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Narra Nuria
2 semanas después.
Estaba sumamente aburrida, no podía creer que no haya internet en un aeropuerto, las horas se me hacían como un día completo, así que para no aburrirme saqué unos de mis cuadernos de dibujo.
Originalmente solo iba a escribir rimas tontas, pero me aburrí y esas hojas terminaron en la basura, así que decidí continuar con un dibujo que jamás terminé.
También terminó en la basura.
-¡Me aburro!.-grité, hubo un silencio, algunos me vieron , por unos 5 segundos y después regresaron a sus cosas.
-Y así fue cómo quede como una loca...-susurré para mi.
Entonces solo comenzé a hacer garabatos en mi libreta cuando..
Se había cortado la luz.
Y si, nadie sospechaba nada, solo era un error en la aerolinia.
Eso pensabamos.
Comenzamos a alarmarnos cuando un avión empezó a despegar, pero al hacer esto perdió el control y se estrelló cotra otro.
Los dos tenían personas.
Y había fuego, mucho fuego, yo quería ayudar para ver si podía rescatar a alguien pero el avión se incendió por completo.
Entonces los oficiales nos dieron la orden de que evacuaramos, la gente grababa con sus celulares y algunos corrían hacia la salida, muy inteligentes.
Los aviones explotaron y fue ahí cuando se incendió todo
La gente comenzó a asustarse y empezó a robar todo lo que podía.
Y como yo no soy estúpida, evacue rapidamente, sentía como mis pies me traicionaban y se volvian debiles, estaba a punto de caer en llanto por el susto de morirme, logré salir, y estava dispuesta a pedir ayuda, pero no me di cuenta cuando la aerolinea explotó atrás de mi.
Me tumbé al suelo.
Y de repente no escuche nada, solo un zumbido agudo que lastimaba mis oidos, acompañada por la canción de mi madre de buenas noches, después se mezclaba con las risas de mi padre y mi madre, con los gritos de emoción, y se mezclaban mas sonidos de recuerdos, tanto así que me mareaba la cabeza.
Pero tiempo después solo habia silencio, escuchaba los  latidos de mi corazón acelerados.
Mis parpados eran pesados, se me dificultaba abrir mis ojos, pero en cuanto los abrí, inmediatamente escuché a los oficiales llegar, el sonido de mi respiración agitada era lo que mas escuchaba.
Y entonces, una señorita me puso los dedos en mi cuello.
-Está viva.
Yo apenas podía ver con los ojos entrecerrados.
-Oye, ¿Me escuchas?.- preguntó la misma señorita.
Yo solo asentí con la cabeza.
-De acuerdo ¿Cuál es tu nombre?
-N-nuria.-dije entre susurros.
-Deacuerdo Nuria, pronto te atenderán traquila.
pasaron 5 minutos después y todo era un caos, las personas lloraban, gritaban de dolor al ser  atendididas esas quemaduras.
Y yo no sabía nada de mis padres.
Por fin llegaron mas médicos, pero de hecho no llegaron en autos, si no en bicicletas.
Mientras curaban mis heridas en la cabeza, un oficial se dirigió a mi y me preguntó cual era mi nombre, cuántos años tenía y en donde vívia.
Yo contesté correctamente todas las preguntas, pero cuando yo le dije mi dirección, una cara de preocupación y de pena se hizo presente en su rostro.
-Oye niña, ¿Estás segura de que vives ahí?- me preguntó el oficial.
-Si, ¿Porqué?.- le contesté angustiada.
-Yo... lamento decirte esto, pero es seguro que no vuelvas a ver a tus padres.
-¡¿DE QUÉ ME ESTA HABLANDO?!.-contesté asustada.
-Hace cuatro horas hubo un terremoto muy fuerte, toda las casas fueron destruídas y aún no se detectan sobrevivientes...- en ese momento las lagrimas salieron de mis ojos, ya no lo podía contener-Yo en serio lo lamento, veré que podemos hacer.- después de decir esto, se retiró y me dejó ahi llorando.
Lo único en lo que podía pensar es en las palabras de mi mamá.
-mi niña, ¿Porqué lloras?
-Es que tuve una pesadilla.
-Las pesadillas solo son un mundo en donde todo está de cabeza, ahora duerme otra vez, y recuerda que las princesas no lloran.
Me quedé completamente sola.

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