Capitulo 12

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Maratón Día 2/3

Monique

No me podía arrepentir de haber dicho a Allan que hiciéramos el trabajo en su casa, ya era muy tarde para eso, lo siguiente era intentar hacerlo entrar en razón y que se diera cuenta que estar cerca de mi lo perjudicaría, que lo único que lograría era apagar los colores de su vida, introducirlo en un mundo gris lleno de odio, tristeza y remordimiento.

Tardo unos minutos en reaccionar lo que le había dicho, pero a penas lo hizo, una sonrisa al parecer permanente se posó en su boca, lo quede viendo de forma extraña ya que su expresión era algo traumático, este chico irradia demasiada felicidad.

-Me alegra mucho que hayas tomado la iniciativa para el trabajo – dijo aun sonriente – y claro que nos podemos reunir en mi casa.

Intente lucir tranquila, así que solo asentí a todo lo que dijo, eso le dio a entender que podía entablar una conversación conmigo porque siguió hablando sobre el trabajo y otras cosas más, intente prestarle atención, pero me estaba abrumando.

No me percate de quien más entraba en el aula, hasta que la tuve frente a mi escritorio, al levantar la vista me encontré con una Scarleth muy nerviosa, supongo que por la presencia de Allan ya que intentaba sonreírle muy segura de sí misma, pero sin lograrlo.

-Hola Scar – Allan la saludo con mucha naturalidad, ella tartamudeo un poco, pero le devolvió el saludo, luego su mirada se desvió hacia mí.

-Monique puedo hablar contigo? – solo asentí como por inercia, esto no sería bueno – en privado por favor – repitió.

En ese momento me di cuenta lo que realmente me decía, hoy andaba algo lenta, me levante de mi escritorio y la seguí, pero antes de salir Allan me habló, así que voltee.

-Monique?

-Si?

-Eh, no nada, solo que...

Scarleth me tomo del brazo y guiño de mi hacia no sé dónde, no me soltaba y no pude escuchar lo que Allan quería decirme. La chica llevaba prisa, de seguro no quería que nadie la viera junto a mí, porque su reputación podría verse afectada por estar con la friki del instituto.

Llegamos a los sanitarios, no le basto y nos metimos en un cubículo.

¡Vaya! la chica quería privacidad total.

-Escúchame bien – siseó nerviosa – no quiero que le digas a nadie, pero absolutamente a nadie lo que viste.

-De que hablas? – dijo lo más serena que pude – yo no he visto nada – mi voz algo temblorosa con la última palabra.

Ella se río con sarcasmo, endureció su mirada y levantando su mano. ¡Oh no! Me piensa bofetear.

-No, no te voy a bofetear, no me pienso contaminar contigo – río mientras su mirada me recorría de pies a cabeza – suficiente hice con tomarte del brazo, pero no importa con tal de dejar todo claro.

Cuando pensé que todo este enredo había terminado, habló una vez más, una última advertencia, una que si pudiera la cumpliría al pie de la letra, pero por el momento me es imposible, de eso le tiene que agradecer al Sr. Harris no a mí.

-Mantén tu asquerosa presencia lo más lejos posible deAllan – pausa, maldita sea una pausa muy larga – o prepárate para recibir másque un bofetón.


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Hola aquí el segundo día de maratón... Espero les guste el capitulo, si es así, no olviden votar o comenta.

Nos vemos mañana... Les deseo una linda noche.

Eso Que Llaman Amor #Dammys2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora