BETWEEN US (Aizen - Byakuya x lectora)

VI - ARRANCAR

"No tengo nada por lo cuál luchar, sólo quiero sobrevivir"

El tiempo es extraño en Hueco Mundo, más allá de la eterna noche que reina, un día es incontable. En Hueco Mundo la inmortalidad es posible. Sin embargo, los hollows están demasiado ocupados depredándose unos a otros como para descubrirlo o tal vez...

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Nunca le gustó sentir dolor, por eso odiaba cuando sus presas luchaban y la herían, aunque, ahora lo estaba soportando sin queja alguna. Al final, después de años de persecución, el hombre extraño de vestiduras blancas e inmenso poder terminó convenciéndolos, en parte porque fueron acorralados a aceptar y en parte porque la vida en este mundo no era más que muerte y destrucción – ¿Por qué no darle un sentido a todo ello? – pensó.

Desde que aquel hombre empezó a usar una esfera a la que llamaba "hogyoku" en ella, sus pensamientos se ordenaron, el lenguaje limitado que recordaba ahora se expandía a miles de palabras que estaba segura haber usado alguna vez. Pero, por sobre todo podía sentir su poder incrementar aún más. Llevaba horas siendo "convertida".

Estar quieta no era lo suyo, después de haber vivido todo lo que recuerda en medio del caos, había aprendido a estar alerta. Tampoco le gustaba el miedo, por eso decidió seguir a Ulquiorra cuando lo conoció, el instinto le dijo que al lado de él no pasaría miedo. Y así fue hasta que apareció Aizen, quien les mostró el poder más allá de la comprensión incluso de alguien tan perspicaz como Ulquiorra. El miedo de ser cazada por ese poder hizo que ella aceptara primero unirse al ejército de arrancars, Ulquiorra la siguió.

La hogyoku seguía brindándole poder – Los que tienen poder, no tienen miedo – pensó. Hace mucho tiempo dejó de buscarle una explicación a las cosas que no entendía, debido a ello ni ella misma comprendía su accionar en ocasiones. Los recuerdos antes de conocer a Ulquiorra eran borrosos, por eso cuando Aizen le preguntó porqué no tenía una máscara ella no supo que responder. Recordaba haber tenido una, pero no cómo la perdió.

La fría mirada de Aizen estaba posada en ella, tenía varias preguntas sobre lo que era. Estaba expectante sobre el resultado de este experimento, si sus suposiciones eran correctas,  ella era una arrancar natural,  entonces ¿Qué resultado daría la Hogyoku en su cuerpo y reiatsu? Hasta el momento, estaba recibiendo el poder sin problemas.

- No es una arrancar completa – concluyó en voz alta, los rasgos animalescos y algo deformes de su rostro y la conexión con la Hogyoku daban a entender eso. Sin embargo, aún no entendía la naturaleza de ella, descubrir que era una hembra de por si le causó sorpresa, para luego darse cuenta de que la máscara que usaba no era suya sino de algún otro hollow.

Quiso saber cómo logró hacerlo, pero ella le aseguró que no recordaba. Otra duda más sobre lo que era en realidad la muchacha. Había vivido como animal salvaje y como tal, no tenía un nombre. Debía darle uno, pensó un poco, miró la forma de su cuerpo y recordó lo que Ulquiorra había descrito sobre los poderes de ella.

- Es capaz de transformarse en casi cualquier ser y camuflarse con el ambiente. Cuando se transforma también oculta su presión espiritual, es sigilosa y expulsa veneno, pero casi nunca lo usa porque cuando envenena a su presa ya no la puede devorar.

- ¿Caza por diversión?

- Por instinto

Era interesante, no podía negar que estaba intrigado por descubrir que era exactamente. Un nombre repentinamente llegó a su cabeza y decidió que así la iba a nombrar. Continuó con el procedimiento, la observó bien, la energía que ella emitía le hacía recordar a sus primeros experimentos con hollows. Desde ese entonces hasta ahora todo iba de acuerdo con el plan, excepto por lo que pasó con Kuchiki Byakuya. Pensó en el arrancar que desapareció por esas épocas, tenían una energía similar, quitó esos pensamientos sabiendo de que su suposición era imposible.