❝ O2O ❞

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Venus.

No podía abrir mis ojos, sentía un terrible dolor de cabeza, lo último que recuerdo claramente era estar sentada en la mesa de aquél lugar lujoso, luego no recordaba nada con cierta claridad.

Sentí un peso en mí cintura, y al abrir uno de mis ojos, ví que no estaba en mí casa, volteé lentamente, y me encontré un Richie Tozier dormido a mí lado, una de sus manos pasaba por mí cintura y la otra la mantenía sobre el.

Me sorprendí al ver donde estaba, ¿Acaso tanto había tomado ayer?.
Sin moverme demasiado, me quedé observando a el de pecas, mientras dormía plácidamente.
Pero éste comenzo a removerse, hasta que al fín despertó.

—Buenos días— Susurró mientras me miraba, yo saludé de igual forma, pero tenía muchas preguntas en mí cabeza.

—¿Puedo saber que ocurrió anoche?— Me acomodé en la cama mientras miraba el techo.
El soltó una risa y me contestó.

—Estabas ebria, White. Ayer dijiste cosas como qué... No querías ir a casa hasta que Tommy vuelva, que no amabas a Dylan, Y me pediste que te besara...además lo hicimos— Mis ojos se abrieron de la forma más exagerada que podía existir.

—¿Qué?— Solté algo confundida, avergonzada y más.

Pero Richie solo explotó en risas, haciendo que lo mirará algo enojada.

—Es broma. Bueno... solo lo último es broma— Aclaró y me sentí un poco más tranquila.

Volví a respirar tranquilamente, pero ahora un silenció inundaba la habitación.

—Esto es extraño, ¿Cierto? Al menos para mí es extraño estar en la misma cama con la chica de la cúal estas enamorado desde que tienes trece años— Volteé a mirar a Richie algo desconcertada por su confesión, pero le seguí de igual forma.

—Igual de extraño, es estar hablando en este momento con el chico que te enamoró desde los trece años— Ambos soltamos una risa, sentía el calor subir a mis mejillas.

—Realmente quisiera que esto pasara todos los días, ya sabes, despertarme y ver que estas ahí— Rodee los ojos mientras le daba un golpe.

—No seas una nena— Sonreí burlona, pero este me devolvió el golpe.

—Hey, hablo enserio— Volví a golpearlo, y así una guerra de golpes comenzó.

Este se subió sobre mí, haciendo que no pueda tener escapatoria, así que solo comenze a reír.

—¿De qué te ríes?— Frunció el ceño mientras se acercaba a mí rostro.

Pero sonó el teléfono, interrumpiendonos.
El rápidamente fue a atender, mientras yo me levantaba e intentaba arreglarme un poco.

Richie volvió hacia donde estaba yo.

—Vámonos, se adelantan las cosas, hoy entraremos a los drenajes— Asentí y miré el reloj de mí muñeca.

Marcaba las 10:00 AM.
Me dirigí hacia el baño, mientras me hacía una coleta para estar más cómoda, y volví a la habitación, pero me encontré a Richie cambiandose.

—Wow, ya no eres un esqueleto— Bromee mientras me apoyaba contra el marcó de la puerta.

—Siempre estuve así de bueno, cariño— Habló con un tanto de ego, haciendo que me riera.

—Dejá de tirarte flores a tí mismo y vamonos, amigo mío— Caminé hacia la puerta y salí de allí, y Richie detrás mío.

Sentía una mirada fija en mí, así que volteé nuevamente a mirar al rizado y lo encontré mirandome el trasero.

—Richie, ¿Algúna vez cambiaras?— Pregunte intentando aguantar la risa.

—No puedo evitarlo — Se excusó mientras volvíamos a caminar.

(...)

Todos intentábamos elegir un arma, mientras nos preparábamos "mentalmente" ya que en unas horas entrariamos a darle fin a aquello.

Estábamos en casa de Bill y Abby, yo estaba tirada en el gran sofá, intentando no sentir miedo, pero estaba fallando, tenía mucho más miedo de aquélla vez que era pequeña.

Me sentía desesperada de no encontrar a Thomas, pero a la vez no quería ver a ese payaso.

—Ya estoy lista— Mentí mientras me paraba de aquél lugar, pues no estaba lista y no iba a estarlo.

Y así poco a poco fueron saliendo de la casa, para dirigirnos a aquella aterradora casa.

(...)

La casa se veía tan jodidamente aterradora, como hace veintisiete años atrás.
Pero un recuerdo paso por mí cabeza, mí primer beso había sido en esa puta casa, con Richie.

Reí para mis adentros, mientras tomaba una linterna y caminaba a la puerta.

Tomé el picaporte, pero antes de abrir volteé a ver a los perdedores.

—Perdedores, vamos a terminar con esto—
Todos se miraron entre sí.

Ellos estaban listos, pero yo no.

⠀⠀✧MIRROR, RICHIE TOZIERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora