Eugenia. Hay hermanos, como les envidió. Ya sé les propongo algo, cuando los niños ya se han un poco más grandes, me dejarían cuidarlos durante sus vacaciones, les aseguro que se van a divertir mucho.
Marcos. Sí, por qué no?
Mónica. Me parece, bien que te quieras volver su tía favorita.
Eugenia. Claro, esa es la idea.
Mónica. Bueno, brindemos por los buenos momentos y por todas nuestras alegrías futuras.
Marcos. Que así sea, Salud.
---------------------- De vuelta al presente-------------------
Felipe. Pero papá, ya tengo planes para estar todas la vacaciones de verano con mis amigos, porque tengo que estar en casa de tía Eugenia, todas las vacaciones. Que se supone que voy a estar haciendo?
Papá (Marcos). No discutas, a parte tus calificaciones de fin de año no fueron las mejores, recuerdas el trato que teníamos?
Felipe. Si me acuerdo.
Mamá. Entonces, prepara tus cosas, aparte no estarás solo, te va a acompañar tu prima Karla.
Felipe. Uy, sí que divertido.
Papá. No entiendo que les paso, si ustedes dos siempre hacían todo junto y siempre me decías que te gustaba pasar el verano con ella?
Felipe. Tú lo dijiste, gustaba. A parte nos vemos cada evento familiar y somos primos y yo si la quiero como prima.
En la casa de la familia de Karla.
Karla. Mamá, sabes que me gusta estar en casa de Tía Eugenia durante las vacaciones, pero porque tiene que estar mi primo?
Lo quiero y lo aprecio, pero sabes que a veces es demasiado infantil.
Mamá (Monica). Hija, has me este favor y te prometo que cuando regreses te compro lo que quieras, es más iremos a ver tu vestido para tus 15 años.
Karla. Está bien.
Mamá. Hija, ya estas lista? Recuerda que tengo que volver a buscar mis cosas para el viaje de trabajo.
Karla. Si, ya voy. A ver si ya esta todo.
Mamá. Y recuerda, siempre obedece a tu tía y no estés peleando tanto con tu primo.
Karla. Si mamá.
En otro lado.
Felipe. A parte de que me obligan a ir casa de mi tía y estar con mi prima, tengo que ir en uber. Bueno ya que.
Mamá (Monica). Bueno llegamos, mira ya viene llegando tu primo en ese vehiculo.
Karla. Tía, hemos llegado.
Felipe. Hola tía Monica. Karla.
Karla. Que tal primo.
Mamá (Monica). Que tal sobrino, bueno los vemos después que se comporten y no le vayan a ser maldades a su tía.
Ambos. Sí.
Karla. Por que tardará tanto tía Eugenia en abrir.?
Felipe. Yo que se, mientras viene voy a revisar mi Facebook.
Tía Eugenia. Dame eso!
Felipe. Oye, estaba usando mi celular.
Tía Eugenia. No, a partir de este momento, quedan prohibido el uso de celulares.
Ambos. QUE?.
Karla. Yo entiendo que mi primo, se un bueno para nada. Pero porque yo?
Felipe. Oye, estoy a tu lado.
Tía Eugenia. Adelante pasen.
Felipe. ¿ Qué le pasa a tía?
Karla. No lo sé, viene hace dos días y no parecía molesta.
Tía Eugenia. Buenos mis bebés. A partir de este momento, no van a tener 14 años.
Ambos. No te entendemos.
Tía Eugenia. A partir de este momento, los dos se volverán mis bebés por el resto de sus vacaciones.
Karla. Sí, entiendo que seamos tus bebés, pero literalmente, verdad?
Felipe. Exacto, lo que dice Karla.
Tía Eugenia. No literal, si no es un hecho. Ahora, si no quieren tener las nalgas todas rojas he hinchadas por nalgadas, síganme al cuarto.
Karla. Tengo miedo, Felipe.
Felipe. Tu como crees que estoy y lo peor del caso, ya no tenemos como hablar a nuestros papás y le puso llave a la puerta.
Tía Eugenia. Que tanto hablan, corazónes?
Karla. Nada, todo tranquilo
Tía Eugenia. Bueno, ahora sus cosas, me colóquenlas en el ropero y quítense la ropa.
Karla. No frente a mi primo.
Felipe. Lo mismo, digo.
Tía Eugenia. Ahora o les doy con el cinturón.
Y fue así como obedecieron, a pesar de tener ambos casi la misma edad, su aspecto era de niños más pequeños, pero con algunos detalles de adolescentes.
Felipe. Tía, por favor necesito mí ropa es muy vergonzoso estar así y sobretodo creo que mi cuerpo está reaccionando solo.
Karla. Ya basta tía, *llorando*
Tía Eugenia. Bueno esta bien, acuéstate en la cama Felipe.
Felipe. *Acostado*.
Y así fue como Felipe, fue el primero en ser colocado en pañales no de adulto, sino de bebé que eran lo suficientemente grande para el.
A parte le colocaron una camiseta algo corta con el dibujo de un dinosaurio y un short que apenas y cubría el pañal.
Cuando fue el turno de Karla, ella opuso un poco más de resistencia pero de nada sirvió y por a verse resistido, solo la dejaron con la blusa y el pañal expuesto.
Ambos jóvenes o mejor dicho bebés, no sabían que tantas cosas les iba a pasar ese verano con su tía, pero de algo si estaban seguros.
Que nunca lo iban a olvidar.
En el siguiente capítulo, las reglas del juego.
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Vacaciones con mi tía
Short Story*Basado en una fantasía muy personal*. Esta historia me embarca a mí y a una prima de mi edad de pasar unas típicas vacaciones con mi tía; a una donde a partir del instante en que cruzamos las puertas de su casa, dejamos de ser adolescentes y nos vo...