Cuando me desperté por la mañana, Karma había preparado el desayuno, había mucha comida pero aún así me lo termine todo porqué por la mañana tengo mucha hambre. Me di cuenta de que había salido con el pijama y fuí a cambiarme rápidamente, al salir Karma me dijo:
Karma: ¿Sobre qué hora te vas a ir mas o menos?
Yo: No sé, mi hermano me dijo que a las cinco de la tarde me quería en casa o sea que saldré de aquí a menos diez o así ya que mi casa está relativamente cerca.
Karma: Vale, era simple curiosidad *sonríe*
Yo: *Le devuelvo la sonrisa*
Pasa la tarde y ya es hora de que vuelva a casa
Beso a Karma y voy para casa, al llegar me encuentro a mi hermano plantado en la puerta.
Cris: Vaya vaya, justo a tiempo, creí que llegarías tarde.
Yo: ¿Por qué? Yo al contrario que tu llego siempre puntual a los sitios.
Cris: Eso no es lo importante, ¿Por qué te fuiste sin mi permiso y qué pasó ayer?
Yo: Salí sin tu permiso porqué tu no me mandas y no pasó nada especial, simplemente me quedé dormida como siempre.
Cris: No sé si creerte.
Yo: ¿Sospechas de mi palabra?
Cris: Si
Mi telefono interrumpe la conversación era un numero que no conocía, ademas la llamada estaba hecha de manera que el numero no fuera visible. Respondí.
Asano: Hola Tora
Reconocí enseguida su voz, sabia que era él, el chico que me había atacado ayer, pero est vez su voz era más relajada, como si no hubiera pasado nada ayer y yo no fuera más que una amiga de él, estaba congelada, no sabia que decir.
Asano: Tora, te llamo para decirte que tengo una estrecha relación con un conocido tuyo... No es Karma.
Yo: E-emmm... ¿Quien?
Asano: *Ríe* Eso lo averiguaras pronto Tora.
Yo: ¿Por qué tanto misterio? ¿Por qué a mí? ¿Se puede saber de que me halas?
Asano: Son buenas preguntas... Que no voy a responder.
Después de decirme eso colgó el telefono. ¿Qué acababa de pasar? No había entendido nada.
Cris: ¿Quien era?
Yo: Nadie, un compañero de clase que me gastaba una broma, nada más, ya sabes como es la gente.
Cris: Vale *mira la hora* se ha hecho tarde y todavía tenemos que preparar las mochilas cenar y... *ríe* iba a decir hacer los deberes pero tu ya los has hecho y yo... *no termina la frase y ríe*
Yo: *Lo miro seria* No tienes remedio Cris.
Después fuimos a preparar las mochilas, cenamos y nos fuimos a dormir.
Por la mañana, nos vestimos, desayunamos y nos fuimos para el instituto. Al llegar en la puerta solo estaban esperando Dylan y Aaron, Miranda no estaba.
A la hora del patio, llegó Miranda, aparentaba triste así que fuí a hablar con ella.
Miranda: H-hola Tora... *con voz de tristeza*
Yo: Hola, ¿que te ha pasado Miranda?
Miranda: Nada... estaba... E-en el medico... *sonrió levemente intentando disimular*
Enseguida me fije en que llevaba una sudadera larga y que cubría mucho sus brazos, le llegaba hasta los nudillos, por lo cual solo podia ver sus dedos, la tome por el brazo y...
Miranda: Aich... N-no me cojas por el brazo... me duele *se separa*
Yo: Lo siento... Miranda... ¿Qué te pasa en el brazo?
Miranda: Nada... *se baja rápidamente la manga de la sudadera y se va*
En los pocos segundos que pude observar su muñeca vi que llevaba las muñecas vendadas... No se que le habrá podido pasar, pero está claro que nada bueno, eso seguro. Intenté comenzar a sacar mis conclusiones y teorías... Pero, no tenia ni la menor idea de que le habría podido pasar, pero debía ser algo muy malo porqué le había quitado la sonrisa, esa no parecía Miranda... Le había pasado algo y pensaba averiguar el qué.
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Más allá de su sonrisa
RandomTora, una chica de 14 años, cambia de país por economía y trabajo de sus padres. Lo que ella no sabe es que el chico del que se enamora no es quien dice ser.