Carta número treinta y dos

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Me di cuenta, mientras pensaba en ti, que eres mi crush. Es ridículo, porque jamás te consideré como tal, pero pensándolo bien, si lo eres. Eres la que me causa mariposas en el estómago. La que me tiene en las nubes todo el día. La que me causo algo poco digno de mencionar mientras usaba pequeños shorts en educación física. Eres la luz de mi vida.

Pd: gracias por existir.

No Te Olvides De SonreírDonde viven las historias. Descúbrelo ahora