Entre El Bien Y El Mal ·Cornelio Vega jr·

Capítulo 20

Ainhoa PO-V
Llego el lunes, ese día no habían clases por quien sabe que cosa, así que la idea era no hacer nada, aún estaba cansada de la fiesta del sábado, asi que estaba en mi casa descansando cuando me llegó un mensaje

Cornelio.- morrita, quiero nadar un rato ¿Vienes?

Qué emoción, yo amo la alberca gigante de casa de Cornelio, siempre me he querido meter, claro que acepte

Ainhoa.- claro, vente por mí en una hora

Cornelio.- vale pues, te veo ahorita, traes tu traje, no lo olvides

Comencé a arreglar mi traje de baño, me lo puse junto con un short para ahorrar tiempo, me puse unos tenis pero llevaba unas sandalias en mi mochila, heche mi dinero y demas, baje y comencé a desayunar, estaba yo sola a esa hora, pero envié  mensaje a mis papás para que supieran que salí,  en cuanto termine de lavar los trates Cornelio ya estaba afuera, salimos rumbo a un supermercado, compramos cervezas para Cornelio y Valentín, y botanas de todo tipo, llegamos a su casa, estaban los demas hermanos de Cornelio, Ramón y Santi.
Entrando Cornelio se quitó la camisa, también el ya traía puesto el traje de baño, yo me quite el short, traía un traje de baño de dos piezas, en color rojo, pero traía una sudadera para que en el camino no se me viera raro, me quite los tenis y al momento sentí que alguien me cargo, ese alguien se arrojó al agua conmigo cargada, era Cornelio, se me metieron a la alberca sus hermanos, también de un salto,  Cornelio y yo nos sentamos por decir de alguna forma abrazados en los escalones, se acercó Valentín a platicar

Valentín.- ¡Ainhoa! La morra de la fiesta está bien shula, ¿cómo se llama?
Ainhoa.- se llama Lía, si es bastante bonita, era mi mejor amiga, pero creo que a ella no le interesa así que..
Cornelio.- ya pasará chiquita, ella se lo pierde
Valentín.- no digas que es la chava que venía con el wey al que le rompió la madre el Corne
Ainhoa.- así es
Valentín.- pues me gustaría más conmigo que con ese idiota
Ainhoa.- a mi también me gustaría más contigo
Cornelio.- ese baboso la llamo perra y su amiga se enojó por qué yo la defendi

Seguimos hablando del tema, al parecer a Valen le gustó mucho, luego jugamos boley ball y cosas asi, salimos para comer, mientras lo hacíamos, mire que Cornelio tenía varias cicatrices en el pecho, no muy marcadas pero estaban, y al regresar a la piscina comencé a preguntar

Ainhoa.- Cornelio ¿Qué te a pasado en el pecho? Tienes muchas cicatrices

El se empezó a reir, sonríe muy bonito

Cornelio.- asi es morrita, te cuento, esta es del primer atentado que tuvimos, hace muchos años, estaba bien chabalo, pero ni modo

Señaló una de las heridas más grandes que tenía y continuo señalando cada una de la que hablaba

Cornelio.- está fue de una pelea, el naco ese traía navaja, esta es de un disparo en una narcofiesta, traición como siempre, está otra es una quemada de cigarro de una loca que estaba en una fiesta, me la... Tú sabes, y como no quería que me fuera de enojo, y me quemo con el cigarro que traía en la mano

Ambos nos soltamos a reír, aún que igualmente que mujer tan loca y aferrada, pero bueno, seguimos platicando hasta que Valentín nos vio el tatuaje y se acerco y solto interrumpiendo las risas y la conversación en si

Valentín.- con que tatuaje de pareja ¡Ah!

Cornelio y yo nos miramos con gracia y soltamos un "si" al aire, le contamos que significa, seguimos la charla un rato, fue una buena plática, luego Valentín nos empezó a sacar fotos, muy buenas por cierto, Cornelio subió una y yo otra, los "me encanta" llovian, en definitiva somos una linda pareja, pero no somos los típicos cursis que desesperan, simplemente, somos felices juntos, le pese a quien le pese.

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Salimos de su casa para la mía, el se fue, me bañé y puse pijama, lo normal, ya estaba dormitando cuando en eso oí el teléfono, era un mensaje

Cornelio.- asómate desde tu cuarto

Corrí a la ventana confundida, me asome y ahí estaba Cornelio, abri la ventana y Cornelio escaló hasta entrar por ahí, se coló en mi cuarto, y me dio un beso, nos pusimos a ver la televisión, ambos recostados en mi cama, mi mamá ya se había dormido, vimos la tv un rato, luego comenzamos a besarnos, y obviamente Cornelio comenzó a prenderse y ... Lo de siempre, de momento le corté la inspiración, yo aún creo que es algo pronto, se qué pasará, por qué enserio lo quiero, pero no ahora, Cornelio acepto no seguir, siempre lo acepta con facilidad, eso me agrada, con el nada tiende a ser afuerza, ya ni siquiera se molesta con eso, seguimos viendo la película tranquilos hasta que, mi mamá tocó la puerta de la nada, Cornelio se metió bajo la cama lo más rápido que pudo

Ainhoa.- ¿qué pasó mamá?
Mamá.- ¿Por qué se oyen dos risas?
Ainhoa.- ¿Dos risas? Ahhh una está en la película
Mamá.- ¿Segura? Me sonó a Cornelio
Ainhoa.- si, segura, estoy sola ¿No ves? -dije riendome
Mamá.- de acuerdo, ya duérmete
Ainhoa.- no tengo sueño, duerme tranquila mamá
Mamá.- está bien, hasta mañana, buenas noches

Se fue, Cornelio salió de debajo de la cama y ambos comenzamos a reír, mi mamá se la creyó, seguimos viendo la película hasta que terminó, Cornelio volvió a salir por la ventana y se fue a su casa, aviso por mensaje que ya había llegado, así me tranquiliza más.
Pase la noche mirando las fotos del día, fue un gran día, y acariciando mi cadena, la que me dio Cornelio por mi cumpleaños, la escogió perfecto, creo que la mando a hacer, no lo sé, pero se mira muy costosa, me costó  aceptarla pero es que es muy hermosa, no me la he quitado para nada, así está bien, ahí está perfecta, así seguí hasta que me quedé dormida.