Pasado III

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El pozo estaba dividido en dos, por un lado estaban Jack y Tyrone, este ultimo ya mostraba signos de deshidratación, por otro lado Enyel de quien los demás desconfiaban.

Rápidamente pasaron dos días, ya era la fecha acordada para recibir alimentos de parte del hombre aquel, aún desconocían la razón de por que hacía esto, pero era obvio que no era para algo bueno por lo que evitaron preguntar para no perder la esperanza de salir de aquel agujero.

El les había dicho, de la supervivencia del más acto o fuerte, pero, ¿ eso que significaba realmente?

¿Los demás serán desechados?

No entendían exactamente el significado obvio de lo dicho por aquel sujeto, o quizás no querían entender la realidad en la que se encontraban, todo pasó muy de prisa, adopción viaje y por último estar en un pozo pasando hambre y sed.

Son tres, algunos pensaran se unen y matan al hombre, claro fácil decirlo, en un mundo en el cual hay bestias salvajes con intelecto y algunas personas con habilidades sobrenaturales, ¿quien sabe quién o que era ese sujeto?

Solo tenían 8 años, todo esto los superaba, pero la realidad es cruel y no tienen otra salida.

El hombre se acercó al pozo y observo atento la situación dentro, vio la división que los niños crearon, una sonrisa de le dibujo en la comisura de los labios, parecía satisfecho con el resultado de su artimaña.

Saco dos panes artesanales de una pequeña cesta, eran ovalados y tenían parecían tener algo en el interior, quizás algún tipo de carne de algún animal.

Uno era del tamaño de una mano extendida y otro de un puño.

Lanzó el más grande primero , el cual cayó a los pies de Jack, este miró el pan en el suelo cubierto de algo de paja, miró al hombre y dudoso unos segundos, se agachó y recogió el pan.

Enyel se levantó del suelo, y miró el pan en la mano de Jack, era de un tamaño considerable y podría dividirse en dos. Su línea de pensamiento fue interrumpida por el sonido amortiguado el segundo pan cayendo al suelo junto a Tyrone, lo vio dudar unos segundos y después lo recogió.

Jack observo al hombre que se marchaba y piso su vista en Enyel que lo miraba fijamente a el y al pan en sus manos, no pudo evitar fruncir el ceño, pues no sabía qué hacer a continuación, dudaba, habían estado juntos desde los 4 años cuando fueron abandonados por sus padres en el centro de adopciones.

No podía creer del todo el por qué el los traicionaría, pero el agua resultó no ser agua, y aquellas palabras que dijo el sujeto, todo era muy confuso, pero el bebió del agua y no le pasó nada.

Nada tenía sentido.

Miró el pan en sus manos y con un poco de esfuerzo lo dividió en dos mitades, con algo de duda aún persistente lanzó el trozo de pan a Enyel quien lo atrapó fácilmente, miró a Jack algo confundido y sin dudar más devoro el pan en sus manos.

Tyrone observo todo el proceso en silencio y también empezó a devorar el pan en su propiedad.

Todos terminaron de comer y se sentaron el el suelo algo satisfechos.

¿Que más se necesitaba más que alimentos y agua?

Pero sobre el agua...los labios de Tyrone eran cada vez más pálidos y se podían ver algunas llagas en estos...

Los tres quedaron completamente dormidos minutos después, una sombra se asomó al pozo y los observo en silencio durante varios minutos sin moverse de su posición ni producir algún sonido.

Notó la mirada pacífica en el rostro de los niños y parecía algo disgustado, era el hombre nuevamente, había pensado que dejarían sin comer a Enyel debilitándolo y haciéndolo el eslabón más débil, Jack tomaría el trozo de pan más grande para el instando la envidia de Tyrone quien le guardaría algo de rencor, entonces solo tendría que tirar el próximo trozo de pan grande ha Tyrone quien lo querría para si mismo.

Esto provocaría a Enyel quien tendría delirios debido al hambre y la envidia de Jack quien ya había disfrutado de tener más para si mismo, después solo sería cuestión de tiempo que se destruyan entre sí.

Pero todo estaba fuera de sus planes.

Pero no estaba preocupado, pues había puesto una droga debilitante en el pan de mayor tamaño así Jack no podría defenderse en condiciones contra un hambriento Enyel, pero ahora habían dos debilitados debido a la amabilidad de Jack, solo necesitaría lanzar una botella de agua a Tyrone y la discordia gobernaría dentro del pozo.

Sin dudar más, lanzó una cantimplora a Tyrone quien dormía plácidamente con la boca entre abierta.

Se escucho un sonido seco cuando está cayó sobre su rostro despertándolo algo sorprendido, la cantimplora callo al suelo, miró lo que lo había despertado y la alegría de dibujo en su rostro, sin pensarlo dos veces destapó la cantimplora y bebió de tres tragos todo el contenido.

Dejo escapar un pequeño suspiro de satisfacción y se humedeció los labios con la lengua.

No se había dado cuenta que algunas de sus acciones apresuradas habían alertado a los otros quienes dormían cercanos a el.

Se sentaron lentamente y lo observaron con la cantimplora aún en mano, buscaron con la vista la cantimplora de días atrás, y la vieron apartada en un espacio vacío, después volvieron a mirar la cantimplora en manos de Tyrone, mientras dormían Tyrone se había bebido la ración de agua.

Tyrone Los miró y ellos lo miraron a el.

-Les dije que había un traidor, pero no les dije quien.-

...

Un joven se despertó de repente, se sentó en la cama de piedra con lentitud y se llevó ambas ambos a la cabeza.

-Otra vez lo mismo, no debería pensar tanto en ellos, murieron y yo sobreviví, el ganador es quien escribe la historia.-

Asesino CrepuscularDonde viven las historias. Descúbrelo ahora