SEVMIONE, Gracias a Albus el adusto profesor de pociones Severus Snape tiene que soportar como aprendiz a la señorita Hermione Granger con el fin de proteger a Potter, por ello se ve obligado a pasar el verano con ella con el fin de comenzar su apre...
Llegaron a una butique un poco apartada de la calle principal, era pequeña y decorada con buen gusto, la dependienta estaba la treintena, era un poco más alta que Hermione, tenía el pelo muy liso y de color negro azulado y atado en una cola de caballo, la dependienta llevaba un traje tipo sastre de color gris perla y con muchos collares de perla unos más largos que otros.
-Buenas Tardes Bernadet
-Hola Hermione, que alegría verte, oh y vienes acompañada, soy Bernadet una amiga de la familia.
-Sabes que siempre fuiste más que eso.
-Todavia duele
-Si lo sé, en casa todavía no hablamos de eso.
-Te has graduado ya, es tu segundo titulo, enhorabuena
-Si en realidad ya he terminado mis estudios pero he venido porque estoy buscando un vestido para la graduación y otro
-Para la fiesta que van a hacer tus padres el día de después lo sé.
-Vaya, si que estas informada, quien te lo dijo.
-Hannah, tu madre, ella me llamó para invitarme y si voy a ir.
-Bueno, pues ya que estas tan bien informada tendrías el placer de enseñarme algún vestido ya sabes que no los quiero ni muy entallados ni con mucho escote, y al ser por la mañana a eso de las doce, pues no lo quiero largo.
-Si me imaginaba, vamos a ver que tenemos, te enseño varios y me dices, si no me veas así, cielo, para saber si te quedan bien o no tienes que probártelos.
-sabes que la palabra de honor no me gusta para esos eventos, no es una fiesta o una boda es un evento serio y académico.
-Si ya se pero de todas formas pruébate los vestidos que te he sacado para ver cual es el que te queda.
-Bien, bien, siempre haces lo mismo
-Y en muchas de las ocasiones he tenido razón.
Hermione se fue al probador con los tres vestidos y mientras que se desvestía, Bernadet le ofreció un café a Severus ya que iba a tener para largo rato, este acepto el café mientras que esperaba.
-Venga sal, que te veamos el profesor Snape parece que tiene ganas de matarme.
Él solo la fulminó con la mirada pero se abstuvo de decir algún comentario hiriente, se estaba impacientando porque llevaba dos horas en el probador y no salía, hasta que por fin salió con un bonito vestido que llegaba justo por encima de las rodillas, el cuerpo era de saten verde esperanza y las mangas de un tul de color negro.
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