Querido Niñero 🍼 HunHan

Capítulo 7

—Tiene que ser un pecado ser tan bonito —dijo Amber a SeHun y el resto del personal, al ver al fotógrafo creando una escena artística con Lu Han.

JongIn había llegado antes e hizo su parte para a continuación irse a casa a estudiar porque sus exámenes finales estaban solo a una semana.

El tío ChanYeol había tenido que ahuyentar a las encantadoras diablesas empleadas en el edificio, dando tiempo a Lu Han para que le hicieran sus fotos.

Lu Han era natural, con buen ojo para la cámara, una sonrisa encantadora y un cuerpo de modelo delgado.

SeHun se acomodó en un asiento, disfrutando de la vista.

—¿Podemos obtener algunas fotos con el pelo alborotado? —el fotógrafo le preguntó.

Lu Han vaciló, miró a su alrededor y luego se despeinó el pelo.

—Sí, es pecaminoso, ¿verdad? —SeHun respondió, sin importarle si Amber escuchó el deseo en su voz.

Él y Lu Han nunca llegaron terminar lo que empezaron la noche anterior.

MinKi, tuvo fiebre otra vez y Lu Han descubrió que la pequeña molestia era que le estaban saliendo los dientes.

El pobre de Lu Han tuvo otra noche sin dormir, pero era difícil notarlo en este momento.

No necesitaba mucho maquillaje para la sesión de fotos, lo suficiente para cubrir las oscuras ojeras bajo los ojos.

Amber había insistido en que necesitaba un poco de brillo labial para hacer los labios más atractivos.

Lu Han se resistió al principio, pero SeHun le aplicó un poco, satisfaciendo a Amber y poniendo a SeHun muy caliente.

—Chico, tu pelo es genial —dijo el fotógrafo, con rapidez tomando fotos.

—Las chicas van a derribar la puerta sólo para llegar a ti.

Déjalas que golpeen la puerta, SeHun reflexionó. Lu Han definitivamente no contestaría.

—Tal vez mañana tomaremos algunas fotos de Lu Han y JongIn juntos. Estas chicas se vuelven locas por dos chicos que posan el uno para el otro—insistió el fotógrafo.

SeHun trató de imaginar una foto con JongIn y Lu Han juntos. Sí, definitivamente la imagen colgaría por encima de su cama. ¡Hmmm!, eso le hizo pensar si ellos dos habían estado alguna vez enamorados. Habían vivido juntos y compartieron una habitación desde hacía cuatro años pero por alguna razón no lo creía. Parecían más hermanos que amantes.