¿Os ha pasado alguna vez?
Estáis enamorados, y vuestro corazón no deja de latir por ella o él.
Estáis pensando en un futuro ideal
junto a la persona en la que no dejáis de pensar.
Pero os dais cuenta de que desgraciadamente,
no podéis tenerla frente a frente
ya sea porque vive muy lejos
o porque cuando estás cerca de esa persona, te suben los nervios.
Te quedas callado hasta que sueltas cualquier tontería,
esperando a que finalmente haga alguna sonrisa,
pero sabes que no es porque la haces feliz
si no para que tu corazón no deje de latir.
Y si hablamos sobre aquellas relaciones a distancia
en las que por mucho que se amen, no pueden compartir una cama.
Que en las noches piensen, que cualquier día
puede caerse el internet y sentir una fría despedida.
En eso piensan la mayoría de aquellas personas cada noche:
"¿Qué pasaría si todo se acabara?" Haciendo que lloren y lloren...
Al igual que aquellas personas que son tímidas,
que se paran frente su crush y no tienen una visión nítida.
Que se exprimen la mente de un modo exagerado
buscando algún tema para no quedarse en blanco,
Pero ven aquella cara... Aquella persona que les enamora
y se ven consumidos por su belleza, haciendo que su pecho se encoja.
A muchas personas les ha hecho esto trizas el corazón,
pensando que con aquella persona no tienen opción.
Pensando: "¿Cómo puedo ser alguien para aquella persona que con una palabra me acaricia el alma?"
Y esos pensamientos hacen que cada vez lo intenten con menos ganas...
Os doy un consejo: Mandad a la mierda todo eso.
Vosotros sois los que decidís cuanto valéis, en función a vuestro empeño
en conseguir algo que os motiva, que os da la felicidad, que os abriga el corazón.
Así que no os rindáis nunca, porque aquel día dejaréis de ser la persona que sois