde.- Le dice con una sonrisa avergonzada.- Soy Corey, encantado.

Dejo de prestarles atención cuando una persona se sienta en el sitio donde estaba Mason. Al levantar la vista veo a Peter que me mira con una ceja alzada.

- ¿Haciendo de celestina pequeño hombre lobo?- Me pregunta mirándome fijamente.

- Todo por mi mejor amigo.- Le dijo encogiendo los hombros.- ¿Qué haces aquí?- Le pregunto mientras bebo de mi batido de chocolate. Sus ojos están fijos en la pajitas entre mis labios, sonrío y eso hace que suba la mirada a mis ojos.

- Me gusta leer mientras tomo café.- Me dice levantando una taza, yo asiento y le sonrío.- ¿Qué te cuentas Liam? ¿Alguna pareja?- Me pregunta mientras empieza a leer un libro que también trae con él.

- Pff eso nunca ha sido lo mío.- Le digo encogiendo lo hombros y volviendo a sorber con la pajita, él me mira con una ceja alzada.

- ¿Y eso?- Me pregunta dejando de lado el libro otra vez.

- ¿Quien va a querer estar con un chico con TEI?- Le digo mirando al batido, sin ser capaz de enfrentarme a la pena que debe haber en sus ojos.

Desde que los trece años me diagnosticaron TEI, Trastorno Explosivo Intermitente, desde ese momento cuando estoy muy al limite exploto de forma muy violenta. La última vez que explote, antes de convertirme en hombre lobo, fue en mi antiguo instituto y con consecuencia destroce el coche de mi entrenador.

- ¿Me estas diciendo que Scott convirtió a una bomba andante?- Me pregunta mirándome con una ceja alzada.

- Peter cállate.- Mis garras se clavan en la mesa y rápidamente escondo las manos debajo de esta. Peter me mira con una mirada curiosa y luego sonríe.

- Te propongo una cosa.- Me dice mientras guarda el libro en una mochila y apoya los dos brazos en la mesa, yo asiento para que continúe.- Te propongo ayudarte a controlar tu temperamento.- Me dice con una sonrisa.

- ¿Y tú qué sacas a cambio?- Le digo con desconfianza.

- Me debes una.- Me dice encogiendo los hombros con una sonrisa.- ¿Trato?- Me extiende su mano, yo asiento y le cojo la mano sellando el trato.- Vale, después del instituto te quiero en el loft de Derek, solo.- Me dice mirándome fijamente.- Cualquier amigo puede ser una distracción.- Yo asiento con una sonrisa.

- Me tengo que ir Peter un placer verte.- Le digo levantándome y haciendo una señal a Mason. Este se despide de Cory y le da un papelito. Le paso el brazo por los hombros a Mason y nos vamos a mi casa.